Tus quejas no se hicieron esperar en el instante en que te pusieron con ella, pero no porque no te agradara, sino porque estando delante de todo no ibas a poder causar problemas en paz.
Y cuando te lo propones podés ser muy pero muy insoportable.
Así que los profesores ya cansados de tener que escucharte todo el tiempo, te devolvieron al lugar donde te encontrabas antes de los cambios y te dejaron solo.
La verdad no supe como tomarlo, porque ahí ibas a poder hacer lo que se te dé la gana y seguir siendo el desastre que eras desde principio de año pero solo, en cambio, adelante, con ella, por lo menos te ibas a encaminar un poquito, pero bueno, estaba ella.
Siempre logrando que mis sentimientos se conviertan en una bola de contradicciones.
Sin embargo, dejé de darle vueltas al asunto y decidí que vería como te iba a partir de ahora.