Tras el tiempo que hacía que todo pasase más lento
Compresión para entenderse a uno mismo.
El poder, la voluntad de seguir adelante.
Junto con el equilibrio del mundo
Hacía que cada vez más se acercaba
Más felicidad notaba en su rostro
Tenía la espada demoniaca
Acabó con ella con los ángeles, pero dios no estaba
Era hora de buscarle, pero pronto comprendió
Que le faltaban tres llaves más
Le faltaba la verdad, el deseo y la sabiduría
Entonces fue a intentar encontrarlas
De pronto todo sucedió
...
Erase una vez, en un cuento al revés,
Caminaba despacio por el monte al parecer.
Y al buscar tal vez, un mineral
Sus manos se colocan en posición de rezar.
Una roca tocaba mientras su mano se movía
Sacaba un pico y la golpea con ira.
Rompió la roca y de ella salía
Un hada de color negro que se moría.
Ella decía que su muerte está por caer.
Que un brujo la encerró en esa roca que nadie podía mover.
Entonces dijo al nefilim que debería viajar
No a ningún lado, sino volver atrás.
El hada le guió mientras se cansaba
Una montaña señaló y después cayó desmayada
Su pulso está parado, y ella destrozada
No había nada que hacer excepto para...
Volver al pasado, el nefilim pensó,
Pero como podía volver, no había explicación.
No tenía poder ni ninguna opción.
Entonces fue al santuario de la montaña para buscar una solución
Allí en el santuario, a la puerta llamó.
Su puerta de color rojo, es la que golpeó.
Una vieja abrió la puerta y después le cerró.
No sin decir: No ángeles, por favor.
El volvió a llamar y dijo que no era ángel.
La vieja volvió a abrir con mil sospechas antes
Le dejó entrar y comentó la mala suerte de que la hada haya muerto
Buscó en el cajón y en sus manos le dejó un amuleto.
Comentó que con esto volvería al pasado
Pero al volver, hasta los muertos revivían también.
Entonces el nefilim pensó que salvaría a sus amigos humanos
Los cuales fueron aniquilados por sacrificarse y proteger
Entonces volvió al pasado, encontró una casa de madera
Encontró al hada que ya no estaba muerta.
La advirtió de lo que la iban a hacer
Que una piedra la encerraría y no podía suceder
El hada confiada por las palabras
Se fío en la espada que el ángel portaba
Su espada blandió, era la espada demoniaca
Así comenzaba este cuento de hadas
...
El nefilim al volver al pasado, había salvado a la hada
De unos ángeles que la querían matar por su conocimiento.
También aprovechó que estaba en el pasado
Para evitar las muertes de sus compañeros
Ellos se sorprendieron al verle que venía por otro lado
Él les avisó del peligro y sabiendo que iba a suceder
A sus dos amigos salvó. Ellos le debían la vida.
Pero, el nefilim que no, que era al revés.
Ellos ya se sacrificaron una vez, y eso era suficiente para él.
El hada también le acompañó con el conocimiento
Y entonces comprendió lo que valía los verdaderos amigos
Los que realmente estaban con él hasta el final.
Y que no importaba que fuera a pasar, que era el momento
De encontrar de nuevo a dios, y encerrarle.
Pero, faltaba dos llaves, el deseo, y la sabiduría.
Y así comenzó la nueva búsqueda...
Editado: 07.02.2025