Si mi despertar fue uno de los mejores días de mi vida, mejor ni te hablo de la fiesta.
Unos días antes me dijiste que no ibas a poder ir, no sabes lo mal que me sentí pero lo entendía.
Sin embargo lograste hacerlo.
Te veías muy lindo con esa camisa si he de decir.
La mejor parte de todas: el vals.
Fue como si todo pasara en cámara lenta.
Vos viniendo a mi encuentro, tu brazo rodeando mi cintura y tu otra mano entrelazando nuestros dedos. El suave balanceo luego de eso…
Fueron apenas un par de minutos.
Pero ese recuerdo lo voy a guardar por siempre.