Las Ruinas de Cassandrea

Cap. 109 ¿La escuela?

 

Antes de que los grupos de Aurores saliesen para internarse en el bosque, se presentó una breve discusión entre los del alto mando.

  • Por favor Harry, ni tú ni Joseph deberían venir  --  estaba diciendo Charlie
  • Y yo estoy de acuerdo con eso  -- lo apoyó Sirius
  • Pierden su tiempo, no voy a quedarme de brazos cruzados cuando una de mis niñas está perdida allá afuera  --  dijo Harry
  • Estás consciente de que esto puede ser una trampa ¿no?  --  dijo Bill  --  Pueden estar utilizando a Sandy para atraparte a ti
  • Independientemente de que así sea  --  dijo él y luego agregó con paciencia  --  Escuchen, entiendo su preocupación, pero ya hemos pasado por esto antes  --  después miró a Ron y a Hermione
  • Sigo pensando igual que siempre e iré allá donde tú vayas, compañero  --  dijo Ron
  • Siempre juntos ¿recuerdas?  --  lo apoyó Hermione. Harry les sonrió a ambos y luego miró a sus hijos
  • Te apoyaré cualquiera que sea tu decisión, papá  --  dijo Albus
  • Soy tu hija, señor Potter, y no esperaría que actuases de otra manera  --  agregó Lily
  • Y yo me estoy preguntando por qué se empeñan en una causa perdida haciéndonos perder el tiempo. Supongo que algunos de ustedes tienen un extraordinario deseo de ser sacudidos por papá y créanme que si no empiezan a moverse, yo mismo voy a ayudarlo y terminamos más pronto  --  dijo James con su habitual delicadeza

Entre tanto Grace y Dánaee miraban a Joseph, pero ni se molestaron en decir nada, ambas lo conocían lo suficiente como para saber que él ni siquiera daría razones o consultaría con nadie como lo había hecho Harry, y siendo que el único que podía ordenarle quedarse era Harry y no lo haría, aceptaron con resignación que nada podían hacer.

Después de eso Bill había encargado a David Wiler, el hermano de Daviana y segundo al mando en el escuadrón que comandaba Bill, hacerse cargo de la seguridad de la escuela y en especial de los miembros de la familia, indicándole que en cuanto salieran de clases los reunieran y los pusiesen a salvo a todos en un mismo lugar hasta que ellos regresaran. Una vez ultimados estos detalles, partieron.

En cuanto los chicos salieron de clases, se encontraron con dos Aurores perfectamente visibles a las puertas de las aulas.

  • Por favor, todos los que se apellidan Prewet, Potter, Black, Weasley, Stone, Bonham, Morgan, Arvelino o Valois deben acompañarnos  --  dijo uno de los Aurores que estaba en la puerta del aula de Encantamientos

 Más o menos lo mismo repitieron los que esperaban a la salida de las otras clases y los chicos los siguieron, aunque en el caso de los de séptimo arrastraron con ellos a Ariadna y a Dorian, mientras que Erika se llevó con ella a Vladislav. En cuanto estuvieron todos reunidos en el aula del vestíbulo que no se usaba, David les explicó lo que estaba sucediendo.

  • Sus padres les piden por favor que no dificulten las cosas y se queden aquí hasta que ellos vuelvan  --  dijo al final

Todos a una voltearon a ver a Aydan, porque en ausencia de Cassander, Arthur, Altair y Ben, él era el mayor de los varones y quien por defecto asumía la jefatura de aquel organizado grupo de chicos. Lo bueno de Aydan era que, a diferencia de su hermano, era menos impulsivo que éste y había heredado el buen juicio de Remus, al menos en casos de crisis, ya que por lo demás, no difería en mucho de los gemelos.

  • Tienes mi palabra de que nadie se moverá de aquí  --  le aseguró a David  --  pero queremos estar informados, así que empieza por decirnos si no han tenido ninguna noticia desde que partieron
  • No, solo sabemos que siguen buscando

La mayoría de ellos conocía bastante bien el bosque, ya que en sus casos el mismo había sido de todo menos prohibido, de manera que Aydan miró a los hermanos Black, Rigel, J.B. y Antares, pero fue Rigel el que habló.

  • Supongamos  --  dijo elevando su varita y dibujando una figura en el aire  --  que se dividieron digamos que en siete u ocho grupos, entrando por estos puntos  --  dijo señalando diversos lugares de la figura  --  podrían demorar aproximadamente un par de horas en cubrirlo
  • Al menos hasta la zona límite de la escuela  --  agregó J.B.
  • Podrían demorar un poco más por aquí  --  dijo Jordan  --  No podemos olvidarnos de las amables criaturas que la habitan  --  agregó Jonathan
  • No, pero es posible que esas zonas estén a cargo de los abuelos Sirius o Remus  --  dijo Antares
  • Y en cualquiera de los dos casos, esos bichos reconocerían a un ser superior  --  añadió Sebastien
  • Bien, ha transcurrido apenas algo menos de una hora  --  dijo Aydan mirando su reloj  --  así que en breve deberíamos tener noticias
  • Y más vale, porque solo les quedan a lo sumo un par de horas de luz  --  dijo Axel
  • Eso dependiendo de dónde estén  --  agregó Lorena que era la que sustituía a Sandy en ausencia de ésta

Los tres Aurores que acompañaban a David y que eran relativamente nuevos en el servicio, miraban a los chicos con la boca abierta, porque siendo que ellos habían escuchado los planes de sus jefes, estaban sorprendidos de la precisión con la que los jóvenes habían determinado los pasos a seguir, mientras que David que ya llevaba años conociéndolos se sorprendió menos, ya que aparte de haberlos visto en acción, al menos a los mayores, sabía por su hermana Daviana tanto de la astucia como de la peligrosidad de todos, de manera que, aunque Aydan le había dado su palabra de permanecer allí, decidió tomar una precaución extra y lanzar un hechizo que les impidiese ir a ningún lado, ya que estaba perfectamente al tanto de la habilidad de algunos de ellos con relación a la manipulación de la materia.

  • ¡Por las barbas de Merlín!  --  exclamó Becky y David prestó atención  --  ¿Dónde está Sue?  --  les preguntó a la gemelas Valois
  • Está en la enfermería  -- contestó Nadine
  • ¿Por qué? ¿Qué le sucede?  --  preguntó Arkania
  • Algo le cayó mal en el almuerzo  --  informó Virgine  --  pero madame Pomfrey dijo que en un par de horas estaría bien
  • Entonces debe estar preocupada buscándonos  --  dijo Juliette
  • Mi hermano también se preocupará si no me ve, así que creo que es mejor que yo me marche  -- dijo Vladislav
  • ¡No!  -- dijeron las chicas mientras Erika y Fabiana lo aferraban por los brazos para enorme indignación de J.B. que seguía sin tragar del todo al individuo
  • Escuchen, yo no soy parte de la familia y…
  • Y nada  -- lo interrumpió Lorena acercándose a él  --  si nuestros padres nos están haciendo vigilar es porque tienen buenas razones para ello, y de experiencias anteriores sabemos que nuestros amigos corren los mismos riesgos que nosotros sean éstos los que sean, solo por serlo
  • Mala suerte amigo, tendrás que quedarte te guste o no  --  le dijo Cristian




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