Las cicatrices de un Ángel

Adicción por una persona, locura deliberada

Nunca había sido adicta a nadie, pero siempre había una primera vez para todo, aún me estoy recuperando de eso, ¿dije que le odie? pues eso solo aumentó el deseo, así de simple, todo lo contrario a mi pasado "amor", este parecía no querer dejarme nunca, pero ya estaba acostumbrada a que las cosas me salieran mal, al menos me sentía viva, más viva de lo que nunca me sentí jamás, todos mis sueños y metas se esclarecieron, él no me dio amor, pero me contagió un poco de su fortaleza, agradezco que me hiciera más fuerte, porque así pude aguantar el dolor descontrolado de mi corazón. Mi cuerpo, en cambio, se negaba a dejar esas sensaciones, esas que sólo provocaban él  y que eran tan nuevas para mí, aún las recuerdo, en el fondo algo me dice que su huella será para siempre, a pesar de que me fui, me esfume como la sirenita, como sólo yo sabía hacerlo, pero esta vez con la sensación de que no había acabado, de que lo encontraría en el futuro, solo espero que no sea mi subconsciente que se niega a dejarlo ir del todo. 



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En el texto hay: dolor, vida real, melancolía adolescente

Editado: 07.03.2019

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