Cap. 52 Batalla perdida

Anthar volvió a entrar una vez que Jason se había ido quién sabía dónde, y se acercó a la cama de Lily.

• ¿Puedo ser curiosa?  --  preguntó la pelirroja en cuanto él llegó
• Usted puede ser lo que guste, señorita
• Es que me gustaría saber por qué todos parecen querer arrancarte el brazo ¿Qué hiciste ahora?  --   él compuso cara de fingida tristeza
• Me lastimas, chiquita, cualquiera diría que voy por ahí haciendo desastres
• Sí claro, eres un inocente angelito  --  ironizó ella
• Bueeeeeno, tanto como inocente quizá no, pero…
• Puedes suprimir el quizá  --  acotó Lily, pero él no se detuvo
• … te aseguro que en esta oportunidad no he hecho nada. En el caso de Ly, solo quería irse a casa porque le dolía la cabeza, ya sabes que a veces tiene días que no son muy buenos. Y en el caso del simpático, pues simplemente hacía gala de su humor característico. Así que no tienes que preocuparte por mí.
• No, si es que no estoy preocupada por ti, en realidad me preocupan más los demás y lo que puedas hacerles

Anthar rio divertido y a Lily se le detuvo por un par de segundos el corazón ¿Por qué demonios tenía que sonreír? Pero sobre todo ¿por qué demonios tenía que sentirse ella de aquel modo cuando lo veía? Esto era algo que había estado preocupando seriamente a la pelirroja, y las posibles respuestas a esas preguntas no le gustaban nada.

Desde que había conocido a Anthar, su afinidad con él había sido inmediata, y el mayor de los Black había correspondido a ese cariño de manera innegable. Lily amaba a sus hermanos, incluso al desquiciado de James con todo y que el muy necio se empeñaba en hacerle la vida miserable. Albus era otro asunto, era serio, confiable, dulce y siempre estaba ahí para ayudar, aunque a Lily solía incomodarle que siempre pareciera saber lo que ella estaba pensando aun antes de expresarlo. Pero a Anthar lo había visto desde el principio de otra manera, siempre había sido muy dulce con ella, y aunque ya ella estaba aprendiendo a leer cuando lo conoció, él solía leerle cuentos y la ayudó en sus avances con la lectura. A medida que el tiempo fue avanzando, él se había convertido en una especie de héroe, ya que siempre estaba protegiéndola de las maldades de James, se preocupaba mucho cuando ella se lastimaba, y la subía a su escoba para pasearla siempre que ella se lo pedía.

Sin embargo, cuando Lily entró a la escuela su visión del chico comenzó a cambiar, esto obedeció básicamente a su comportamiento con las chicas. Lily se sentía enferma cada vez que lo veía en compañía de aquella cuerda de niñas tontas, y más de una de sus compañeras sufrió las desagradables consecuencias de hacer comentarios inapropiados sobre Anthar en presencia de Lily.

Pero cuando las cosas realmente se comenzaron a poner difíciles para ella, fue cuando poco después de su cumpleaños número once, el día del cumpleaños de Rowena, había subido al desván huyendo del necio de James, y Anthar la había encontrado mirando la guitarra. Ese día Lily no estaba muy segura de qué había ocurrido, pero cuando él se había sentado a su lado y le había sonreído, ella sintió algo muy extraño en su interior, y aunque siempre había pensado que Anthar era muy guapo y tenía una hermosa sonrisa, a partir de aquel día esa sonrisa hacía que el corazón de Lily latiese más de prisa cada vez que la veía aparecer en los labios del chico.

Por todo lo anterior, durante el último año había llegado a la lastimosa conclusión de que su primo le gustaba más de lo debido, y en navidad había sentido muchos deseos de asesinarlo al verlo tan entusiasmado con Lucy. Pero a pesar de lo mal que se sintió por eso, del asunto había salido algo bueno, aunque ella aún no lo calificase así, y era que la pequeña Potter había estado pensando que, debido a su edad, no tenía ninguna posibilidad de que Anthar se fijase en ella, pero si se había fijado en Lucy, entonces sin duda ella aún tenía esperanzas.

Pensó que necesitaba hablar con alguien de aquello, el asunto era con quién. Sus padres lo más probable era que le dijeran que era una tontería infantil. James estaba descartado de antemano, porque con el horroroso carácter que se gastaba su hermano mayor, iría directamente a romperle la cara a Anthar. Y Albus sin duda sustentaría la misma opinión de sus padres. De manera que acudió Jeremy al que también veía como su hermano, y recordó esa conversación.

• Ya me imaginaba algo así  --  había dicho el chico para sorpresa de Lily
• ¿Opinión?
• Complicado, pero no imposible. Creo que lo primero es hacer que se fije en ti  --   y ella había arrugado el entrecejo  --  Ya sé que sabe que existes, pero que te vea de otra manera y no como su primita, es lo importante
• ¿Y según tú cómo sería eso?
• Tal vez si mostrarás algo de interés por alguien más
• No seas necio, Jeremy, por si no lo has notado, todos los miembros de esta familia, incluyéndote, masacrarían a cualquier desdichado al que se me ocurriese poner en esa peligrosa posición, y sin duda Anthar sería el primero. Recuerda lo que sucedió con el infeliz de Wilson. Y tú no eres mucho mejor, porque querías sacarle los ojos -- agregó mirándolo mal
• De acuerdo, pero en este caso sería una situación digamos que… controlada
• ¡Ja! No hay forma de controlar a esos salvajes, Jeremy
• Me ofrezco a ayudarte sirviendo de carnada
• ¿Estás loco? Ya sé que eres muy bueno con la varita, pero siento decirte que, aunque tuvieses alguna oportunidad con James, ciertamente no tendrías ninguna con Anthar, te destrozaría en un segundo y no necesariamente con su varita
• Gracias  --  dijo él molesto  --  Veo que confías mucho en mi habilidad
• No es eso Jeremy, pero tú lo conoces tan bien como yo, Anthar es peligroso en grado superlativo, hasta los profesores lo dicen.
• Bueno, pero solo sería para medir el asunto, no vamos a ponernos a hacer tonterías, no es que yo tenga tantas ganas de perder mi cabeza tampoco.