Las Jones.

6. Pactos.

 

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Aitana.

Muchos pensarían que soy la mejor amiga de mi hermana gemela, quien crea eso, está muy equivocado. Le tengo más confianza y le cuento mis cosas más a mi padre que a ella.

La verdad es que extraño a la Aina de hace años.

—¿En qué piensas? —me pregunta Lionel. Los cinco estamos sentados en el pasto a las afueras del comedor. Hoy nos apetecía estar con un poco de aire.

—Extraño a Aina.

—Yo también, cuando íbamos todos ocho de viaje era de los mejores días—agrega con una sonrisa Hongi.

Es verdad antes solíamos ir con mis hermanas y sus mejores amigos de paseo a cualquier parte de la ciudad y sus alrededores.

—Ahora solo se la pasa con el hermano de tu ex cuñado —resalta Pelto.

—Jeremy no es nada igual a él. Este es un cochino que no puedo ver, por el contrario cuando Jeremy iba era super cool y lo queríamos mucho. —lo defiendo, que sean hermanos no significa que se puedan siquiera comparar. Jeremy siempre será superior.

—Todavía me pregunto por qué terminaron.

—Es un tema delicado para ella —Los chicos asienten y miró a Hongi—. ¿Cuándo regresa tu hermano?

—No sé, el infeliz no me quiso decir. Dijo que pronto—Se adelanta a que yo pregunte—. Layla se tiene que quedar porque tiene dones. Mientras tienes que ordenar el fracaso de casa que tienen—Me señala lo que todos tienen claro.

—Tenemos que arreglar la casa. — suspiro cansada y cierro los ojos.

De solo acordarme de cómo se encuentra la casa, algo me da, está más que sucia y la verdad hace falta la mano de Layla. Ella es la única que deja luciendo impecable la casa y nos obliga a nosotras a limpiar.

—Ayer vi jugar a Collins y la verdad lo hace muy bien —opina Guzt.

Austin se inscribió al básquetbol conmigo, ayer tuvimos las evaluaciones y aceptaciones. Ambos quedamos, la verdad es que juega bastante bien, todos los integrantes quedaron satisfechos con su desempeño.

—Me cae bien el chico, tiene potencial —Miro a Pelto sin dar crédito a lo que dice, para convencerlo y que este te acepte es difícil —. Las cosas hay que hablarlas como son, los Collins tienen todo para romperla.

—¿Viste a Pablo cantar ayer? Lo hace de puta madre. Con eso tiene a Jaqueline detrás de él —murmura pesadamente Hongi.

Jaqueline es una niña del otro curso, compañera de Aina y crush de mi mejor amigo desde que tiene memoria. Estudié con ella y es agradable hasta donde cabe.

—Otra vez nuestro enamorado... —lo molesta Lionel y le pone una mano en su mejilla para acariciarla, este se la aparta inmediatamente.

—No me molestes —farfulla.

—Sí ya, sé delicada la nena —Nos reímos y Hongi se recuesta en mis piernas.

—¿Con cuál de nosotros tendrías una relación? —quedó desconcertada por la pregunta de Guzt.

—Eso, hagamos preguntas para Tana —Me sonríe con malicia Pelto.

—Yo opino lo mismo —levanta la mano Lionel.

—Está bien, comiencen y hagamos esto rápido —acepto. Ellos se acomodan y todos quedamos en un círculo.

Los reparo a todos. Guzt tiene su cabello cobrizo, ojos claros y es delgado, pero bastante alto. Lionel es el que tiene más músculos, ojos verdes, cabello castaño y es algo bajito. Pelto es trigueño, algo gordito, pero la parte de atrás lo quita —Porque culo si tiene—. Hongi por el contrario es la misma estampa de su hermano mayor, ojos azules, cabello negro crespo que lo tiene hasta la mitad de largo y siempre se peina con una colita.

—Hongi —Este sube su mirada y me tira un beso.

—¿Cuál de los cuatro quieres más? —Le lanzo una mirada molesta a Guzt.

—A todos los quiero, es decir, chicos, han estado conmigo siempre y son los mejores —Los señalo—, pero a quien conozco desde que tengo memoria es a Humberto.

—¡No me llames así! —alega Hongi.

—Tu nombre es Humberto —resalto—. Discútelo con tus padres.

—¡Mira cállate, es Hongi y punto! —Se sienta con los brazos cruzados y bufa.

—Ya dejen de sus peleas de niños de dos años —se queja Pelto.

— ¿Te meterías con Austin? —pregunta sin anestesia Lionel, cambiando el tema totalmente y lo miró con el ceño fruncido.

—Hemos notado que con él te desenvuelves fácil, cosas que en ti es extraña —agrega Pelto.

—¿Por eso creen que me gusta? —me rio con sarcasmo—. Por supuesto que no, es solo un mujeriego, que tengo que tener a metros a parte ya está empezando a tener cuento con varias. Es mi vecino, todo dice que no.

—Eso no dice que no te gusta, solo dice motivos porque no te puedes meter con él —los chicos le dan la razón a Hongi—. Aitana para ninguno de nosotros es un secreto que el tener confianza con otras personas no es fácil, pero con él al parecer lo es. Lleva unos veinte días viviendo cerca a ti y ya parece que en una de esas nos reemplazas.

—Sí, estoy con él —lo apoya Lionel.

—Quiero que hagamos un pacto —miramos fijamente a Guzt, tiene una sonrisa de maldad en su cara y pone las mano juntas para hacer varios toques con los dedos—. Cada uno tiene que enamorar a alguien.

— ¿¡Qué!? — gritan Lionel y Hongi. Pelto y yo quedamos confundidos.

—Miren chicos, para nadie es un secreto que pese a que somos populares en nuestro grado, no tenemos suerte en el amor, solemos solo salir con el corazón roto —dramatiza llevando una mano a su pecho.



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En el texto hay: vecinos, ex novio y mentiras, playboys

Editado: 23.01.2022

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