48. ¿Quién eres?

Kyra 

Escucho un horrible sonido que quiero apagar en este mismo instante, pero mis extremidades se encuentran adormiladas y con una gran pesadez. Me remuevo un poco y un punzante dolor en mi vientre me hace gemir, no me puedo mover. Me cuesta abrir mis ojos, siento la luz atacandome directamente y dañando mi iris, con pereza levanto mi mano hasta cubrir mis ojos para empezarlos a abrir lentamente, cuando lo hago parpadeo para saber donde me encuentro y porque siento que a mi cuerpo le ha pasado un trailer.

Retiro la mano que cubria mis ojos con cuidado, me enfoco rapidamente en mi alredor y en eecto estoy en una sala de hospital.

—Amor…despertaste…—frunzo el ceño frente al guapo joven que tengo a mi costado, enfoco mi vista, es hermoso.

—Nena…—susurra y trata de tomar mi mano pero la retiro

—¿Quién eres? —pregunto un tanto perdida en mis recuerdos.

—No … Kyra ¿acaso no te recuerdas de mi pequeña? —lo dice con desesperación pero niego

—Soy tu novio, el hombre que mas te ama en este planeta, el que daria la vida por ti, el que te hace suspirar cada segundo y el que ama besarte—susurra y se acerca a mis labios. Cierro los ojos mientras siento sus suaves labios, de una manera tierna y delicada.

—¿Ya me recuerdas?—dice con sus ojitos brillando de temor, con algunas lagrimas por derramarse.

—Aun no —el agacha la cabeza, rendido— ¿me darias otro besito simio?—sonrio de labios cerrados, con dificultad y me muerdo el interior de la mejilla calmando las emociones de mi pecho. El suelta un suspiro ruidoso.

—Los que quieras mi vida—me besa de nuevo sin hacerme daño—¡Joder Kyra! Me pegaste el susto de mi vida ¡Pense que me habias olvidado!

—No me golpee la cabeza Blair, tu amor lo tengo tatuado en mi alma eso no se olvida bobo—susurro entre jadeos, no puedo hablar muy bien el me da una de esas bonitas sonrisas.

—¿Por qué lo hiciste? —pregunta Blair con su ceño fruncido, se a lo que se refiere.

—Primero porque te amo y se el tipo de sangre que eres, porque se que un impacto de bala te podría ocasionar la muerte, porque se que no estoy dispuesta a perderte, porque te amo Blair y lo volvería hacer mil veces sin dudarlo—lo digo con seguridad pero con mi voz quebrandoce poco a poco. No iba a permitir que algo le llegara a pasar al amor de mi vida.

—Nena pense que te perdía—sus ojos lagrimean y yo estiro peresozamente mi mano para acariciar su mejilla.

—Aquí estoy amor…—digo con algo de dificultad, se me hace dificil hablar, muy dificil.

—No hables pequeña, no hables…—al momento que dice eso todo la graduación viene a mi mente. Los recuerdos me golpean, mi mente recuerda quienes fuerón los culpables de la muerte de mi hermano. David nunca lo hizo, mi hermano tenia una vida por delante, sueños, metas, personas a las que amaba.

—Blair Alexis…él mato a …mi hermano—comienzo a alterarme mientras las lágrimas bajan sin control, el dolor en mi pecho es infernal y el ardor de la herida quema pero es inmune a lo que mi pecho siente.

—Si pequeña…tranquila…—no lo escucho trato de quitarme todo lo que tengo y salir dispuesta a matar al responsable de la muerte de Davis, él me lo quito

—Kyra calmate…—mi novio llama a una enfermera mientras yo sigo impactada y con un gran dolor. 

Los doctores entran y uno de ellos inyecta algo en mi suero y lo ultimo que veo antes de cerrar mis ojos es a Blair con sus bellos ojos oscuros, rojos y llenos de lágrimas.

Joseph 

Veo como la niña de mi vida cae rendida en la cama, pero no es bueno para ella que este alterada, no voy a negar que esa noticia me impacto y escuchar la grabación solo hace que quiere matar a ese desgraciado que le quito la vida a un ser humano tan genial como David.

—¿Cómo esta? —pregunta la mamá de Kyra junto con su papá quien trae unas flores con un globo y un pequeño peluche.

—Bien—respondo viendola dormir. Sus papás pasarón en el hospital, haciendo turno porque yo decidi cuidar a Kyra, asi que visten su traje de doctores—la acaban de sedar, se altero un poco—explico. Ellos me miran a la espera de que diga algo más pero nada, de mi boca no sale nada.

—¿Por qué se altero? —no se que responder, es mi niña la que tiene que contarselos, la que tiene que soltar ese gran peso.

—Es mejor que ella lo explique cuando despierte—ellos asienten no muy convencidos y se acercan a su hija para darle un fuerte abrazo

—Te amamos pequeña—murmuran al unisonido, acariciando su cabellera mientras unas cuantas lágrimas se les escapan.

En las siguientes horas me cambie, comi con mi mamá y mis amigos, Mel y Aarón, y regrese al cuarto para ver si mi niña ya se desperto. Aproveche para detallarla con cuidado, cada una de sus fracciones mientras lloraba, me duele pensar que mi Kyra paso por tanto y sola, callando.

—Jo…Joseph…—murmura soñolienta y se remueve incomoda

—Aquí estoy amor tranquila—ruego no quisira que otra vez la seden.

—Alexis mato a mi hermano…—murmura y suelta un pequeño gemido de dolor que me parte el corazón.

—Lo se amor, lo se

—Necesito mi bolso, necesito a mis papás traelos Joseph porfavor…—implora y se que a llegado el momento.

—Vuelvo enseguida pequeña, tranquila—dejo un beso en su frente y salgo drecto al consultorio de los señores Lincoln.

—Victor—llamo su atención

—Dime muchacho—cierra su portatil y enfoca su atención en mi

—Kyra desperto... quiere hablar con ustedes— el frunce el ceño y se para de inmediato

—Vamos por mi esposa—los dos buscamos a Susana la cual enseguida nos sigue, esta feliz, feliz por su hija pero no se como van a reaccionar a todo.

Los tres entramos a la habitación de Kyra y la vemos acostada mientras lagrimas infinitas corren por sus mejillas

—Oh por Dios mi niña ¿estas bien? —Susana es la primera en acercarse a ella con precupación y acunar su rostro—¿Te duele corazón? —dice desesperada sin saber porque mi mujer llora tanto.