Narra Amaris
- Algo habré dicho mal.... o quizás no soy una bruja - les digo a todos con mucho nerviosismo
Vuelvo a repasar todo, lo he estado practicando toda la tarde con Cleo, hemos revisado que la traducción de Bolt y Ron fuera correcta. Ellos vinieron un momento para explicar cómo iba, pero luego se fueron porque tenían que ir a ver a su padre que estaba en el hospital, se les veía muy preocupados.
- Amaris... - me dice Marlo detrás de mi
- Ahora no, estoy intentando buscar el error - le digo a Marlo para que no me moleste, quizás solo tenga esta oportunidad para conocer a mi padre.
- Pero...
- Dije que no! - le digo enojada
- Esta igual que ese día - dice una voz
Alzo la vista para ver quien está hablando y me encuentro con un hombre de pelo negro, bien musculado, buena planta, está mirando a su alrededor, se parece al de la foto que me mostraron los padres de Marlo
- ¿papa? - le digo con los ojos a punto de llorar
- Amaris, mi pequeña - me dice el hombre mirándome con ternura - has crecido mucho desde la última vez que te vi, eras solo un bebe.
Esto no es posible, el hechizo si funciono, este hombre que tengo delante de mí es mi padre, me lanzo a buscar un abrazo de él, quiero abrazarlo, pero lo atravieso y caigo de bruces al suelo. Marlo viene corriendo para ayudarme a levantarme. Me giro y veo a mi padre, la luz traspasa a través de él, no tiene sombra, está aquí, puedo definir como es, pero al mismo tiempo puedo ver a través de él. Mi padre se gira
- ¿estas bien mi pequeña? - me dice preocupado - lo siento, pero soy un fantasma
- Si, estoy bien - me incorporo - quiero saber que paso, mama me conto cosas de ti, cosas horribles
- Yo os amo, a ti y a tu madre, nunca os haría daño - me dice - aquí en esta plaza vi por primera vez a tu madre, con ese vestido rojo, todo ella resplandecía, sabía que ella era mi pareja de vida. - hace una pausa y mira a los padres de Marlo - es un placer veros de nuevo, gracias alfa por tu ayuda en la guerra
- Somos amigos - le dice el padre de Marlo - pero tu hija ahora te necesita
- Amaris, ese día, el día que os perdí, o eso creía, fue porque había la hermana de tu madre, es una mujer peligrosa, si ella sabe que estas viva, vendrá por ti, ella quiere tu poder, tu loba, te lo quitara todo, lo mejor es que no la busques, protégete, no debiste buscarme, puede ser peligroso - me dice mi padre - tu madre quiso protegerte, y para hacerlo hizo creer a todo que estabais muertas, incluso yo pensé que lo estabas.
- Es tarde, Margaret sabe que estoy viva - le digo triste
- Tu madre segura te enseño hechizos - me dice
- No, no me dijo nada de que era una mujer loba, ni que era una bruja, no me conto absolutamente nada...
- Pero tienes a tu loba, ¿acaso no la conociste a tus 7 años de edad? - me pregunta
- No.... sé que existe hace unos días - le digo
- Esta bien, tranquila, estas en una buena manada, ellos te guiaran para conocerte mejor - mi padre mira a Marlo - eres el futuro alfa de esta manada, no es así?
- Lo soy alfa - dice Marlo - además que soy la pareja de su hija
- Si, eso me ha parecido, cuídala, hazlo por mí, ya que no pude hacerlo, no pude estar en su vida
Mi padre se me acerca e intenta tocarme la cara con su mano, pero solo siento como un frio en mi mejilla, él no puede tocarme, tengo tantas preguntas, quiero tenerlo en mi vida, él se siente sincero, siento que me he perdido su vida odiándolo.
- Quiero que te quedes conmigo- le digo en una suplica
- Este ya no es mi mundo, debo irme- me dice y veo que cada vez él es más translucido
- Necesitamos saber dónde esta nuestra madre - me dice Katy
Katy tiene razón, él podría saber saber algo de donde esta, debo encontrarla
- Papa, antes que te vayas, ¿sabes dónde puedo encontrar a mama? - me pregunta
- Lo siento Amaris, ella podría estar en cualquier sitio, pero si has conseguido este hechizo seguro podrás encontrar uno que te acerque a ella- me dice mi padre- se fuerte, te quiero!
Mi padre acaba de desaparecer del todo, ya no está, me caigo al suelo, siento que voy a llorar, sus últimas palabras “se fuerte, te quiero” significan tanto para mí, es tan confuso, he hablado con mi padre, él me quiere, dio su vida por nosotras. Debo encontrar a mi madre, tengo que saber la verdad, no más normas para mí, ahora seré yo. Debo conocer más sobre lo que soy y lo más importante debo aceptarme.
Marlo se arrodilla a mi lado.
- Amaris, ¿estas bien? ¿Qué puedo hacer por ti? - me dice preocupado
- Quiero saber todo de vosotros- le digo mirando a los ojos con lágrimas- quiero ser libre, saber quién soy, ¿podrás ayudarme?
- Es lo que hemos estado haciendo todo este tiempo, ayudarte, me alegra saber que vas a estar más receptiva - me dice Marlo sonriendo
Nos levantamos y miramos a nuestro alrededor, toda la manada está aquí, pendiente de cuál será la decisión. Sus padres se acercan a nosotros y Marlo se aclara la voz.
- Como bien sabéis, Amaris es mi pareja predestinada, vuestra futura luna, si ella me acepta- dice esto último con la voz apagada - ella es hija de alfa, y de bruja. Hasta hace muy poco desconocía todo, os pido que tengáis paciencia con ella y con su amiga Cleo. Nos preparamos para un altercado con su tía Margaret, todos conocéis esa historia. Si veis algo raro, por pequeño que sea vuestra obligación es decírmelo inmediatamente.
Todos hacen una especie de reverencia, y se van de plaza, por nuestra parte también tomamos el camino hacia su casa.
- Amaris- me para Cleo- yo iré a casa de Kenner, así conoceré mejor a sus padres.
- Claro- le digo un poco triste, pero sonriendo
Es normal que ahora que se ha emparejado con un hombre lobo quiera estar con él, lo más normal del mundo (esto último es sarcasmo).
- Si te parece bien, mañana te ayudaremos a que tu loba pueda salir a correr, seguro que lo necesita- me dice Marlo mientras vamos a su casa