—Hola princesa
—Hola engendro
—Princesa mira el video que te acabo de mandar
—No me vayas a salir con tus juegos
—Claro que no miralo. Te amo
—Yo más—cuelgo y enseguida abri mi whatsapp, la primera conversación decia engrendo y un corazón rojo abri el chat y reproduci el video. Era él estaba cantando, de fondo tenia su cuarto.
If I don’t make it through the night (Si no sobrevivo la noche)
Don’t forget me. (No me olvides)
Keep me in your memory.(mantenme en tu memoria)
Let me be your favorite Angel (dejame ser tu angel favorito)
Just keep on moving on (Solo sigue Adelante)
Remember (Recuerda)
That life always gets better (Que la vida siempre mejora )
Cry for me (Llora por mi)
But promise (Pero prometeme)
Darling (Cariño)
You will keep on staying strong (que seguiras siendo fuerte)
Cuando termine tenia lagrimas en mis mejillas, aunque muchas cosas haban pasado a mi alrededor, y el tenerlo a él lo compensaba todo. Sin duda él era mi vida y mi sostén cuando yo ya no tengo fuerzas. Sin dudarlo aplaste la camarita y enseguida lo vi en la pantalla
—Te gusto
—Me encanto—susurro, lo miro un poco preocupada y esta totalmente raro—¿estas bien?—pregunte
—Si princesa tranquila—veo como camina por su cuarto
—¿Porque me la dedicas?
—Me gusto princesa y quería que sepas que siempre me vas a tener para ti, siempre—dice apretando los dientes.
!Que mierda me oculta!
—Nos vemos en la noche y me vas a decir que te pasa David—trato de bromear pero sigue amargado.
—En la noche quiero hablar contigo Kyra—dice muy serio
—Siento que no estas bien, voy a casa ahora mismo—digo preocupada
—Kyra ¿Por qué…—se interumpe el mismo, esta molesto su mandibulo esta muy tensa—…olvidalo en la noche hablamos
—¿Seguro?—asiente, pero su mirada no me convence—Te amo
—Te amo mi princesa—cuelga y me deja bastante preocupada, camino por el centro comercial y entro a la tienda deportiva compro unas rodilleras, unas tobilleras, y una camiseta del Real Madrid para él. Pago todo mi me doy cuenta que ya se han pasado muchas horas. Marco a mi engendro y nada que contesta.
Camino hacia mi moto y conduzco tranquila, pero mi telefono no deja de sonar insistentemente, me parco y contesto muy enojada.
—¡Alo!—grito por la linea
—Kyra…—mi mama no puede ni articular palabra, solo escucho monosilabos y palabras entrecortadas
—¿Qué paso mamà?—disminuyo mi tono de voz y respiro ondo.
—David…—susurra—es-esta muerto—suelta en un llanto desconsolador. Aquella corta palabra me cae de sorpresa y no logro comprender.
Miro mi teléfono y la llamada se ha cortado.
!Mierda!
—¡Ahhh!!NO!NO! ¡NO!—lanzo un grito desgarrador en la mitad de la via, me subo rapidamente y llego despues de unos minutos al hospital. Corro por emergencias justo al area donde mis padres trabajan. La escena que veo es totalmente desgarradora.
No se que hacer.
!Que sea una jodida broma!
Mi padre golpea la pared como loco y mi mamá esta en el piso en posición fetal y llorando sin consuelo
—Papá…mamá—hipo de dolor, me siento indefensa y sola, camino muy despacio en medio de mucho del personal que mira todo en silencio, con mucha lastima y dolor en sus rostros—¿Quiero verlo?—susurro con lagrimas en mis ojos y la voz lo mas fuerte que pueda, no se porque pedi eso. Pero quiero ver con mis propios ojos lo que aun mi mente no puede creer.
Es mi hermano.
Mi padre solo hace un pequeño asentamiento de cabeza y yo entro a una sala como totas las del hospital gelida, fria, vacia.
Los instrumentos estan tirados por todas partes, la sala practicamente esta vacia, y solo al verlo en aquella camilla voy asimilando lo peor de mi vida.
Me acerco temblorosa con un nudo en mi estomago y en mi garganta, acaricio su mano, y suelto un sollozo fuerte.
—No me dejes—ruego apretando su mano—…David no—hipo y millones de lagrimas ruedan por mis ojos—…!DAVID LEVANTATE!—grito fuera de mi y me abalanzo al cuerpo inerte de mi hermano, él que esta cubierto de sangre y aun se siente el poco calor de su cuerpo.
—David porfavor ¡No me dejes!—el labio me tiembla, las manos y piernas tambien, no dejo de abrazar su cuerpo y acariciar su cabello y rostro. No lo hagas...
—!Nooooooooooo… Levantate carajo no me dejes!
—!David nooooooooooo!—hipó de dolor, millones de lagrimas corren por mis mejillas.
Los gritos de alquel hospital fueron desgarradores y de lo mas profundo del alma. Esa noche todo el hospital se vistio de negro y vivio su duelo. Pero aun recuerdo la ultima llamada y su ultimo video. Mi David.
Mi luz y parte de mi corazón se fue con él.