CAPITULO 3: Existencia

-¿Quieres intentarlo de nuevo?- esa voz me parece conocida, hace cuanto no la escuchaba. Mi corazón late rápidamente era algo que no hacia hace mucho tiempo. 

- Lo siento no te escuche. ¡Puedes repetirlo! – hace tiempo no veía su rostro.

-¡Wow! ¿Por qué lloras? – las lagrimas caían sin cesar y mi pecho no dejaba de hacerme sentir los latidos de mi corazón; tan rápido que me dolía, hacían que sintiera algo.

-Oye no llores, Yak me regañará. – como si pudiera dejar de hacerlo después de escuchar su voz.

-¡ELTON!- el grito de Yak hace que el de un paso atrás.- dije que le enseñaras, pero no espere a que lo hicieras llorar, ¿Qué le hiciste? – Yak no ha cambiado, como lo haría si volví al tiempo donde todo estaba bien. Antes de cumplir la mayoria de edad, falta poco al menos un mes.

- Yak, no te preocupes, solo me acorde de algo, Elton no me hizo nada. - Elton me mira con ojos sospechosos y Yak solo suspira.

-Latí no debes defenderlo si te hizo algo solo dímelo. – Elton alza uno ceja y en su rostro se ve la acusación, sus expresiones siempre tan sinceras

- Te aseguro que no fue nada. – Elton me da la espalda. – Latí sabes que Elton es mas grande que tu por eso me preocupo, aunque este mastodonte. – lo dice señalando a ELTON. -, a veces no sepa que es la delicadeza.

- ¡JA! - Mi risa se escucha alrededor, la gente nos está viendo y Elton esta sonrojándose. – ¡Ja! Hace tiempo no lo veía así. – Yak se burla de Elton.

- Bueno como veo que mi inocencia ya fue clara me voy. – la ira de Elton es notable y piensa que me estoy burlando de él, al igual que Yak; lo cual es mentira ya que hace tiempo que no escuchaba como Yak le decía a Elton.

- ¡Toma un descanso, recuerda que el horario de entrenamiento no ha terminado! - con dificultad, mientras sujeta su estómago por estar riéndose Yak le grita a Elton antes de que entrara al cuartel.

- Yak, porque eres tan duro con Elton el no hizo nada y aun así lo acusaste. – se seca una lagrima después de reír tanto. – Latí antes de que conocieras a Elton su personalidad era mas obtusa de lo que es ahora, al menos ahorita podemos burlarnos de el sin que nos lance un hechizo que ponga en juego nuestra vida. – no sabia nada de Elton y los errores que cometí fueron catastróficos lo que hizo que no me perdonara.

- Latí descansa también, vuelve en 20 minutos, tranquilo le diré a Elton que no te burlabas de él. – Yak siempre sabe lo que me pasa y creo que esto no lo dejará pasar, debo inventarme una excusa perfecta para evitar las millonadas de preguntas que me hará.

- Esta bien. – me sonríe y después se dirige al cuartel.

Hace tiempo no estaba en esta zona, no volví después de lo que paso.

Ver a las personas junto a esos seres traslucidos, me hace acordar de Elle será difícil que confié en mi otra vez. Antes de que la desgracia tocara mi puerta, los humanos estaban al borde de la extinción, en aquella época aún no había nacido y lo poco que me contaron fue que unos seres extrañamos llegaron a la tierra nadie sabía de donde vinieron; en aquel entonces sus formas eran traslucidas y no tenían cuerpos óseos solo sus rostros podían verse a la perfección, eran preciosos. La humanidad dejo las guerras y llego a la paz solo con la palabra de uno de los seres autollamados Quimeras.

-Fusión. – fue lo que dijo esa quimera, los humanos siempre vivieron como seres orgánicos con su vida diaria y tan básica quien iba a imaginar que una quimera podía darle tanto poder a un humano y quien imaginaria que las quimeras se harían tan poderosas que podrían hacer cosas inimaginables. Volar, ver el universo con sus propios ojos desde la comodidad de la casa, saber de la existencia de otros seres en el universo, la creación de los planetas, las quimeras fueron muy obstinados al no mostrarnos lo que todo humano quería saber: ¡la existencia de los planetas!, nunca respondieron la solicitud a pesar del poder que tenían, la vida eterna; quien no quería vivir eternamente la fusión hizo que la longevidad de los humanos fuera más extensa.

Las quimeras siempre se consideran puros, seres nacidos del vasto universo, partícula a partícula, la reina quimera fue la primera y después sus súbditos, las quimeras y humanos se unieron porque la extinción de quimeras también fue un problema en su tiempo tenían un corta vida solo podían vivir 50 años ni más ni menos; la reina busco soluciones en el vasto universo, pero siempre los trataron de débiles su pureza no era fuerza así que el universo le dio la espalda, la salvación no solo fue de los humanos sino también de las quimeras.

La fusión hace que humanos y quimeras sean uno, pero a veces no se cumple; pueden que sean compatibles o no, aun así, las quimeras le dieron solución a aquellos que no encontraron compatibilidad y los llamaron híbridos. Tomaron las partículas de los mas profundo del universo y la unieron la luz más hermosa de todas. Luz y oscuridad se unieron, pero faltaba algo lo que hacia que los humanos no perdieran su humanidad. Los elementos de la tierra como agua, tierra, fuego y aire fueron implementados a los híbridos, así se crearon deferentes como el hibrido de la oscuridad o el de la luz, del fuego, del sol y al final una única hibrida nació la hibrida del mal Elle. Solo por haber nacido de la oscuridad mas negra y del fuego más extraño que existió Elle fue rechazado por la humanidad.

-Te encontrare Elle, espérame. – un susurro y una promesa mientras me dirigía a mi habitación.