Prólogo

Ya han pasado tres días de lo sucedido y nadie sabe de ella ¿Debería hacer algo? Si lo hago acabare siendo sospechosa, justo en medio del caos que viene saliendo ocurre esto.

¿Dónde está ella?

Así no imagine que sería mi vida siendo adolescente estando aquí, esto esta más allá de lo que un adolescente normal vive o eso se puede decir. 

En la televisión pasan las noticias de las 6 am donde mencionan lo que ocurre en la noche, menciona un reportero que hayan un cuerpo de una joven cerca de donde estudio pero no la han podido reconocer, ya que no tiene nada que ayude a poder identificarla.

Tengo miedo, tengo miedo ¡Tengo miedo!

Supe lo que ha hecho por mí desde que llegue aquí, nunca antes tuve el valor y justo cuando lo obtuve ella desaparece. He ayudado hasta donde me lo han permitido y hasta donde mi mamá me permite involucrarme. No quiere que manche mi nombre. 

En eso suena mi celular indicándome que es una notificación, me quedo helada cuando veo que se trata de un mensaje de un número desconocido que no puedo descifrar.

— ¿Y? ¿Qué te pareció? — Pregunta en el mensaje.

— No sé a qué te refieres. — Respondo.

— Ay vamos, las noticias. Linda manera de empezar el día ¿No crees?. — Responde esta vez el o la desconocida.

— ¿Quién demonios eres?. — Pregunto.

— Ya... Me imagino que necesitas un poco de tiempo para acostumbrarte. — Responde, pero sigue enviando mensajes —. A lo mejor le encuentras gustillo y todo, me has llamado la atención y es importante que sepas cosas que no sepas los demás.

— ¿Qué quieres decir con eso?. — Especto

— A ver resumiendo... — Dice el mensaje hasta que me entra una llamada.

Es de esta persona desconocida, no sé si aceptarla...

Tengo que, no sé de qué trata esto.

Mi identidad es irrelevante, no perdamos el tiempo en estupideces porque el reloj corre. Vas a encontrarte con cosas que tal vez no te vayan a gustar pero es necesario que lo sepas, para encontrarla a ella.

Es lo que dice en la llamada con una voz que parece haber sido bastante manejada para distorsionarla y así no saber quién es.

— Prepárate para lo peor, esto se queda entre tú y yo. — Dice el mensaje que recibo después de la llamada —. No le cuentes nada a nadie, te lo digo en serio.