Las princesas no lloran

47. Te mueres con ella

En mi cabeza rondan las palabras de la mamá de mi nena No quiero que la historia se repita y tengo miedo. Tengo terror. Me asusta que de pronto salga un médico y nos diga que mi nena no pudo lograrlo. No quiero ni pensarlo.

Mi madre me ofrece un té pero no puedo ni pasar un bocado. Mi garganta está cerrada. Los nervios y el dolor no dejan que pueda relajarme, que pueda pensar positivo. Ella asiente a mi negación y pasa su mano suavemente por mi espalda.

Cuando perdí a mi padre me dolió, pero entiendo que fue la ley de la vida. Y cuando tuve que ser fuerte por mi madre no comprendí su dolor a ciencia cierta hasta este momento que entiendo que aquella persona desconocida a la cual un día decides amar puede adueñarse tanto de tu corazón que sientes que te mueres con ella.

—Pacientes de la señorita…—un colega de los papás de mi chica sale cubierto de sangre por esa típica puerta que hace la división entre la persona que lucha por su vida y la que ruega por no perderla. No termina la frase cuando ya todos estamos frente suyo. 

—Susana, Victor… —cada palabra es como que lo dijera en una cámara lenta, una completa tortura— Kyra es muy valiente, los felicito, tienen una hija fuerte —expresa con una media sonrisa. Justo en ese momento siento que el alma regresa a mi cuerpo, siento que vuelvo a vivir. En este preciso momento me doy cuenta de que ella es mi vida, mi aire y que sin ella solo sería…exacto no sería nada.

—Pudimos controlar la hemorragia, su sangre como lo saben es común y eso ayudó mucho. Está en recuperación y se quedará hasta que estemos seguros de que este fuera de peligro, apenas eso suceda la trasladaremos a una habitación —las lágrimas vuelven a caer y no me importa si mis amigos me hacen bullying por el resto de mi vida pero como no llorar si mi pequeña está bien.

—Gracias Bruno, gracias —el médico desaparece y yo abrazo a mi madre con todas mis fuerzas, no la perdí.  Ella está conmigo, siempre estará conmigo. Y yo siempre estaré con ella con mi nena.

—¿Puedo quedarme con ella? —pregunto a los padres de Kyra. Ellos se miran entre si y luego asienten.

—Mi hija desearia verte cuando despierte—susurra el señor Lincoln—además nosotros haremos turno o dormiremos en él área de descanso. Puedo pedir que asignen una habitación para que vayas a esperarla ahí, asi tambien estaremos pendientes de Kyra en casa nos volveriamos locos—asiento.

—Gracias—media hora despues todos se despiden de mi. Mi mama promete traerme mañana temprano ropa, al igual que Mel y Aarón prometen venir temprano, los señores Linocoln se despiden y van a sus areas del hospital pero estableciendo indicaciones a las enfermeras y colegas de este lugar.

Paso al cuarto en el que se encuentra casi dos horas despues de estar en una silla de plastico muy dura. Me acomodo en el sillon y espero a que trasladen a Kyra a esta habitacion, durante la noche no duermo, pero en la mañana cuando entra mi corazón se detiene. 

Me paro de un salto, camino hacia ella y tomo su mano que esta un poco fria. La beso con amor, ternura y eterno agradecimiento, ella es mi guerrera, la mujer mas increible que conozco es mi superwoman si ese será su nuevo apodo y la amo.

—Solo fue un susto mi vida—murmuro bajo la atenta mirada de las jovenes enfemeras.

—¿Es tu novia? —pregunta una de ella mientras acomoda los sueros

—Es la mujer de mi vida y la futura señora Blair—murmuro con amor y viendo fijamente su rostro, su angelical rostro.

—Aww ¡que lindo! —chillan y yo sonrio porque cuento los dias para que eso suceda y que ella lleve mi apellido junto con su hermoso nombre.

Las enfermeras y enfermeros  se despiden después de terminar de instalar todo y luego con cara de enamoradas salen de la habitación, me recuesto en el sillón y la miro hasta que mis ojos pierden fuerzas y me quedo dormido.

Horas después mi mamá me despierta, hace que me duche y me cambie de ropa, los papás de Kyra también pasan por su habitación y luego de comer algo me vuelvo a quedar dormido, ahí con ella. Pierdo la noción del tiempo y solo me preocupo de estar con ella.

Me remuevo incomodo y con un horrible dolor de cuello, cuando escucho un gemido y no es mio, abro mis ojos y miro que Kyra se remueve y trata de levantarse. Otra vez oscureció. En dos zancadas ya estoy a su costado y mirandola con alivio.

—Amor…despertaste…—digo emocionado, ella frunce el ceño sin comprender nada de lo que sale de mi boca.

—Nena…—susurro trato de tomar su mano y la aparta con suavidad. No tiene fuerzas. Ese gesto me sorprende porque mi Kyra jamas haria eso.

—¿Quién eres? —pregunta en un débil susurro. 

Y ¡boom! Algo en mi se rompio, no me digan que perdio la memoria porque me muero ella no puede, ella me ama.

—No…Kyra ¿acaso no te recuerdas de mi pequeña? —lo digo con desesperacion, con el corazon a mil, mas de mil revoluciones por microsegundo ¡Joder!

—Soy tu novio, el hombre que mas te ama en este planeta, el que daria la vida por ti, el que te hace suspirar cada segundo y el que ama besarte—susurro y acerco mis labios, suavemente a los suyos para unirnos en un delicado beso, en uno tierno.

Espero esto la haga recordar de algo o juro que voy a morirme.

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Hola❤️ No se olviden de seguirme en Instagram Jediva_16. Los quiero. Besitos y abrazos. Faltan solo tres capítulos para el final y quizás uno que otro extra. 



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En el texto hay: adolescentes, amor-odio, mentiras dolor

Editado: 29.04.2021

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