Querido Jeremy:
Tienes que admitir que al principio las cosas eran magníficas e iban viento en popa.
Todo el mundo hablaba de nosotros y eso es lo que tu querías, generar envidia y darle celos a Raven.
Era una lástima que no tuvieses tiempo de fijarte en que es lo que quería yo o cómo me sentía al respecto, porque seguías ignorando mis sentimientos hacia mí.
Y eso no estaba bien, Jeremy.
No lo estaba.