Capítulo 37

 Algo alterado Rafael la acecha

 - ¿Qué quieres decirme? ¿de qué se trata todo esto? ¿Porqué  estas dando tanta vuelta para decirme? Habla, habla sin rodeos Luciana. Su voz era grave e imponente.

 Ella sintio que era normal su reacción respiro hondo llenando sus pulmones de aire y tomar la suficiente valentía para hablar...

 - yo estuve ahí ese día, yo lo mate... Amelia No tenía la fuerza suficiente para evitar no llorar, pero recordar ese día la afligio...

 Sorprendido por las declaraciones de Amelia se dobló como arropandose con su propio cuerpo una posición de bebé, su llanto era de dolor, sufrimiento era todo en uno, Rafael estaba inconsolable Amelia no se quedaba atrás ambos lloraban era fuerte lo que sentían Sandra era una gran persona de un corazón noble 

 - ¿como fuiste a tener hasta allá? Pregunto sin mirarla

 - tuve un problema en casa y decidí irme, no me dio tiempo para llamarla y decirle que iba a su casa sólo salí apurada y tome un taxi, al bajarme noté la moto pero no me imaginaba lo que estaba ocurriendo adentro, al entrar y ver lo que vi... Ambos lloraron, ella por recordar y contarle, él  por imaginar lo que vivió la mujer de la que se había enamorado...

 - él  estaba apurado ya la matado, si hubiera llegado antes lo hubiera evitado Rafael, su dolor se sentía en sus palabras Rafael lo podia  sentír, al verme intentó huir lo seguí y le dispare, no lo podía dejar vivo después de ver lo que había hecho. Amelia lloraba sintiendo aflicción, Rafael la abrazo dándose apoyó mutuamente desahogando el dolor que los unió en ese instante...

 - yo guardaré tu secreto, lo único que quería era saber quien era esa persona Luciana, mi Sandra no debió morir así me dejó sólo viviendo sólo de recuerdos, pensando todo el tiempo en ella todo me la recuerda. Amelia lo escuchaba sabía que ese dolor no se curaria en tan poco tiempo.

 - quería que supieras porque me voy del restaurante.

 - ¿te irás? ¿porqué? Pregunto extrañado.

 - hay cosas que no puedo decir, dijo levantándose del Banco donde estaban.

 - Luciana, el arma con que lo mataste, ¿es tuya? Pregunto mirándola al rostro

 - Sí es mía, espe...

  - no hace falta que me lo pidas, no diré ni una palabra, sólo cuidate en lo que sea que estés metida.

 - ¿porque lo dices? Pregunto extrañada

 - por la precisión, esos tres disparos fueron hechos de rabia y más ese tiro de gracia, no creo que los oficiales piensen así como yo, Amelia asintió pero sabía que ese argumento que el decía, los oficiales pronto los tendrían. ¿hasta cuándo trabajaras? 

 - hasta que consigan a una nueva cocinera, sonrió, Rafael se levantó del Banco y la abrazó fuerte.

 - Gracias Luciana, expreso sentido,vamos te acompaño a casa, ella asintió el la rodeó colocando su brazo en su hombro y caminaron juntos. No te preocupes tu secreto está guardado. Amelia recosto su cabeza en su brazo, suspiró profundo.

 - Te lo agradezco...

 - ¿y entonces? Hablaste con Rafael, pregunto su compañero Jiménez.

 - Sí, insistió en que investiguemos a fondo, ¿Estas seguro de que no se nos escapa nada? Pregunto mirando a su compañero...

 - eh detallado lo mínimo, es una probabilidad de que sea un hombre por la presicion, dijo levantándose del asiento, señaló indicándose con su cuerpo sacando conclusiones ya estudiadas, un tiro en la pierna, es una precisión porque a lo mejor corrió, en la espalda, porque pudo haber intentado volarse y con este impacto lo detuvo, sintiendo seguridad en sus palabras y Ángel escuchaba atento cada palabras de su compañero, y el tiro de gracia justo aquí, marco su frente, no creo que haya sido por piedad, dijo algo pensativo tomando asiento nuevamente...

 El móvil de Ángel suena, mete su mano en el bolsillo de su chaqueta color café, mira el nombre y frunce el ceño

 - me está llamando Rafael, a lo mejor y me insistirá con que siga con la investigación. Abrió la llamada, buenas noches.

Rafael no lo dejo sefuir.

 - disculpa que llame a esta hora 

 - no te preocupes a un sigo en la estación 

 - Quería disculparme por mi reacción está tarde, dijo en tono apenado 

 - No te preocupes, le hizo una seña de extrañes y confusión a su compañero referente a la forma en la que está hablando Rafael, te entiendo no es fácil manejar una situación como está.

 - quiero que dejes de investigar, estuve pensando y no quiero estar mal emocionalmente, creo que necesito tranquilidad eso le gustaría a Sandra. Ángel se sorprendió al escucharlo.

 - Rafael ¿Estas seguro de lo que dices? ¿quieres que cierre el caso?, dijo extrañado por esa reacción, su compañero estaba igual de sorprendido Rafael le insistía tanto que investigarán y ahora pide que cierren el caso, era algo extraño para ellos.

 - muy bien Rafael, como verás tenemos orden de revisar por última vez y cerrar el caso así que eso haremos, contestó aceptando su pedido

 - muy bien, gracias oficial, corto la llamada acostandose en su cama mirando una fotografía junto a sandra, la colocó en su pecho, ¡Ojalá y Luciana hubiera llegado antes!, Estuvieras aquí conmigo en estos momentos, hablaba adolorido, ¡Ojalá y no te descubran Luciana!, pensó entre sí, cerró sus ojos recordando a su amada...

 - No sé, me parece extraña su reacción, dijo Ángel algo pensativo...

 - Sí, es confuso, pero a lo mejor y ya quiere cerrar esa etapa ¿no crees? Respondió Jiménez... Bien compañero tengo que trabajar, iré nuevamente al Bar, buscaré la manera de aliarme con Elisa necesito una infiltrada ¡quien más que ella!, ¡nos vemos! Dijo levantándose de su asiento saliendo de la oficina.

Angel miro la hora 

 - no falta mucho para las 7, tengo irme, dijo algo apresurado salió a prisa de la oficina...

 - Entonces te verás con el oficial, dijo algo curiosa 

 - sí, y no es lo que piensas, contestó cortante