Creo que sos una de las personas más curiosas que conozco.
O como decimos nosotros: chusma.
Cada vez que podes, aprovechas para sacarme el celular y revisarlo, o más bien siempre que ves que estoy hablando con alguien. Lo que no es nada en particular, siempre son grupos y más grupos. Pero desde que viste el chat de SB parece que estás buscando la evidencia necesaria para poder comprobar que tengo “algo”.
Esa vez en realidad simplemente esperaste a que me percatara de tu mirada y dijiste: “Como te tiene tu novio”
Yo te miré como si estuvieras loco y empezaste a divagar con que no te decía nada y que de seguro tenía algo escondido que no te había contado.
Pacientemente y mientras un montón de palabras se iban acumulando en la punta de mi lengua, esperé a que terminaras.
“Vos tampoco me dijiste que tenías novia” fue lo primero que dije. Como el preámbulo de toda la diatriba que se venía si apretabas la opción incorrecta.
“Bueno, no es lo mismo”
Entonces las dejé salir.
Empecé con el hecho de que si es lo mismo, que me tuve que enterar por otras personas y otras conversaciones. Que mucho “soy tu hermanita” pero no te tomas en serio ese papel. En fin, me descargue completamente, aunque a la vez con cuidado de no soltar algo que dejara en evidencia mis sentimientos.
Al finalizar vi cómo me mirabas atónito y sentí mi cara arder, era la primera vez que me descargaba de esta forma y realmente se sintió bien.
Por lo que ese día fue cuando decidí empezar con este cuaderno.