Las Familias. Belucci y Carson. Herencia Belucci #2.

5. LAS TIAS, Fraude, Robo y Desfaco

Las Tías que vivían en Alemania Doña Flor y Doña Cristina.

Llegaron a la casa Carson. 

Con verlas llegar se sabía que significaba ¡PROBLEMAS! por intuición y experiencias pasadas.

Aunque Doña Emilia sabía que eran un par de joyitas pero ella siembre las mantenía bajo control. 

Pero para la desgracia de la familia ellas llegan justo cuando Doña Emilia es diagnosticada con Cáncer. 

Doña Flor y Doña Cristina decían tener problemas ecomomicos e insistían en que les dieran alojamiento. 

Doña Emilia no sabía decir que no y menos a sus hermanas así que se dijo unos meses.

Ella con todo y su gran corazón dijo que estaba bien que se acomodaron en el cuarto de huéspedes pues ellos ocupaban los demás cuartos de vez en cuando.

Aunque se les advirtió que solo unos meses se quedaron por casi tres años.

En los cuales nunca fueron del agrado del Señor Gabriel, pero eran las hermanas de su esposa y el las respetaba y las soportaba.

Si hermana si les tenia confianza y le dio acceso a sus cuentas bancarias ¡Gran Error! 

Doña Emilia pensaba que le ayudarían con la casa y su sobrinos pero no fue asi. 

Los últimos seis meses de vida de Doña Emilia se la pasaba más en el hospital que en casa.

Tanto así que no notaron que iban desapareciendo cosas poco a poco.

Una tarde--noche salieron del Hospital algo tarde y muy cansados a los niños los estuvieron cuidando unas muy amables enfermeras. 

Cuando llegaron a casa a descansar mientras mamá permanecía internada en el Hospital, la casa estaba vacía, no había nada.

Las muy hipócritas tías hermanas de Doña Emilia se habían robado todo. Y todo es todo, camas, ollas, pinturas, mobiliario, no quedó nada.

Don Gabriel muy valientemente tomo sus pequeños muy cansados los podres niños. 

Los llevó con la familia Tomasso.

--Hola, buenas noches: 

--Doña Luisa. Dijo don Gabriel.

--Puedo dejar a los niños por favor, sera unos días, por favor. 

Don Gabriel lloraba mientras trataba de manter sus hijos fuera de aquel desastre.

--Claro, pasen, pasen por hoy podemos sacar el sofa cama. 

--Podres niños estan agotados. Decia doña Luisa. 

--Don Gabriel y como esta Doña Emilia. 

--Doña Emilia esta muy débil y cansada. Contestaba don Gabriel con profunda tristeza.

--Y que paso por la tarde vino un camión se llevó todo.

--Las hermanas de Doña Emilia dijeron que era para pagar el tratamiento de su hermana.

--No Luisa, no es así, ellas son estafadores y ladronas profecionales.

--¡Nos robaron, todo!

--Imagino que las cuentas del banco deben estar en cero, también!

--Debo solucionar esto y lo más rápido posible.

--Gracias, Luisa. Estaré viniendo a ver a los niños.

--El tiempo que nesecite Don Gabriel yo los cuidare.

Ya en la casa vacía, no pudo descanzar primero no tenía donde, segundo su cabeza era un lío y no lograba dejar de pensar.

Al amanecer antes de ir al Hospital se dirijio al banco como lo había pensado fue directamente a la gerencia.

-- Buenos días. 

--Saludaba el Señor Carson al gerente.

--Buenos días Señor Carson. 

--Pase, pase en que le puedo ayudar el día de hoy.

-- Necesito revisar las cuentas de mi esposa y la que tenemos en común.

--Disculpe. Señor Carson sus cuñadas vivieron ayer y cerraron esas cuentas dijeron que ocupaban el dinero para el tratamiento de Doña Emilia.

--Pues no es así. 

--A mi me robaron y a usted lo estafaron.

--Llámenos a la policia ahagamos algo.

--No ya deben estar llegando a Alemania. 

--No se preocupe yo me encargaré.

--Gracias.

--Aun así debemos avisar a la policía.

--Es el procedimiento. 

--Esta bien. Dijo don Gabriel. 

--Nos estamos hablando. 

--Hasta luego. Gracias. 

Don Gabriel salió del banco y primero fue a ver a los niños les explico que debían permanecer con doña Luisa por unos días.

Pedro ponía atención a sus palabras y medio entendía la situación. Pues y era un niño de casi ocho años.

Alessia era diferente era una bebe de de unos dos años y medio casi tres.

Era difícil para toda la familia aquella situación y antes de ir al Hospital con su esposa y contarle todo lo sucedido.

Se tomó un tiempo con la familia Tomasso. Descargo su corazón y pidió consejo.

Los Tomasso dijeron :

--Pida ayuda a los Belucci.

--Ellos son sus amigos.

 

 

 

 

 




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