Las Claves Del Indio

XXXVIII. ¿QUIÉN ES QUIÉN?

Finalizadas las intervenciones de ELCOVE, y prontamente agotadas las de sus émulos, debido al escaso o nulo ingenio que demuestran, Mercado Libre está muy aburrido y JUANO, uno de los pocos que sigue escribiendo al Club del Indio, así lo comenta: Hola desaparecido!!!, che se te extraña loco!!! qué triste esta ML sin tus Andanzas quijotescas... que desastre!! no hay nada potable y lo que hay siempre está en manos de los mismos mercaderes.

Y esto motiva a ELCOVE a confiarle a JUANO su idea de crear el sitio del Indio, lo que marcará el principio de su distanciamiento con el marplatense y el ineluctable derrotero hacia el trágico final de mi historia, pero antes habría que apuntar algunos antecedentes curiosos, como la última correspondencia anónima que recibe ELCOVE en el IndioClub y quizá es preferible empezar por allí, abandonando toda intención de establecer cronologías, ya que los sucesos se precipitaron y además, ni ELCOVE ni yo somos buenos para eso. Y no creo del todo que se trate de una carencia nuestra, en tanto –lo he dicho, pero me gusta repetirlo- la realidad es simultánea y el lenguaje sucesivo, y el caso es que, llegados a esta instancia, ELCOVE y yo, ELCOVE o yo, renunciamos a emprender la tarea de emprolijar y ordenar.

ELCOVE escribía a JUANO -cuando la batalla en Mercado Libre estaba en su apogeo, en vistas de la fundación del Club del Indio, y donde JUANO, e incluso el CORSARIO, intervenían activamente con el fanatismo de los conversos- que habían brotado espontáneamente ignotos personajes. El caso –sin resolver- de SERTUFILIUS, del cual había sido JUANO quien diera el alerta, y que ELCOVE ubica temporalmente bastante más atrás, es distinto al surgimiento de FEDERICALIBRE, de la que no se registraban antecedentes.

En principio, los coleccionistas o vendedores relacionados a las revistas del Viejo son mayoritariamente varones. SOADORA aparecía como una excepción a esa regla que no se observa en otros títulos de publicaciones infanto juveniles, donde las mujeres también aportan su cuota de fanatismo, siendo el caso más notorio las nostálgicas de un muñequito bobalicón que aparecía por tevé.

FEDERICALIBRE resultaba un nick sospechoso dado que sacando las letras del primer nombre –no común, desde el vamos-, aparece el del sitio mismo. Pero no resultaría lógico que alguien perteneciente a él interviniese en los encarnizados foros que se armaban por entonces en las preguntas al vendedor, utilizando un alias tan evidente, y menos aún abonando a los propósitos subversivos de ELCOVE. Era más coherente un apodo como el que adoptaba JUANO para estos menesteres, REVENGE2004. La alternativa de interpretación consistiría en que alguien, desde el mismo riñón del sitio, lo atacara, una suerte de quintacolumnista, y en ese perfil ya se encuadraba el CORSARIO, quien inexplicablemente (o solo explicable en un espíritu anarquista y voluble), contribuía al caos provocado por ELCOVE, ensañándose con otros vendedores, con ALLIPAC sobre todo. A menos que el CORSARIO jugara con dos nicks, posibilidad remota por lo innecesaria, puesto que ya se estaba exponiendo con el que operaba en Mercado Libre.

Y definitivamente la hipótesis se desmoronaría con el mail que manda al correo del Club FEDERICALIBRE en forma tardía, cuando ELCOVE ya se encontraba en franco retiro, interrogando justamente sobre su actitud respecto al CORSARIO: Por qué jamás hiciste tus preguntas al CORSARIO? Por qué CORSARIO contesta las preguntas igual que vos con tu nick ElCoVe? Diciendo: -Estimado bla bla... Esto me hace pensar que querés monopolizar el negocio, que el CORSARIO y vos son la misma persona.

ELCOVE queda anonadado por tal deducción, que para él presupone un insulto. Que lo confundan con un discípulo suyo tan menor es la segunda afrenta que sufre, luego que JUANO le preguntase si se escondía detrás de SERTUFILIUS.

Se arrepiente de haber recurrido a las infiltraciones en Mercado Libre para promocionar El Club del Indio. Piensa que hubiese sido mejor arrancar de otra manera, pero no tenía las herramientas necesarias para crear una página propia. Como consecuencia, recogía las mismas sospechas que él arrojaba permanentemente sobre los intervinientes en las batallas del sitio. Ya no poseía herramientas para convencer que en El Club del Indio no iban a existir las intrigas. Lo sembrado se convertía en una planta monstruosa que terminaba amenazando por devorarlo. Era en vano que argumentarse que no podía hacerse cargo de todos que florecieron detrás suyo.

Por eso la respuesta de ELCOVE –que no tiene réplica de FEDERICALIBRE- resulta despreciativa, no explica su pacto con el CORSARIO, ya que a esta altura se convenció que sus métodos, tal como paradójicamente le señalara el CORSARIO mismo, le han hecho ganar descrédito y repulsa, antes que la adhesión que buscaba.

Aparte, ELCOVE se pregunta cuándo carajo el CORSARIO respondió con un Estimado, justo él, tan irreverente; está bien que en el último tiempo ELCOVE, preocupado por otros menesteres no visitó Mercado Libre, pero le resulta increíble que este muchacho se haya mimetizado a tal grado con él, actitud que podría esperarse de JUANO, pero que suena extraña en el otro. Pero más allá de ese interrogante, surge otro, que inquieta a ELCOVE: ¿quién es FEDERICALIBRE? ¿Qué juego juega? Porque su rol ahora parece ser el de inquisidora de Mercado Libre - lo que no explica su nick tan evidente ni su actitud subversiva anterior-. Sería muy gracioso que los de Mercado Libre supusieran que detrás de ELCOVE se encuentra el CORSARIO.



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En el texto hay: comic, coleccionista, historietas

Editado: 24.07.2019

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