Tomé coraje y lo hice. Lo hice por ti.
Le pedí el divorcio a Leandro. Fue más duro de lo que imaginé, pero él lo entendió y lo aceptó; ese hombre es maravilloso.
Siento tristeza por los años que perdimos juntos, pero sé que él encontrará a alguien que lo ame como merece.
Mañana iremos al registro civil y pondremos fin a nuestro matrimonio. Tantos años siendo marido y mujer terminarán en un instante: solo firmar un papel y todo cambiará.
Luego él se irá de la casa que compartimos hasta ahora. Me dejó todo, no solo lo material, sino también el esfuerzo y la ilusión que, con sus manos, construyeron para nosotros este cálido hogar.
Aún me siento débil; quizás ahora, por fin, mis maltratadas alas tomen impulso y pueda volar.
Volar en busca de mi felicidad...
En busca de ti.
Y con cada latido, renazco para encontrarte.
Te amo más que nunca.
Amelia.
#1061 en Otros
#201 en Relatos cortos
#3105 en Novela romántica
drama dolor muerte, romance amistad, amorincondicional amorverdadero
Editado: 27.05.2025