Narrador
El plan de Ava para exponer la discriminación en la escuela no tuvo tiempo para dudas. En los tres días posteriores a tomar la decisión, la misión de Leo se ejecutó con la precisión de un adolescente impulsado por la rabia y una causa.
Leo, sabiendo exactamente qué sentían sus compañeros marginados, no perdió el tiempo en formalidades. Se acercó con un propósito y una franqueza que la mayoría de los adultos nunca usaría. Con el teléfono en mano, ofreció a sus compañeros una sola alternativa: exponer la verdad. Para sorpresa de Ava, a pesar del miedo a las represalias, la respuesta fue masiva.
La sensación de saber que no estaban solos era más fuerte que el miedo. En menos de setenta y dos horas, Leo tenía cerca de veinte testimonios sólidos, un torrente de videos que exponían la crueldad del Director Harding y varios profesores. Estudiantes con dislexia, ansiedad social, TDAH, y discapacidades físicas contaban sus historias con una sinceridad aplastante.
Ava observaba el teléfono de su hermano como si fuera una bomba de tiempo. Sabía que había cruzado una línea. Ya no era una chica normal que miraba de lejos; ahora era una conspiradora. Y para continuar con una operación de esta magnitud, se dirigía a buscar la frialdad y estrategia de su aliado.
El Intercepto del DirectorMientras caminaba por el pasillo lateral, absorta en los planes que la esperaban, el Director Harding la intercedió.
Director: Ava, por favor. Un momento. (La detuvo con una mano en el brazo, una expresión de cercana preocupación en su rostro, no de enojo).
Ava: Director...
Director: No te preocupes, no es nada oficial. Solo quiero hablar contigo de futuro a futuro. Me recuerdas a mi sobrina, eres brillante, con los pies en la tierra. Por eso me duele ver que estás empezando a... tropezar.
Ava: ¿Tropezar?
Director: (Bajó un poco más la voz, como si la estuviera defendiendo). Tienes que entender cómo se ve esto desde fuera, cariño. La escuela tiene una reputación que mantener. Y cuando los estudiantes prometedores como tú empiezan a tomar decisiones... visibles que son cuestionables, tengo que intervenir. No por castigarte, sino para proteger tu camino.
Director: Mira, los rumores son como la tinta en papel, una vez que se esparcen, nunca se quitan del todo. Y si tú sigues cerca de una... influencia que atrae tanta atención negativa, la gente asumirá que tú eres parte de ese problema. ¿Entiendes?
Director: Simplemente no quiero que, cuando llegue el momento de enviar tus solicitudes, yo tenga que ser completamente honesto y decir que, a pesar de tus buenas notas, tu juicio te llevó por caminos que dañaron la imagen de la escuela. Solo te pido que seas más discreta y pienses en lo que realmente te conviene. (Le dio una palmadita en el hombro y se fue, dejándola congelada en el pasillo).
La Confesión Silenciosa en el GalpónAva entró en el galpón, ese refugio que olía ligeramente a salitre y a pintura vieja. La amenaza del director había viajado con ella, flotando en el aire húmedo.
Jack, ya estaba allí, sentado en el borde de un sofá gastado. Levantó la vista. Sus ojos verdes profundos se fijaron en Ava.
Ella dejó su mochila con un sonido sordo y se dirigió a una de las ventanas sucias, mirando el mar. Se quedó de pie, con los brazos cruzados.
(De aquí en adelante, la comunicación es completamente en Lenguaje de Señas)
Jack: [¿Qué pasa?]
Ava se encogió de hombros, aún de espaldas.
Ava: [Nada. Pensando]. ¿Empezamos?
Jack: [No. No vamos a empezar. Estás actuando con miedo. Ven].
Jack se puso de pie con su metro ochenta. Él caminó lentamente hacia ella, forzándola a girarse.
Ava: [Solo tuve un día difícil en la escuela].
Jack: [¿Día difícil? No. Aquí siempre estás tranquila. Hoy no. Dime qué pasó].
Ella dudó.
Ava: [Es mi futuro. Mis metas. La gente está hablando. No puedo permitir que mi expediente se vea afectado por asociaciones equivocadas].
Jack se acercó un poco más. Sus ojos no eran acusadores, sino analíticos.
Jack: [¿"Asociaciones equivocadas"? ¿Esas son tus palabras? ¿O las palabras de otro?]
Ava: [Nadie me ha dicho nada. Es mi decisión. Necesito espacio. Eres una distracción. No puedo permitir que se haga más visible...]
Jack: [¿Quién te asustó? Yo sé que tú no me traicionarías. Pero tu cuerpo me está gritando que acabas de ver a un fantasma].
Jack dio el último paso y, por un instante, sus dedos rozaron los de ella, transmitiendo apoyo. Luego, retiró rápidamente sus manos para poder seguir signando.
Jack: [Alguien te puso una pistola invisible en la cabeza. Te hicieron creer que si sigues cerca de mí, perderás algo importante. Dime qué es].
Ava no pudo más. Las lágrimas se acumularon en sus ojos color miel brillantes.
Ava: [El director me interceptó. Dijo que iba a arruinar mis cartas de recomendación para la universidad si sigo siendo una "distracción visible"].
Jack asintió lentamente. Una calma peligrosa en sus ojos verdes.
Jack: [Ya veo].
Ava: [Lo siento, Jack. Yo... no quería decir eso de que eras una distracción].
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Editado: 08.10.2025