Me levanté de suelo de golpe impactada por sus palabras. ¿Qué demonios habían dicho? ¿Cómo rayos planeaban hacerlo sin que nos castigara a todos? Caminé nerviosa por toda la habitación haciendo que las suelas de mis botas chocaran por todo el suelo, escuchando el sonido, lo cual me ponía más nerviosa. Me senté en la cama tratando de calmarme pero era completamente inútil. No podía.
— ¿Alguien más escucha el corazón de Ela como si fuese el suyo? — giré sin siquiera pensarlo a la pared que me comunicaba con Piper.
— Ela, cálmate. Recuerda lo que te pasó la última vez — Levi tenía razón. Observé mi muñeca izquierda y pasé la punta de mis dedos por encima de la venda — Ahora, ¿Que vamos a hacer?
— ¿Vamos? — Solté una risa nerviosa — es su idea. Que me quieran meter en ella es otra cosa diferente.
— Es como lo dijo Levi — la voz profunda de Ryder me sacó un susto haciéndome brincar un poco en la cama — Somos todos o ninguno.
— Ya aceptamos hacerlo todos — Continuó Chloe — Solo faltas tú.
¿Escapar? ¿Cuantas posibilidades de que eso salga bien hay? ¿2%? ¿1%? ¿Acaso ellos sabían el riesgo al que nos enfrentaríamos?
— Les dije que no lograríamos convencerla — por alguna extraña razón las palabras de Daren me molestaron — Si lo hacemos nosotros 5 y ella finge no saber nada de nosotros...
— Quiero sus razones por las cuales quieren huir de este sitio — de nuevo, silencio.
El lugar cada vez me tenía más fastidiada pero la idea de huir del lugar nunca se me había metido en la cabeza. Ni siquiera llegué a planteármelo. Pero ellos, parecían estar seguros de que sus razones eran buenas para salir de aquel lugar que nos había dado tantas cosas buenas.
De un segundo a otro las imágenes de los recuerdos de mí en una silla a punto de ser inyectada, el ataque con los poderes, mi camino en la camilla y todo lo que aconteció después llegó a mi como una bofetada. Recordándome que "tal vez" no había sido tan bueno conmigo en ese lugar.
— Ni siquiera te daré razones individuales. Lo haré con cosas que nos hacen a todos — comenzó Ryder — Todos, al menos dos veces en toda nuestra vida hemos estado a punto de morir debilitados por los llamados excesivo.
Cierto
— No nos dan libertad de nada — continuó la morena — ¡no podemos salir de nuestra habitación solos!
— Nos ocultan secretos como si fuésemos estúpidos — Me quité un mechón de cabello de la cara — Sino hubiese sido por esa noche que a todos se nos ocurrió salir...
— No sabríamos la existencia de los demás — seguí las palabras de Levi.
— ¿Qué creen que pase con nosotros cuando ya no les seamos útiles? — Preguntó Chloe — ¿Nos mataran? ¿Dejaran que nos reproduzcamos? Me agobia todo eso desde que los vi.
— ¿Recuerdas el dolor de las inyecciones? — Espetó Daren — ¿Piper?
— Lo más horrible de la vida...
— ¿Ela? — continuó.
— Creí que moriría.
* * *
Byron me miraba enternecido desde la puerta de la habitación. Le alegraba que estuviese viva, podía sentirlo, pero también su enojo con todo lo que le había dicho Nelly sobre lo sucedido en la mañana.
— No te voy a regañar — Se separó de la pared — pero tampoco estoy tan contento. Por lo que me comentó...
— Nelly — interrumpí —te conozco, sé que no estás enojado de ninguna manera. Quieres creerle a Nelly por ser tu compañera; además de una adulta, — Me levanté de la cama haciendo que mis calcetines blancos chocaran en el suelo — pero no puedes evitar pensar que yo soy la que tiene la razón. No escuché absolutamente nada. Y lo sabes.
Byron se acercó a paso lento y quedó a escasos centímetros de mi — Te creo — aceptó — Pero no puedo evitar...
— ¿Querer creerle a Nelly? No te culpo — lo miré fijamente a los ojos — No escuché nada el día de la inyección — alcé mi mano derecha — lo juro. Y si no me crees; — señalé la cámara con el dedo índice — puedes comprobar que no oculto nada.
— Sabes que odio ver las grabaciones. Siento que violo tu privacidad — y por eso mismo había sugerido aquello — Voy a creerte.
Sonreí.
Sabía lo que el odiaba ver las grabaciones y si me veía tan segura de no esconder nada él no las revisaría. Me separé un poco de él y caminé en dirección al baño.
— ¿Ya me vas a decir a que viniste? — Grité desde el baño — no creo que solo hubieses venido para reñirme.
Escuché el rechinido de la cama la cual indico que Byron se había sentado ahí — Tienes llamado.
El cepillo de dientes que había tomado del lavabo de me cayó por sus palabras. Me quedé estática, apenas me había despertado después de estar casi dos días inconscientes ¿y lo primero que hace es hablarme para un llamado? ¿Acaso quieren matarme?
Editado: 28.10.2018