Cap. 54 Confesiones II
Mientras Dominique hablaba con Altair, los demás habían bajado y fueron recibidos por las miradas expectantes de todos. Para ese momento ya Ben los había puesto al corriente de lo que había sucedido y especialmente las Valois estaban muy apenadas.
- ¿Abuelo? -- preguntaron varias voces
- No hay nada qué hacer, no cambiará su versión de los hechos -- les dijo él y Ben cerró los ojos mientras que los demás tenían distintas expresiones de horror
- Pero… ¿por qué? -- preguntó Dorian
- Señor Black -- dijo Pauline dando un paso hacia Tyler
Todos la miraron con extrañeza, porque en principio, y aunque ya llevaban casi seis años prácticamente conviviendo con la familia, la chica siempre había sido la más tímida y casi nunca se dirigía ninguno de los adultos, y la mencionada condición de timidez quedó reflejada en sus mejillas.
- Dime, Pauline
- Esto me parece muy injusto y estoy segura que Anette estará de acuerdo conmigo, así que yo puedo ir a hablar con la directora y aclarar todo esto -- dijo la chica
- Te lo agradecemos mucho Pauline, pero respetaremos la decisión de mi hijo
- Pero señor Black, eso va a significar que pierda la oportunidad de ser considerado para los premios que se merece
- Escucha, linda -- intervino Sirius -- como acaba de decirte mi hijo, ninguno de nosotros va a traicionarlo, y si esta es su decisión, todos vamos a respetarla y a apoyarlo. Con relación a los premios y en este caso como dijo el mismo Altair, él es un Black y no necesita de ningún reconocimiento que valide su habilidad y poder mágico. Así que te lo agradecemos, pero te agradeceremos más que guardes silencio, y a ustedes también -- finalizó mirando a los Arvelino, a Dorian y a Ariadna
Después de eso, Jason y Lyra miraron a su hijo y a Ben, porque tenían una conversación pendiente con ellos por el ataque a los dos chicos que estaban en la enfermería, pero en ese momento habían comenzado a llegar más alumnos y en general no les parecía que fuese un buen sitio para conversar.
- Vengan con nosotros -- les dijo Jason y los chicos obedecieron
Salieron y Jason caminó por los pasillos de la séptima planta, cruzaron por uno estrecho y siguieron caminando hasta llegar al tapiz de Barnabás el Chiflado, Jason se detuvo mirando hacia la pared que estaba frente al tapiz, cerró los ojos y unos segundos después se materializó una puerta. Cassander y Ben se miraron con sorpresa, porque si bien ellos habían utilizado la sala de los menesteres en incontables ocasiones en los seis años precedentes, no era de aquel modo como podían acceder a ella. Sin embargo, se guardaron la sorpresa y siguieron a Jason y a Lyra al interior que en esa ocasión tenía el aspecto de una cómoda salita con varios sillones y una mesa donde había una jarra humeante y varias tazas. Jason les hizo una seña a los chicos para que tomasen asiento mientras Lyra después de verificar que el contenido de la jarra no fuese té – algo que habría sido muy extraño teniendo en cuenta quién había ordenado la sala – servía en las tazas y se las aceraba a los chicos y luego a Jason.
- Gracias Nena – le dijo Jason y luego miró a los chicos – Bien, asumo que lo de hoy tiene que ver con Sandy, pero como el señor Andrevich no está involucrado, me gustaría saber cuál fue el crimen de éstos individuos -- dijo Jason y los chicos se miraron, pero fue Cassander el primero en hablar
- En realidad en mi caso no fue por Sandy, papá -- dijo para sorpresa de sus progenitores -- en esta ocasión fue por causa de Arkania -- y en este punto tanto el gesto como la voz de Cassander se endurecieron -- ese estúpido infeliz intentaba besarla
La taza de chocolate de Lyra tintineó sobre el plato y sus ojos doblaron de tamaño, mientras que Jason tuvo mucho más éxito para disimular su sorpresa, pero colocó la taza sobre la mesa antes de hablar.
- Aclaremos un par de cosas ¿Intentaba besarla, o tú creíste que era así?
- No papá, estoy positivamente seguro de lo que vi
- ¿Y esto sucedía con o sin el concurso de Arkania?
- ¿Qué? -- preguntó Cassander y Jason lo intentó de otra manera
- Este caballero, suponiendo que lo sea ¿la estaba forzando o…?
- ¡No lo sé! -- exclamó Cassander poniéndose de pie y tirando la taza en el proceso -- ¡No supondrás que iba a ponerme a preguntar!
- Cálmate Sander -- le dijo Lyra mientras reparaba el estropicio
- ¿Que me calme? -- siguió vociferando -- ¡Créeme madre, si veo a un mal nacido…!
- Cassander Zavier, no le grites a tu madre y siéntate -- dijo Jason con voz gélida y Sander hizo inmediato silencio
- Lo lamento, mamá -- se disculpó él y Lyra le sonrió pensando en lo mucho que ese individuo se parecía al padre
- Según entiendo y por lo que sabemos, ese sujeto podría ser el novio de Arkania
- ¡No! -- exclamó Cassander poniéndose nuevamente de pie y Jason elevó una ceja por lo que el chico volvió a sentarse
- ¿Por qué no?
- Porque… bueno porque… ¡no!
- Tío ¿me permites? -- preguntó Ben y Jason asintió -- Sé que puede sonar mal lo que voy a decir, pero Arkania es tan coqueta como…
- ¡Si dices alguna estupidez lo vas a lamentar, Jason Benjamin! -- lo interrumpió su primo
- Lo que iba a decir es que es tan coqueta como Daniela y las Potter, lo que hace que muchos de estos imbéciles piensen que pueden tomarse ciertas… libertades, pero eso no significa que Arkania haya estado de acuerdo
- Entiendo, pero por el bonito color que llevas hoy en el cabello -- dijo Jason mirando a su hijo -- podríamos pensar que el individuo en cuestión contaba con su aprobación
- Esto no es por lo de hoy -- dijo Cassander de malos modos -- Anoche tuvimos otro… desacuerdo por algo parecido y bueno, ya saben que la tiene en contra de mi cabello
- Al menos es en contra de tu cabello y no de tu persona -- dijo Jason haciendo su mejor esfuerzo por no reír
- Te equivocas, mi persona está incluida, pero usualmente Ben se encarga de componerme
- Hijo ¿no crees que deberías y en realidad todos ustedes, dejarlas respirar un poco? -- preguntó Lyra
- No madre, porque no pienso permitir que vaya por ahí comportándose de modo que cualquier infeliz piense que puede… bueno… ya sabes -- finalizó