Las Vidas de un Amor

Capítulo 6

 

Tasya

Habían pasado muchas cosas en un solo día, encontré a la persona con la que soñaba desde hace tiempo y no solo eso, él parece saber quién soy yo sin necesidad de preguntar nada, tengo una extraña sensación como si hubiera encontrado algo que perdí.

Ahora estoy viendo por la ventana del gran hotel que se alza por encima de muchos edificios en medio de la oscuridad, después de comer Khalid se fue aunque pude notar en su mirada que no se quería ir y me hizo prometerle que no me iría de aquí y para ser sincera aunque no me lo hubiera pedido no me iría. 

De repente escucho que tocan la puerta de la habitación volteo a ver el reloj que está en la mesita a lado de la cama y ya es realmente noche y no creo que sea Khalid, él entraria simplemente.

— ¿Quién es? —  Pregunto cautelosamente acercándome a la puerta.

—Soy Rita la recepcionista. — me dice una voy suave del otro lado de la puerta.

—Hola… ¿Todo bien? — Le pregunto al abrir la puerta, y veo a la recepcionista que me atendió cuando llegue al hotel, esta vez se veía muy tímida y hasta cierto punto con miedo.

—Buenas noches señorita. — Me dice un hombre de unos 50 años que esta detrás de Rita, parado firmemente y con toda la elegancia posible.  —Me presento soy Angus el jefe de personal del hotel. —

—Hola, mucho gustos, yo soy Tasya— le digo dándole la mano, al momento en que me da una pequeña sonrisa.  — ¿Pasa algo? —

—Queríamos aclarar una situación que pasó el día de hoy mas temprano. — me dice al momento que voltea a ver a Rita de una manera muy fría.

—No comprendo, ¿Qué paso? —

—Al momento de llegar al hotel,  fue atendida por esta señorita, y me informan que su comportamiento no fue aceptable. —

—Le pido perdón señorita. — me dice Rita con una voz muy baja

—Bueno de hecho si, al principio me trato muy bien pero después fue un tanto grosera. — le digo.

—Así es, por eso estoy aquí, si usted lo desea podemos despedirla. —

—Como, ¿Despedirla?, nada de eso, solo que trate de ser más amable conmigo en el futuro. —

—Si señorita, yo solo fui grosera así, porque pregunto por el señor Khalid y no sabía que quería con él. —

—Y en parte lo entiendo, solo que no vuelva a pasar. — le digo sonriendo y Rita me devuelve la sonrisa.

—Aun con su gran generosidad señorita, es necesario que se sancione. —

—No, de verdad no es necesario, no fue para tanto. — Le digo.

—Si cambia de parecer puede hacérmelo saber y si algo así pasa de nuevo o si tiene algún inconveniente dígamelo. Vámonos Rita y agradece la generosidad de la señorita —

—Sí, MUCHAS GRACIAS POR PERDONARME. — me dijo casi gritando.

No comprendía el porqué de su reacción pero a mi también me daría miedo que alguien como Angus sea mi jefe.

—Nos retiramos señorita… Me da mucho gusto tenerla aquí de nuevo— Me dice Angus mientas me da una sonrisa y se da la vuelta para irse.

Al mismo que cierro la puerta. Pero no puede dejar ir la parte que dijo que estaba de vuelta.

…………………………….

Escucho mi celular sonar, es Sonia.

—Hola, ¿Todo bien?. —

—Si jefa, ¿Cómo estás?, Oye hay una persona que me ha estado llamado muy insistentemente que quiere una cita lo mas pronto posible contigo, pero ya le dije que por el momento estamos con los lugares llenos pero sigue insistiendo. —

— ¿Cómo obtuvo tu numero personal? —

—Bueno, a algunos pacientes les he dado mi número personal para la confirmación de citas y así, pero no sé quién se lo pudo haber dado. —

—Ay Sonia, te dije que no hicieras eso, para tu comodidad más que nada, porque al dar tu número personal a un paciente es posiblemente que el lo de a alguien mas y así sucesivamente. —

—Perdón, es que se me hizo fácil—

—Por cierto, quien es la persona que quiere la cita. —

—Se llama Enzo Allen, le vas a hacer un lugar. —

—Demonios… sabes que, bloquea ese número, en la mañana fui al consultorio y me encontré a ese tipo y le dije claramente que no tenía lugares disponibles pronto y le di el número de un colega. —

—Oh, entonces lo voy a bloquear, pero antes le voy a decir que no hay lugar disponible. —

—Bien, me dices si pasa algo más. — Le digo y le cuelgo, solo espero que no sea una persona problemática. 

Hay algo de este tal Enzo que no me gusta por alguna razón, espero que no vuelva a saber de él.

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