Las Sombras de mi Pasado (prontamente Resubiendo Y Editada)

1: Era ella.✓

La rutina de Aren inicia por la mañana cuando se levanta a preparar su vestimenta, a bañarse y cepillar sus dientes. Peinar a un lado su rubio cabello tal y como su instructor de modales le indicó quedando igual a su hermano Alexandre. Ajusta la corbata de su uniforme y sale de la habitación encontrando en el pasillo a su dulce madre caminar con su pequeñita panza hinchada y con Ala a su lado ayudándole.

Aren acercándose le dedica una sonrisa, él amaba mucho a su madre y al pequeño ser que crece dentro de ella por lo que con una de sus manos le indica a su hermana menor que se haga a un lado, que él terminará de ayudar a su madre.

—¿Preparado? —le pregunta la dulce mujer rubia de mejillas idénticas a un bermellón.—Es tu último año antes de entrar al Sout Banks.

Aren curvó sus labios en una mueca que dejaba en claro lo que aquello le pareció.

Él no desea irse al internado y dejar de lado a su familia pero entiende que es parte de su familia cumplir con ello.

—Es tu obligación como un Campbell.—agregó, la rubia ante el silencio sepulcral de su hijo.

Aren aspiró hondo y mencionó lo siguiente.

—¿Qué ocurre si decido no ir al internado y quedarme con ustedes en casa? —preguntó, aún siendo consciente de la respuesta que va a recibir.

—Heins no va a permitir que uno de sus hijos no vaya, Aren.—Shamira Campbell no le encantaba del todo dicha propuesta que le planteó su esposo años atrás cuando Aren tan solo tenía unos 12 años.

Aren no va a contradecir a su madre y acepta el destino que su padre había planeado por él antes de preguntarle. En silencio terminan de bajar los grandes escalones de caoba oscura para parar al recibo principal lleno de pertenencias con precios elevados, ambos se desvían al comedor donde su familia esperaban por ellos.

Aren ayuda a su madre con la silla y regresa junto a Alexandre para que minutos después la servidumbre salga a entregar a cada persona su desayuno. Aren recibía cosas aparte por ser el único alérgico a diversos alimentos. Era intolerante a la lactosa, a los camarones, comía un crustáceo y terminaría hospitalizado de emergencia por las quemadas que saldrían en su piel. La piel de Aren era aún más delicada que la de sus demás hermanos, Aren no podía estar bajo el sol mucho tiempo porque podría sufrir de insolación intensa y saldrían herpes en su zona afectada.

La cuales eran sus brazos y rostro.

Aren Campbell era hermoso, la clara imagen de un dios griego hecho humano y con un rostro casi tallado por los mismos dioses del Olimpo. Aren porta un lacio cabello rubio de color miel idéntico al de su madre, unos ojos azules profundos que parecían no tener fondo por lo mucho que el chico habla a través de ellos. Y una piel traslúcida blanca.

Gerardo el mayordomo deja delante de él un plato de pan tostado con frutilla picada en cubos encima y una mínima pisca de azúcar morena la que a Aren tanto le encantaba. Acompaña la comida con un jugo de kiwi y frutilla, el cual era su favorito desde niño y el que únicamente su madre y la ama de llaves sabían preparar.

—Tienes que ir conmigo a la casa blanca el día de hoy, Alex.—su padre se dirige a su hermano mayor a su lado

—¿Ocurrió algo? —le pregunta el otro rubio alzando una de sus pobladas cejas.

Heins hizo un extraño ruido con su garganta tragando lo que había engullido.

—Sabes que es tu deber ir.—le lanza una dura mirada que hizo que Alexandre baje su mirada.—Antes encárgate de llevar a Ala, Alenna y Aren al instituto.

Alexandre expulsa una pequeña bocanada de aire, a pesar de ser el inicio de un nuevo día ya se sentía agotado por las responsabilidades que su padre dejaba encima de sus hombros. Alexandre solo se dedicó a asentir aceptando la orden de su progenitor y siguió comiendo.

Shamira pasó pesadamente su desayuno ante el comportamiento exigente y mandón que tenía su esposo a sus hijos, a los niños de su sangre.

Al cabo de unos minutos Alexandre con una dulzura digna de él le indica a sus hermanos que suban al coche. La primera en hacerlo es Ala que venía ayudándole a Alenna con una clase que ella no había comprendido y del cuál tendría una evaluación el día de hoy. Aren quedó de pie viendo a sus hermanos mientras que él apreciaba el cielo teñido en gris, la mayoría de los días en Alemania eran grises, pocos días se apreciaba un precioso sol o atardecer.

Y si ocurría no se le permitía verlo.

—Ve con Alex y tus hermanas o te van a dejar.—su dulce madre aparece a su lado para despedirlo.

Shamira amaba a sus hijos por igual, eran su adoración pero había algo en Aren que hacía que ella lo amara más, e incluso más que a sus hermanos. Shamira le costó mucho concebir a Aren por problemas de fertilidad pero gracias a un buen especialista pudo tenerlo, pudo tener a sus dos niñas y al bebé que venía en camino.

Ella luchó con Aren cuando tan solo tenía horas de nacer, Aren era prematuro, nació a los siete meses de gestación con una maduración pulmonar a medias haciendo que durara en incubadora por lo menos los siguientes dos meses que le faltaban hasta que pudiera respirar por su cuenta. Shamira desde ese juró que cuidaría de Aren a toda costa, por encima de cualquier persona incluyendo a su esposo.

—Te cuidas mucho, por favor.—le suplica Aren viéndola muy serio. Sus mayores miedos salían a la luz cuando su madre se quedaba sola con la servidumbre en casa, sin nadie a su cuidado.

—Aren estaré bien, pequeño.—su madre acaricia suavemente su mejilla, con aquella dulzura que solo Shamira Campbell podía transmitir.—Te amo y ve que Alexandre espera por ti .

Aren le da un beso de despedida a su amada madre y va con sus hermanos al coche, quedando con su hermano en el asiento de copiloto.

Las masas boscosas que rodeaban su mansión de tres pisos quedaban cada vez más atrás dejando a la vista la hermosa ciudad capital de Alemania, Alexandre conducía viendo por el espejo retrovisor a sus dos hermanas que hablaban y reían. Ala tenía a Alenna en sus piernas mientras que le mostraba todo lo que había en la ciudad y la rubia más pequeña veía todo con fascinación.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.