Legado : Trilogía Fuego Blanco( Libro 1)

Capítulo 13


《ALENÍ》


 

Miré a Blaze quién apenas despertaba.

Me quedé callada unos segundos, estaba tan desconcertada, ¿Quién podría haberme pedido ayuda?.


 

Blaze miró la sábana, estaba algo perdido.

Aún mantenía sus ojos entre abiertos, quitó la sábana y me miró.


 

—¿Dormí mucho?—Preguntó mientras se tallaba los ojos.


 

—No, en realidad no fue mucho.


 

—¿Estás bien?—Preguntó de inmediato.


 

—Sí, solo un poco cansada. Creo que el hechizo es bastante agotador.

Él me miró de más.


 

—No te creo.—Respondió.


 

Blaze se puso de pie y llegó a mi.


 

—Conozco a Alení, y sé que esta vez me ocultas algo. Te he podido conocer estos días, y sé que mientes.


 

Me quedé callada, no sabía si decirle.


 

—¿No somos aliados?—Alzó las cejas—Los aliados deben pelear contra los demás juntos.


 

Solté un suspiro y me senté en la cama.


 

—Alguien ha entrado a mi mente, pero ha sido más fuerte. Me pidió ayuda, parecía estar cansado.


 

—¿Y el hechizo no funcionó?.


 

—Sí pero ese poder era muy grande, un poder que te hace sentir pequeña a comparación de mi poder.


 

—¿Qué es lo que harás?


 

Me quedé pensando por unos segundos.


 

—Lo voy a encontrar, dijo que se encontraba en el castillo. A lo mejor está cautivo.


 

—Alení piensa, a lo mejor es una trampa. Será de la misma persona que nos controló. Debes esperar, por favor.


 

—Blaze, es importante que lo haga, de no hacerlo esa persona podría sufrir.


 

—Solo dame tiempo para poder pensar en un plan, después de eso podemos hacerlo juntos, no debemos arriesgarnos.


 

Solo asentí.


 

—Tienes razón, estoy pensando con la cabeza caliente. No sé que sea capaz de hacer esa persona.


 

—Dame hasta la noche, pensaré en algo.—Dijo finalmente Blaze mientras tomaba su celular.


 

Lo guardó en la bolsa trasera de su pantalón.


 

—Te veré en la noche—Respondí mientras el asentía y salía de mi habitación.


 

Me quedé sentada varios minutos, mi mirada estaba fija en el suelo.

Sabía que debía esperar, pero algo en mi me decía que fuera a buscar respuestas.


 

Me puse de pie, solté un suspiro y luego volví a sentarme.

Me sentía desesperada.


 

Miré por la ventana, Blaze había tomado un taxi.

Supongo que regresaría al castillo.

Vi la hora en mi celular, daban las seis de la tarde.


 

Caminé por toda mi habitación, intentando averiguar quién era esa persona.

No podía sentirla, no podía recordar si quiera su voz.


 

Me decidí tomé mi sudadera, mi celular y salí de casa.

 

De inmediato tomé un taxi, le di indicaciones.

Estaba decidida a encontrar respuestas.


 

Al llegar entré de manera sutil, mi padre no había advertido de mí a los guardias.

Me detuve unos segundos a ver la hora; eran ya las seis con cuarenta minutos.


 

—Pronto va anochecer—Solté un suspiro—Debo darme prisa.


 

Al entrar al palacio me di cuenta de que la mayoría de los guardias no estaban.


 

Me introduje a la biblioteca, había algo que me llamaba; como una clase de sentimiento.


 

Vi todos los muebles, hasta que vi uno más pequeño, algo me decía que debía moverlo.


 

Traté de moverlo pero era demasiado pesado. Con todas mi fuerzas logré hacerlo.


 

Había una pequeña puerta, abrí la puerta y entré.


 

Pasé por lo menos un metro gateando, al llegar al final me di cuenta de aquella puerta era un pasadizo secreto.


 

Llegué a una clase de túnel, este conducía a más túneles y puertas, pasé por lo menos unas tres puertas, hasta que llegué a lo que parecía una pared.


 

No había nada, solo una pared.

Golpeé fuerte.

Pero no había otra salida, sentía aquella emoción que me atrajo hasta aquí.

Era una profunda tristeza, intentaba buscar algo, algo que me ayudara a derribar la pared.


 

—Creo que no puedo confiar en ti—Aquella voz la reconocía perfectamente —Parece que esperarme jamás fue una opción.


 

—Blaze...—Me di la vuelta—Debes entenderme, necesito hacer esto.


 

—Cuando salí de tu casa algo me dijo que debía volver, vi que tomaste el taxi y te seguí hasta aquí. Lo impulsiva que eres hará que un día te lastimen. Deberíamos volver. Déjame planear algo.


 

—No, tengo que hacer esto, incluso si intentas detenerme, aún así lo voy a hacer.


 

Tocaba la pared intentado encontrar algo.


 

—No te entiendo—Habló Blaze dejando aquel silencio atrás.


 

—Es una conexión, una conexión que jamás antes había sentido. Él está en problemas puedo sentirlo.


 

Vi a Blaze cubrirse la cara con ambas manos.


 

—Espero no arrepentirme de esto—Él comenzó a buscar.


 

—Gracias—Es lo único que pude decir.


 

Blaze asintió.


 

—Llevamos más de cinco minutos haciendo lo mismo, no hay nada aquí.


 

—Estoy segura de que hay algo detrás de esto. Pero no puedo usar mi magia, me descubrirían.


 

—Magia, claro—lo miré sin entender.


 

—¿De qué hablas?—Pregunté de inmediato.


 

—Esto debe de tener alguna clase de magia, oculta algo. Todo lo habríamos hecho por la fuerza. Pero, la magia suele no siempre tiene que ser complicada.


 

—Veo que has estado leyendo.


 

—Necesito estar informado. Intenta entrar pero sin estar alterada.




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