4.3 (Segunda parte)

En definitiva Melek sabía que era algo grave, podía sentirlo de manera inconsistente y Dameron no sé presentaría en sus sueños sino fuera importante, pero Melek estaba deduciendo que es lo que Dameron le quiere decir; debe admitir que el joven príncipe esta enamorado de ella  y era lógico que me quería lo mejor para ella; en todo sentido y la quiere proteger del mundo externo, se fue a la ducha y tomó un baño que lo necesitaba con urgencia; salió del baño y se acostó en su cama a dormir, para su suerte se quedó dormida inmediatamente.

Ella estaba corriendo por un bosque que nunca había visto; tenía la pierna izquierda herida a causa de una bala que recibió por parte de los guardaespaldas; Melek estaba cogeando torpemente, pero tenía la fuerza suficiente para seguir luchando por su vida como lo hizo a lo largo de su vida; con la muerte de sus padres, por el intento de suicidio que iba a cometer por su depresión que no le daba claridad de ver las cosas, y que un príncipe la salvaba, y salvó de cierta manera su mundo; esto será con su matrimonio y la consumación de esté, el príncipe Dameron de Ko la amaba demasiado y esto generaba un conflicto interno; en medio de sus pensamientos se interrumpió y al parecer vio al mismo hombre que pudo visualizar cuando estaba en el día que sus padres murieron, con su malévola sonrisa blanca y está se dijo a sus adentros:"Maldito bastardo"; no tenía la intención de seguirlo, solamente quería estar a salvó de esos malditos que la mantuvieron secuestrada a ella y el joven de ojos azules; ella sintió que alguien la estaba mirando y se dio vuelta, pudo visualizar unos zapatos; antes que sintiera un golpe en la cabeza y ahí perdió la conciencia, en ese momento Melek despertó agitada y se levantó un poco de su cama; ya era de día y se acercó a su celular y vio que eran las cuatro de la tarde, se levantó de golpe y se fue a la ducha nuevamente; tenía una cita con Dameron, se vistió con un pantalón de color azul oscuro con una polera que le hacía ver sus atributos físicos, su cintura y sus senos, también se colocó una blusa de color negro con blanco, un jersey de color negro que le llegaba al cuello, y una chaqueta abrigada por el frío que hacía en Nueva York que le llegaba más arriba de las rodillas; con sus botas de tipo militar, salió de su habitación y después del lugar que vivían hacía el Central Park; el ambiente estaba helado, después de veinte minutos llegó al lugar indicado por Dameron y tuvo que esperar algunos minutos y de repente sintió una mano que posó en su hombro derecho y de manera instintiva hizo un movimiento rápido, tomó la mano de la persona con mucha fuerza y con la otra mano le dio un puñetazo en la cara de la persona y con la otra mano le da un golpe en la boca del estómago, él se quejó y ahí Melek escuchó su voz y era del príncipe Dameron y ella dice:

-                 Perdón - exclamó Melek apenada mientras veía a un príncipe que se quejaba y le dice:

-                 Nooo.. ess naadaa - tomaba bocanadas de aire en cada palabra que pronunciaba, Melek sintió lástima y le dice:

-              Vamos príncipe... - lo lleva y este se apoya en ella, pesaba mucho ya que este media un metro noventa y su fisionomía era atractiva y lo llevó a un asiento que estaba cerca de ellos, y lo dejó ahí, estaba realmente exhausta y pudo ver el rostro de Dameron su piel estaba pálida y su nariz estaba roja por el frío y pudo ver como intentaba de respirar a traves las bocanadas de aire y como se elevaba su pecho, para poder respirar y sus ojos miraban el cielo que era un milagro que se pudiera ver las estrellas en la noche y su cabello que parecía al fuego estaba un poco largo con unos pequeños bubles y en su rostro tenía un poco de barba que era del mismo color que el cabello, de cierta manera se veía extraño y se movía al ritmo del viento su cuerpo se estremeció a causa del frío, Melek lo miraba con mucha atención y estuvo así como unos cinco minutos, y dijo:

-                Vaya... querida ese golpe fue muy fuerte que podrías matar a alguien - sonrió el príncipe y esto tomó por sorpresa a Melek y dice:

-                No me sorprenda así... príncipe - exclamó tranquila la joven que vio al príncipe con su ropa de color negro, su abrigo era negro bototos negro y sus guantes de cuero de color negro y él dice:

-                No.. me diga príncipe sólo Dameron - exclamó a el joven que se mordió el labio con cierta incomodidad y esta le dice:

-                Me gusta la formalidad príncipe - exclamó Melek

-                Tú vas a hacer mi esposa... señorita - exclamó el príncipe con ternura que está lo miró entre asombró y pena, y está le dice:

-                 Aunque no lo amé a usted... - sonrió con cierta tristeza la joven

-                 Sí... porque usted señorita tiene que cumplir una promesa - exclamó el príncipe

-                No crea usted... príncipe que me olvidé de la promesa de salvar su mundo - exclamó sería y el príncipe se levantó del asiento y la miró de frente y le dice:

-                Yo esto no lo hago por sólo la promesa señorita... sino porque estoy enamorado de usted, desde la primera vez que la vi - fue sincero el joven príncipe y esto sorprendió a la joven que intentó de articular palabra alguna y lo que le  salía de su boca es:

-              Ess quuee... - comenzó a tartamudear y se levantó e intentó de huir del lugar y el príncipe la detuvo y se aproximó demasiado que Melek se sintió un poco invadida en su espacio personal, se resiste por algunos minutos y el príncipe la estrecha más cerca suyo y pudo sentir su respiración que era suave y calmada; esté la miraba con sus ojos entre verdes y celestes de manera penetrante y esté le dice:

-                ¿Por qué no expresa su interior señorita? - preguntó curioso el príncipe intentando de entender la naturaleza humana y Melek le respondió con más calma:

-                 Así soy yo... - exclamó con más  tranquilidad y el príncipe le exclama: