Las Crónicas de Melek Hoffmann Iii: Misterio en Giantville

3.3

Despertó a la mañana siguiente estirada sobre la cama destapada, con sus audífonos en sus oídos mirando hacia el cielo de la habitación; el sol brillaba en su mayor resplandor  al mediodía se levantó para bañarse y estar ahí en su habitación, Guadalupe estaba haciendo el almuerzo ; y Melek prefirió leer el libro "El pueblo aéreo" del escritor francés Julio Verne que se veía bastante interesante, siempre estuvo en el estante nunca le llamo la atención hasta el día de hoy, buscó los lentes y comenzó a leer; la historia era atrapante que no paro hasta que Guadalupe entró a la pieza y le dice:

-              Melek... - la llamó y está no la ve

-            Si Nani... - sin mirarla
-          Está listo el almuerzo mi amor - con cierta ternura

-           Si Nani voy... - siguió leyendo el libro, cada vez que avanzaba lo encontraba más interesante aún; se concentraba en los detalles hasta que Guadalupe la llama desde el pasillo:

-           Melek ven a comer - le grito Guadalupe desde el pasillo

-            Ya voy... por Dios - grito Melek desde la habitación, dejo el libro en su cama al igual que sus lentes y fue a comer a la mesa; había arroz con pollo asado al horno el olor que emanaba de la comida era realmente exquisito; Guadalupe y Melek se sientan en la mesa y comen como siempre sin dejar de lado la conversación, y Guadalupe comenzó a decir:

-           Hija - habló Guadalupe
-           Si Nani - inquirió Melek mirándola a los ojos

-        ¿Quieres saber de la visita de tu hermano? - preguntó Guadalupe para ver si despertaba la curiosidad de Melek y está la mira fijamente

-          De que hablamos Nani...ese desgraciado no es mi hermano - exclamó Melek con gran rabia que apretó su puño con tanta fuerza que Guadalupe se asustó un poco

-           Hija ya se que lo hablamos, pero... - exclamó con cierta preocupación Guadalupe

-        Y a mí que me importa lo que le suceda - habló Melek con cierta rabia

-          Hija por Dios... - con tono de preocupada observa a Melek su evidente incomodidad y molestia, que comió rápidamente la comida que está se asustó

-            Nani por favor... simplemente no me hables de él y su estúpida familia - exclamó Melek con una extraña calma

-          Es importante lo que tengo que decirte ... - exclamó Guadalupe con la necesidad de decir a Melek la noticia, la joven lo notó y dijo:

-           Está bien... dime..- exclamó con cierta resignación

-          Ellos están en una grave situación económica - comenzó a decir Guadalupe

-           Que novedad - lo dijo con tono sarcástico

-        El punto que ellos están arruinados -  inquirió Guadalupe

-        Ese no es mi problema - exclamó Melek

-         Ellos me pidieron... - exclamó Guadalupe

-          No me digas que... es lo que pienso - inquirió Melek con sus ojos en llamas

-          Así es....  - exclamó Guadalupe con cierto temor a su reacción

-            Van a vivir aquí esos idiotas - grito Melek con rabia

-          Asi es... - con cierta resignación la pobre mujer

-         Hay... por el amor de Dios esto debe ser un castigo de seguro que si - exclamó con desesperación Melek que parecía que le faltaba el aire, comenzaron a aparecer los viejos recuerdos de su infancia y Guadalupe se preocupo mucho que dijo:

-         ¿Te pasa algo mi niña? - le tocaba la frente a Melek y está intentaba de tomar aire como pudo, la miro y dijo:

-          Si Nani... me opongo a lo que decidiste - exclamó Melek un poco más aliviada

-         Hija son tu familia... - exclamó enojada Guadalupe

-         Tu Guadalupe, eres mi única familia... - inquirió Melek, tomándole de las manos a Guadalupe que está le sonríe con tanto amor

-          Gracias mi amor... - con cierta emoción Guadalupe la mira

-            La familia no es sólo la sangre... también son las personas que compartes en la vida que son externos de tu entorno... y tu Guadalupe eres el único ser que me interesa en este momento Klaus es mi hermano de sangre venimos de los mismos padres, pero no significa que lo considere mi hermano... Otniel lo considero más mi hermano que Klaus - quiso decir Melek, para que Guadalupe pudiera entender de manera simple y esta última dijo:

-           Entiendo mi niña, pero igual son tu familia - intento de explicar Guadalupe a Melek

-            Nani lo entiendo, pero entiendeme a mi por favor - exclamó Melek con cierta resignación

-             Hija te podría comprender, si me dices lo que te pasó - inquirió Guadalupe

-           Eso te lo voy a contar en otro momento cuando esté preparada -  evadiendo la situación

-          Está bien hija no te voy a presionar - exclamó Guadalupe

-          ¿Cuándo van a llegar Nani?- preguntó Melek un poco preocupada

-           El Viernes - inquirió con preocupación

-           Ohhh!!! - con cierta aceptación  y resignación de la situación de que su hermano y toda su familia va a vivir con Guadalupe y con ella, después se retira a su habitación para limpiarla estuvo toda la tarde saco los libros del estante y los volvió a ordenar, los libros que tenia era de criminalidad, derecho penal, anatomía, biología, entre otros, y ahí salió una pequeña agenda; Melek la abrió y era su antigua agenda de poesía, ella lo escribió cuando tenía unos quince años con unos lindos dibujos creados por ella y fue muy emotivo, en ese momento creyó volver a su esencia; los leyó todos y volvió a su artística adolescencia y le dio gana volver a escribir; primero término de ordenar toda su habitación que fue unos veinte minutos aproximadamente, después se sentó en su escritorio y comenzó a escribir su primer poema.

OjosVi mi reflejo a través de tus ojos, ojos de color del mar, que me sumergí dentro de ellos, mi corazón se paralizó al verlos, parecía estar pérdida, con sólo mi ropa, no pude hacer nada, ojos del color del mar, intenté de verte, pero no lo logré, ojos de color del mar, quería sumergirme en tu alma, parecías lejano, con mi corazón en la mano, mi placebo es sólo ver esos ojos, que me gustaría perderme, ante el mar de tu alma, ojos que veo y admiró, como tu suave inocencia, que nos reflejamos , ante la esperanza de volver a verte, y tus ojos de color del mar,  ¿Qué puedo hacer? , mirar esos ojos y admirarlos por el resto de mis días. 



#12672 en Thriller
#7259 en Misterio
#5181 en Suspenso

En el texto hay: misterio, misterio y crimen, misterio suspenso

Editado: 25.06.2020

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.