Capítulo 74 - Annabeth

Hoy, al fin, he comprendido el enorme peso que recae sobre mí.

La pesada responsabilidad que Adonai espera de mí.

¿Por qué yo?

Preguntarse eso no tiene sentido, pero igual lo hago.

Adonai me ha elegido, ¿por suerte? ¿Por qué fui alguna vez su amiga?, o simplemente he sido yo quién… se ha acercado sola a la verdad.

Durante más de 800 años, nunca he rezado a los Dioses, ni he hecho algo pensando en esperar sus favores, he vivido mi vida por mi propio egoísmo…

“Aquella que encontró la verdad a través de la Magia”

Ya lo entiendo… No encontré esta verdad por el amor a los Dioses, lo hice por mi amor a la Magia, por mi obsesión a perfeccionar mi propio poder, mi Meditación me llevó al camino de Madre y gracias a eso… estoy más cerca de ser Perfecta.

Los Dioses no me eligieron.

Fui yo quién caminó hacia ellos por propia decisión.

Adonai simplemente lo predijo… Predijo mi destino y me está favoreciendo para termine lo que he encontrado por mí misma.

Ah… Eso sí suena a algo que él haría.

Porque él respeta nuestro Libre Albedrío.

No hay Dios que ame la libertad más que él.

Mi adorado Dios del Viento.

Annabeth: -Lo haré.

Ahora estoy más decidida que nunca a hacerlo.

Annabeth: -¡Lograré la Perfección y se la enseñaré a todos!

Lirio: -Gracias…

Tome las temblorosas manos de Lirio para transmitirla la seguridad de mi determinación. Sé que contarme esta historia ha sido muy duro para él, pero igual lo hizo, ¿pero por qué?

Annabeth: -Una pregunta, esto no cambiara mi decisión, pero dime… ¿por qué me contaste sobre todo esto?

¿Adonai o Madre lo ordenaron?

Eso es lo que en verdad quiero saber.

Lirio: -Porque me prometí a mí mismo que nunca más volvería a perder a uno de los míos. Sé que estoy siendo egoísta al usarte. Si me odias por manipularte no te culparía. Solo quiero que sepas que yo lo daría todo por mi familia.

Lo sé.

Tu amor por Ran y tus hijos es lo más verdadero que existe.

Eres un buen padre, Lirio, algo descuidado e insensible, pero tu amor es verdadero.

Y el amor es el sentimiento más egoísta que existe, jajaja.

Annabeth: -Nunca podría odiarte por amar a los tuyos. Yo también daría todo por quienes amo. Aún si somos diferentes, eso es algo que tenemos en común, ¿no crees? Oh, gran Espíritu~.

He logrado sacarte una tierna sonrisa, solo con eso me siento recompensada.

Lirio: -Realmente… eres especial. Cuando seas Eterna~ vamos a pasarla genial~. Te voy a llevar a todos los mejores lugares que conozco~. Verás paisajes de ensueño que no podrás creerlo~. Y~ podré cortejarte como se debe~~.

Su seductor dedo me levanta la barbilla para mirarle a la cara. Mirar directamente esos dorados ojos con largas pestañas me quita el aliento. ¡Él es realmente hermoso!

Annabeth: -No caeré.

Digo firmemente cerrando los ojos y apartando su mano.

Annabeth: -Porque yo le pertenezco a Crow~~. ¿No es así? Vamos, Crow, defiéndeme~.

Lo abrazo más fuerte mientras lo balanceo en mi regazo.

Crow: -¡Beth! ¡Beth! ¡Mi Beth!

Jajaja, eso suena a algo que Raven diría, que vergüenza.

Un pequeño bebé está reclamándome como suya, mi agitado corazón va a explotar.

Lirio: -Compártela~. El amor de muchos es lo mejor~.

Annabeth: -Sí que amas la poligamia.

Con una gran sonrisa asiente muy orgulloso de mi comentario.

¿Se puede estar orgulloso de eso?

Lirio: -Solo con los seres correctos~. No soy como Pino y Abeto, ellos… no tienen autocontrol.

Pino y Abeto, los otros 2 Espíritus que tienen muchos hijos en este sagrado Templo. Si el mujeriego de Lirio opina eso… no quiero ni imaginar cómo son ese par.

Lirio: -Cómo estoy de buen ánimo y ya que estamos soltando secretos, puedes preguntarme lo que quieras~.

Esa es una muy tentadora propuesta.

Annabeth: -¿Puedo reservarla para otra ocasión? Ahora mismo no se me viene una pregunta que hacer.

Lirio: -¿No~~? ¿Cómo qué no~? Que aburrida~. ¿No sentías curiosidad por los Medio Espíritus? No soy chismoso, pero lo escuche~. Tu conversación con el pequeño Lobel~.