6: Cambios.✓

Las semanas siguientes dentro del internado Sout Banks para los hermanos fue una completa tortura y más para Alexandre, estuvo pagando por lo ocurrido dentro de su habitación con Jasmine Johnson.

—Aren Campbell, dirección ahora.—La señorita Cherry anuncia entrando al aula de Aren que tranquilamente presenciaba clases de historia.

Aren confundido y con un ceño muy marcado en su entrecejo sale del aula con sus pertenencias dentro de la mochila, a medida que él va caminando va pensando en que probablemente el que él vaya a dirección se trate de un plan de Heins para probarlo, para saber si es igual a Alexandre o si tiene más fuerza de voluntad.

Ojalá fuera así.

Al otro lado de la ciudad en una cama de hospital se encontraba Alexandre con diversos cortes, hematomas y golpes por todo su cuerpo y con una máquina que le transfiere oxígeno. A su lado su madre Shamira se encontraba con las dos hermanas menores, la mujer rubia caminaba de un lado a otro ya que sentía tanto un dolor físico como sentimental y es que ella estaba embarazada de su otra hija, de la bebé Alyssa.

—Pasa Aren.—se abrió la puerta y el rubio entró viendo a los lados.—Puedes tomar asiento ya que debo darte una noticia por parte de tu padre.—la sangre de Aren se heló al igual que cada milímetro de su piel a la mención de su progenitor.

Aren hizo exactamente lo que Cherry, la mujer de piel bronceada y cabello teñido en rojo cereza le ordenó.

—Hace unas horas cuando Alexandre salió a cumplir con su labor en casa blanca su camioneta fue interceptada por unos delincuentes, no robaron pero si golpearon a tu hermano. Tú padre asegura que trata de una amenaza que le hicieron y la cobraron con Alexandre ya que andaba solo y sin guardaespaldas.

A Aren le tembló el labio inferior y su cuerpo entero se estremeció ante lo contado, en su mente no cabía duda que si, trataba de una amenaza pero para quien estaba dirigida no era para Heins sino más bien para Alexandre y Aren, ya que ambos están siendo muy rebeldes dentro del internado y al presidente no le agrada eso

—Si deseas ver a tu hermano puedes hacerlo, cuentas con el permiso del directivo y afuera está a la espera uno de los guardaespaldas de tu padre esperando por ti. Tú decides Aren.—Cherry con aquello dicho sale dándole espacio al pobre chico que inmerso en sus pensamientos aceptaba lo que pasó.

Aren puede imaginar lo mucho que sufrió Alexandre con ello, y peor por lo que puede estar viviendo ahora en la clínica asustado y con una amenaza rondando por su cabeza. Era sencillo dentro de la mente maquiavélica de Heins, o Alec se casa con la chica con que mantuvo relaciones o muerte. Y así mismo será para Aren si llega a seguir el paso de su hermano.

Aren soltó un sollozo que había ahogado al segundo de saber la noticia y secando las pocas lágrimas que había derramado sale de la dirección de camino a la salida del internado. Iría a ver a su hermano mayor en contra de cualquier pronóstico.

Por otro lado, se encontraba Jasmine Johnson viendo a todos lados buscando al amor de su vida para darle la noticia que supo en la mañana cuando fue a la enfermería. Jasmine estaba embarazada de Alexandre, ella tendría un bebé del chico que había sido su amor desde el primer instante en que lo conoció.

Jasmine entró a un pasillo buscando a Aren para preguntar por su hermano sin saber que ese mismo chico ya estaba llegando a la salida del internado. Jasmine durante todo el rato que estuvo caminando por los dormitorios de los chicos buscando al segundo de los Campbell sintió la atmósfera muy extraña, tensa y lúgubre.

Ella sintió su piel erizarse de mala manera cuando atravesó toda una habitación entera encontrando nada, ya debía volver a clases por lo que debe salir de ese sitio cuánto antes. Aspiró profundamente y retrocediendo da una última mirada y se da vuelta para regresar por dónde vino, ya después le contaría a Alexandre cuando lo vea o cuando encuentre a Aren.

Ella comenzó a bajar con cuidado las escaleras, no quería salir lastimada ella o su bebé pero con lo que no contó es que de un pasillo salió un encapuchado en negro al cual no se le veía el rostro y la empujó sin que se diera cuenta, ella comenzó a caer escalón por escalón, estampó su cuerpo con brusquedad contra la pared y volvió a caer rodando por los escalones hasta quedar acostada boca abajo en el pasillo.

Jasmine había quedado inconsciente.

Aren finalmente apareció por la clínica y fue recibido por sus hermanas y sus tiernos abrazos y por un beso de su madre Shamira. Ella le encargó a sus hermanas mientras que bajaba a la cafetería del hospital a buscar un café para ella.

—¿Cómo sigues hermano? —le pregunta Aren a Alexandre cuando despertó.

—Tengo la pierna rota.—sonrió sin gracia.—Y me duele la espalda y costillas por los golpes. Pero fuera de ello, me siento bien.

Aren solo rió agradecido con Dios por no haberle arrebatado la vida al mejor hermano del mundo, porque para Aren, Alexandre era eso.

—Eres fuerte, saldrás de esto.—le dice.

—Debo, tengo que cumplir con la amenaza.—eso le interesó a Aren.

—¿A todas estas, si lo fue? —Aren miró a sus hermanas y las encontró muy tranquilas viendo el móvil.

Alexandre asintió pesadamente.

—Heins quiere que cumpla con lo del matrimonio por conveniencia o mi muerte, Aren. Y esto —señala sus golpes.—Es solo una probada de lo que me estará pasando en todos estos días hasta no dar mi respuesta.

—¿Finalmente habrá boda dentro de la familia? —Alec dudó.

—Casarme es lo menos que quiero a los 22 años, Aren.—Él se sentía muy joven todavía, tiene mucha vida ante sus ojos.—Quisiera la oportunidad de invitar a salir a Jasmine en citas y posiblemente en un futuro lejano casarme con ella pero aún no, no estoy listo.

—Debes Alec, o sino te van a matar.—Eso a Aren no le agradó, vale más la vida que cualquier cosa en esta circunstancia.