Toda la semana Melek no tenia buena cara, a causa de la llegada de la familia de Klaus; y en las noches no podía dormir bien porque los recuerdos llegaban de un golpe, despertaba a las tres de la mañana con sus audífonos en los oidos está vez estaba escuchando "Nada personal" de la banda Soda Stereo, no funciona de está manera y sus compañeros de trabajo se dieron cuenta, pero no le comentaron nada; finalmente llegó ese odioso día Viernes, a las ocho de la mañana Klaus y su familia con sus valijas en las puertas de la casa de Guadalupe, está salió urgente para atender a los hijos de éste y mientras tanto Melek siguió tomando el desayuno para irse al trabajo. Su mente volvía a ser, esa frágil niña de diez años que no sabia defenderse ante el corrupto mundo de los adultos; que cada vez se adentraba a este perverso y sin misericordia, de cierta manera pierdes la inocencia y te sometes en este mundo, el corazón de Melek palpitaba muy fuerte aunque aparentaba normalidad, para que Guadalupe no sospeché nada; sus sobrinos llegaron jugando con mucha alegría no saludaron a Melek por temor a ella después llegó la estúpida de su cuñada que la saludo:
- Hola cuñada... - la miro por encima del hombro y paso al final del pasillo
- Maldita prostituta... zorra - refunfuñando con ira sin que nadie la escuchara, después apareció su hermano que se miraron fijamente, pero está se levantó a lavarse los dientes para irse a trabajar en la PDI y Guadalupe con su alegría dice:
- Hijo siéntate por favor - lo tomó del hombro y lo obligó a sentarse
- Gracias Nani... - le sonrió con sinceridad
- Toma... un panqueque - le ofreció Guadalupe
- Ummm... que exquisito como siempre - sonrió como un niño pequeño
- Mi niño sigues siendo el mismo - le acaricia su cabeza y Klaus sonríe, en ese momento aparece Melek y este la mira en silencio y siguió comiendo sus panqueques, Melek le dice:
- Me voy Nani.. - la miro con cierta calma
- Toma mi niña... - le sonríe y toma su lonchera del almuerzo
- Te amo - sonrió Melek y la besa en la frente y se retira de su casa con toda normalidad, que desde la distancia escucha una voz casi inaudible para ella, mira por todos lados y escucha su nombre a la distancia, pero reconocía la voz; era de su hermano mayor estaba esperando el auto de Otniel que se esta retrasando por cierto, y su hermano le habla con la voz desgastada que se apagaba con los años y dijo:
- Melek - con su voz desgastada
- Por el amor de Dios - exclamó para si misma
- Espera... - gritó Klaus
- ¿Qué quieres? - preguntó Melek un poco furiosa
- Sólo quiero hablar contigo - inquirió Klaus un poco frustrado
- Eres muy cara de palo - exclamó con rabia Melek
- Pero Melek... - inquirió Klaus
- ¿Cómo puedes exigirme algo? - preguntó Melek con gran furia, en ese momento aparece el auto de Otniel que esté tocaba el clakson y está dice - me tengo que ir - se subió inmediatamente al auto de Otniel y ellos se marcharon al centro de la ciudad, el evidente malestar de la joven lo hizo notar, Otniel se sentía un poco incómodo y no se atrevía preguntar lo que sucedió, pero al final tuvo el valor de preguntarle:
- ¿Qué ocurre Melek? - preguntó mientras conducía el auto con calma
- Me siento muy molesta - refunfuñando con impotencia
- ¿Por qué? - preguntó mientras tenía la vista en frente de la calle
- La familia de Klaus quedó en la ruina... - comenzó a contar
- No... enserio - con cierta sorpresay está dice - me tengo que ir - se subió inmediatamente al auto de Otniel y ellos se marcharon al centro de la ciudad, el evidente malestar de la joven lo hizo notar, Otniel se sentía un poco incómodo y no se atrevía preguntar lo que sucedió, pero al final tuvo el valor de preguntarle:
- ¿Qué ocurre Melek? - preguntó mientras conducía el auto con calma
- Me siento muy molesta - refunfuñando con impotencia
- ¿Por qué? - preguntó mientras tenía la vista en frente de la calle
- La familia de Klaus quedó en la ruina... - comenzó a contar
- No... enserio - con cierta sorpresa
- Si... le embargaron todo lo que tenían y su única opción.... - continúo con el relato la joven liberando de a poco la rabia
- No me digas que.... - exclamó Otniel creyendo lo que pensaba en su mente
- Se fueron a vivir a la casa de Guadalupe - exclamó Melek
- No te creó... - quedó realmente sorprendido Otniel
- ¿ Qué voy a hacer? - se preguntaba Melek a si misma, como si estuviera atrapada dentro de su frágil infancia; y su futuro, los tiempos nunca habían sido tan confusos y a su vez frágiles, como si no existieran y Otniel le dijo:
- Habla con él - sugirió Otniel
- ¿Qué? - exclamó Melek cuando estaba sumergida en sus pensamientos sin darle importancia lo que su mejor amigo había dicho y Otniel siguió:
- Melek escúchame... no tengo idea lo que paso entre ustedes y desde mi ignorancia voy a aconsejarte como un amigo que te quiere... deberías hablar con él yo creo que lo necesitan, los dos - término de hablar Otniel con cierta paz en su conciencia
- Otniel simplemente no quiero hablar con él, la verdad es que e Klaus me decepcionó en el momento que más lo necesitaba..y no me protegió como buen hermano lo hace - Melek siente que Otniel la puede entender en ese momento
- Entiendo - habló Otniel comprendiendo que es un problema más profundo que una simple y sincera charla no se arreglará el daño que se produjo en ese momento de la vida de los hermanos Hoffmann, así que tiene una idea más clara de la situación real de ellos; llegaron a su trabajo y comenzaron a trabajar.