Capitulo 53 Final

Actual presente

-  ¿Montenegro te mandó?, Volvió a preguntar deseando escuchar un no, contesta, gritó.

fue todo lo contrario a él le convenía que ella pensara eso.

-  Sí perra, gritó.

Amelia se llenó de ira y golpeó nuevamente su cara, César estaba todo lleno de sangre, su rostro estaba todo partido.

Ella salió a tomar aire, no pudo contener las lágrimas, le dolía imaginar que él lo había hecho para vengarse, asesinó a sus padres imaginaba que haría lo mismo con David…, se quedó pensando ¿Dónde lo podría tener?..., Volvió a entrar, tomó cinta adhesiva y tapó la boca de César

-  Si pensaste que te dejaría libre por confesar, déjame que decirte que lo lamento, cortó las cabullas con las que lo había amarrado, pensaba en todo, no sería tan tonta como para dejar sus manos sueltas, lo lanzó al suelo y lo arrastraba de los pies, el se quejaba del dolor, llegó a pensar que ella por lo menos lo dejaría ahí tirado en cualquier lugar, pero no, Amelia iría dónde tienen a Montenegro y lo llevaría con ella…

Joel se había quedado dormido, no tenía ni la menor idea de lo que estaba pasando ni muchos de la desaparición de su hermano…

Jhon despertó y lo primero que vio fue a su hijo dormir en el sofá, deseaba tomar alcohol para olvidarse de todo lo que le estaba pasando, no estaba bien, se quitó todo los aparatos que tenía puesto y como pudo se levantó y salió de la habitación… buscaba dónde encontrar licor, en una clínica no encontraría nada…

Amelia se colocó un abrigo bajo del auto y miró a César

- Hasta que mi hermano aparezca, tu no te irás, le advirtió, el trató de decirle algo que ella lo ignoró por tener su boca tapada, él quería decirle que él lo tenía y en donde estaba pero no lo logro…

Entró a la clínica y buscaba la habitación de Jhon

-   Disculpe señorita, estoy buscando a mi novio, el señor Montenegro me podría ayudar con el número de la habitación, le preguntó a una enfermera que pasaba.

Está asintió

-  Que lastima, casi muere señorita, si no es por su hijo, habitación 302 giré a la izquierda.

Amelia quedó confundida

¿Hijo? ¿Cuál hijo? Pensó entre sí, no le dio importancia y aligeró los pasos…, entro a la habitación y miro a la camilla sin percatarse de que su hermano estaba ahí dormido, ¿Dónde mierda esta?, Susurró, había olvidado que dentro de el chaleco Antibalas tenía el localizador.

Los oficiales buscaban la señal para saber dónde estaba, necesitaban a César tenía que pagar por su delito.

-  Está ahí, señaló Sonia la pantalla, frunció el ceño ¿Qué haces es una clínica? Susurró

-  Bien, vallamos, dijo Jiménez mirando a Ángel.

-  Yo voy con ustedes este es mi caso, aseguro ella, su intención era cuidar de la chica que la ayudó, desconociendo la historia con su compañero.

-  ¿Llevaremos refuerzos?, Pregunto Jiménez

-  No creo que sea necesario, respondió Sonia, los tres podemos con él, en caso dado pediremos apoyo.

Joel recordó y se sorprendió al no ver a Jhon en la camilla

- Enfermera, enfermera, gritaba

-  ¿Qué pasa señor? Preguntó extrañada

-  El paciente que estaba aquí en esta habitación ya no está ¿Qué pasó con él?

La joven frunció el ceño y se alarmó avisando que el paciente no estaba en su habitación...

Joel no iba a esperar que apareciera, decidió buscarlo por su cuenta…

Jhon miraba al vacío a lo alto de esa clínica, 10 pisos para ser exactos.

Amelia vio al hombre de bata como si quisiera lanzarse desde ahí, su corazón se oprimió, de verdad lo amaba, tanto era su amor que dudaba en matarlo, pero su pasado la perseguía desde que era una niña, respiró profundo

-  No morirás tan fácil, dijo entre lágrimas.

El reconoció la voz pero no giro para verla, sabía que ella le apuntaba, no quería ver a la mujer que amaba con un arma en sus manos

 - No me lo hagas fácil, respondió sin mirarla.

Ella quería que él la viera, trataba de contener sus lágrimas pero no podía, dio otros pasos más para acercarse a él

-  ¿Por qué mataste a mis padres?

-  No quiero hablar de eso

-   Yo sí quiero, quiero una explicación, él cerró sus ojos reconoció por su voz que lloraba, ¿Dónde tienes a mi hermano?

-  No sé de qué me hablas, tu hermano estaba en la habitación.

Amelia frunció el ceño “Joel está aquí” susurró

-  No, ¿Dónde tienes a David? Dijo en voz alta

-  Ya te lo dije, Amelia o Luciana como sea que te llames, dijo limpiando las lágrimas que le corrían, no te culpo por quererme matar, me supiste engañar, dicen que al mejor cazador se le va la liebre, contigo se me fue todo, Amelia lloraba al escuchar cada palabra que decía, ¿Tu hermano? No sé dónde está.

Ella Se llenó de ira y gritó

-  ¿También lo mataste?, Contesta maldita sea

Joel al escuchar los gritos supo de dónde venían y corrió…

Los agentes al llegar a la clínica reconocieron el auto y lo revisaron, encontraron a César amordazado y amarrado, Ángel lo bajo.

César al ver a Sonia se sorprendió, ella se acercó a él

-  Eres muy bueno en la cama, me hiciste gemir y tener muchos orgasmos pero, trabajo es trabajo, llévenlo a la clínica que le den los primeros auxilios, dijo en voz alta, pasarás muchos años en la cárcel mi amor, le susurro en su oído.

-  Jiménez encárgate del detenido, hazlo hablar, Sonia y yo entraremos, dijo Ángel... 

-  ¿Amelia?, ¿Qué haces?, ten cuidado, Dijo Joel

Jhon se sentía impotente no pronunciaba una palabra, tampoco haría nada para lastimarla más de lo que ya lo había hecho 

-   David está desaparecido, Joel se sorprendió y frunció el ceño, el lo mando a secuestrar, aseguró

-  Que estupidez dices, dijo Jhon, ¿Para que voy a querer yo a tu hermano?