Lazos Malignos [libro 2] (en Edicion)

28.- Tensión

COLIN.

Me había quedado nervioso, Faith se había ido detrás del super equipo de la chica Steinfield sin decir mucho, y para peor, quiso ir sola.

Mis sentimientos por Faith se habían fortalecido enormemente, solo pensaba en tenerla a mi lado, aunque fuera solo para tomarle la mano, sentir su cálida y suave piel en la mia.

A los pocos minutos mi novia a salió del bosque, tenía escondida una pequeña sonrisa, lo cual llamó mi atención. Cuando llego a mi lado entrelazó sus dedos con los míos y apoyó su cabeza en mi hombro.

–¿Qué paso, pequeña?

–Nada grave, solo tenía que asegurarme de algo– me besó castamente.

–¿Hay algo que debería saber?

–Creo que los descubrirás dentro de poco.

–¿Y bien?, cual esa esa noticia importante que nos tenías que dar, pelirroja– comentó Mayra viéndome.

–Bueno…

Podía sentir los nervios de Faith, pero no entendía mucho el por qué, parecía estar debatiéndose mentalmente si decirles o no, o más bien estaba buscando las palabras correctas para decirlo.

Roger y Lydia Lockwood salieron para ver que hacemos.

–¿están planeando algo, chicos?, están sospechosamente reunidos– expresó la madre de Faith con una sonrisa

–Faith quería decirnos algo pero no sabemos que– soltó Leandra.

–Solo dinos, Fay– me animó Tobi.

Señores de la naturaleza, por favor ayúdenme, la escuché susurrar casi para sí misma. Creo saber lo que quiere decir, pero no sabe cómo o simplemente los nervios le ganan. Mi linda novia quiere decirles a todos que ya estamos juntos.

Aclaré mi garganta y miré a los patriarcas de esta familia. –Señores Lockwood, le he pedido formalmente a Faith que sea mi novia.

Faith me miro entre agradecida y sorprendida por mi arrebato de hablar. Le apreté la mano tiernamente.

Todas las chicas presentes soltaron chillidos de emoción, incluida la señora Lockwood, mientras que Bart y Walter sonreían hacia mí con algo de burla, podría jurar que ambos piensan lo mismo “Hasta que llegó la chica que hizo caer al rompecorazones” . La seriedad en el rostro de Roger y Tobías Lockwood llamó más mi atención, ya sabía que ambos eran sobreprotectores con las chicas Lockwood, pero parte de mi creía que ambos me había aceptado.

Creo que me equivoque.

–No me queda más que felicitarlos– soltó el hombre pelirrojo después de unos segundos –, pero mi amenaza sigue en pie, jovencito, una sola lagrima y estas acabado.

–Si, señor.

–¡Ay nuestra niña ya creció! – exclamó Mayra abrazando a Faith

Jia se limpió una lagrima imaginaria. –Nuestra niña tiene su primera relación.

Durante el abrazo de ambas chicas, Faith no había soltado mi mano, y la verdad me agrado que no lo hiciera. La pelirroja me miró con los ojos brillantes, como me gustaban sus ojos, ese verde claro que mostraba emociones claras y te daban una paz interior impresionante.

La pelinegra se separó de la pelirroja y dirigió su mirada a mí, se paró frente a mí con una pose amenazante y dura.

–Ahora escucha, niño bonito– con su dedo índice pinchó mi pecho como amenaza –, más vale que cuides a Faith como el hermoso tesoro que ella es, ¿de acuerdo?, si no lo haces, yo que tú me voy olvidando de dejar descendencia en esta tierra, ¿quedo claro?

Sin duda Mayra era la ruda del grupo de chicas, la verdad me gustaba como defendía a sus amigas. Se nota que ellas son parte importante de su vida.

–Tienes mi palabra, eso no pasara– miré a Faith, esta lucía un tanto avergonzada –. La única forma de separarme de ella es que Faith asi lo quiera. Si ella no me pide que me aleje, jamás lo hare.

–Bien, pero ya estas advertido– me miró con los ojos entrecerrados –. No me quieres conocer enojada, Colin.

Mayra tiene madera para ser cazadora, por lo menos ya tiene la actitud.

Seguimos hablando hasta que divise que venían saliendo del bosque Kendrick, Rainer, Amelie y el resto de su grupo. Noté que el chico de cabello negro parecía un tanto alterado, algo extraño había en todo esto.

–¿Y quienes son ellos¡ – preguntó Jia apuntando sutilmente a los tres recién llegados.

–Son buenos amigos de los chicos– explicó Faith –, Janett, la druida. Joshua, el vampiro, y Cam, el licántropo.

–Excelente.

–Tienen que decirme donde demonios queda esta escuela de la que hablan, ¡Mierda!, todos están buenísimos– comentó Mayra.

–De la escuela privada Silverstone, en Golden Valley– le respondió Leandra.

–¿Me estas queriendo decir que los Dioses griegos de Amelie y Rainer vivieron todo este tiempo a solo dos horas de aquí?, ¡vaya suerte de mierda que tengo!

–De hecho son de San Gabriel– solté sin más.

Todos me miraron con atención. Faith fue quien se atrevió a preguntar.

–¿Cómo lo sabes?

–Solía ver a Rainer en Graves High, la prestigiosa escuela de deportes cuando tenía practica de futbol.

–¿Los cazadores practican deportes? – preguntó Jia con asombro.

–También somos humanos, linda. Hacemos las mismas cosas que ustedes, solo que no alardeamos de nuestros atributos mejorados– contestó Walter.

–O, al menos algunos de nosotros– Bart me dirigió la mirada.

¿Qué puedo decir?, tengo un buen encanto y soy excelente en diversos deportes, no pienso ocultar algo que es natural en mí.

–Si eres bueno, debes dejar que el mundo lo sepa– contesté con simpleza.

Vi a Faith poner los ojos en blanco, podría jurar que en su mente acaba de llamarme cazador arrogante, pero me habría gustado más oírlo de sus labios.

–En fin, estas buenísimos sus nuevos amigos– Mayra volvió la vista hacia el grupo detrás –Iré a presentarme, ¿vienes Jia?

–Claro.

Ambas chicas caminaron hacia ellos, logré ver como el pelinegro se tensaba mientras Rainer y la chica pelinegra le sostenían disimuladamente las manos. Definitivamente hay algo extraño aquí.



#1151 en Fantasía
#737 en Personajes sobrenaturales
#169 en Magia

En el texto hay: medium, cazadores, hechiceros

Editado: 06.03.2023

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.