5.

Pocos amores al final de tu vida se vuelven invencibles, muchos

pierden en el camino largo que se vuelve la vida, muchos te

dejan aprendizajes y otros te fuerzan a tener que reconstruirte, pero

mas sirve vivir un amor que te destruye que vivir con el temor de enamorarte

y que al final del camino no tengas ni cicatrices que terminen por enseñarte.

Anthony.

Ella se apresuraba a caminar por el hospital como si lo conociera de memoria, caminaba tan deprisa que se distanciaba de mi, pero tampoco le importaba importarle.

Tenía la duda de si acaso su padre trabajaba aquí, hasta que la vi entrar a una habitación, yo aguardé en la puerta.

Un hombre se encontraba durmiendo con su cabeza apoyada sobre la cama, con un aspecto muy cansado.

La chica se acerca a ellos.

—¿Padre? Buenos días. —lo saluda con una gran sonrisa.

El hombre le sonríe a su hija y luego dirige su mirada hacia mí.

—Buen día. —me saluda.

—Buen día señor.

Mira a su hija en busca de respuestas y ella me mira a mi antes de animarse a hablar.

—Quería presentarte a mi novio y futuro prometido. —habla con una simpleza que hasta a mí se me hace extraño. —Te presento a Anthony Williams.

—¿Tu novio y futuro prometido? —notoriamente sorprendido. —¿Cómo es esto posible? No entiendo cómo es que me estás presentando a una persona que llamas futuro prometido y yo no tenía idea de esto.

—En realidad es bastante más simple a lo que imaginas, nos conocimos hace un tiempo ya, y nos enamoramos y recientemente hemos decidido casarnos, porque el tiempo al final de cuentas es algo demasiado pasajero como para desperdiciarlo, mira por ejemplo el lugar donde estamos, tantas personas postergan cosas pensando que tienen mucho tiempo y luego algo sucede, terminan aquí y para muchos significa que su tiempo se agotó, y nosotros no queremos que el tiempo se nos vaya como agua entre los dedos, de nada nos sirve tener un noviazgo largo para irnos conociendo perfectamente en este, si luego puede venir algo y acabarnos todo este tiempo de la noche a la mañana, mejor comenzamos a construir nuestra vida juntos desde ya, para que el día de mañana cuando la incertidumbre nos alcance, nos encuentre juntos.

Él señor la miró extrañado, como si no le creyera lo que acababa de decir, pero para mi sorpresa terminó por asentir y sonreírle a su hija.

Es cuando me fijo en la señora de la cama, es muy parecida a ella, se ve muy tranquila en la cama descansando como si simplemente estuviera durmiendo.

—¿Me recuerda su apellido? —Está vez el señor se dirige a mi.

—Williams, Anthony.

—¿Dónde se han conocido? —Leigh se intenta adelantar a contestar, pero el hombre me mira directamente a mi esperando mi respuesta.

—Aquí en el hospital, vine a visitar a mi abuelo y nos encontramos en el ascensor y una cosa llevó a la otra, y el desarrollo de la historia nos lleva a estar aquí, presentándome ante usted y por supuesto pidiéndole la mano de su hija.

—No les creo absolutamente nada, pero ustedes sabrán, no voy a intentar arreglarles la vida, son lo suficientemente mayores para tomar sus propias decisiones, aunque si me duele que tú me estés mintiendo de esta manera hija, yo conozco cómo es que las personas se ven enamoradas, y ustedes en sus ojos veo mas otra cosa que amor, solo espero estarme equivocando o que lo que sea que se traigan entre manos les sirva para algo, porque realmente no hay mejor cosa que sentirse amado y si ustedes no lo entienden, ese matrimonio que planean no les servirá de nada.

—No es que no estemos enamorados padre, simplemente estamos con algunas preocupaciones que nos tienen de malhumor, y siento decirte que está vez te equivocas, de igual esta noche necesito que me acompañes a la pedida de mano.

—Sabes que no puedo negarme porque eres mi hija y no pienso dejarte sola, pero no les creo nada, pero está bien, haré lo que gustes porque confío en tus decisiones, pero a ti te digo que no confiaré en ti hasta que vea que realmente quieres a mi hija. —esto último claramente dirigiéndose a mí.

—No tengo problema con eso. —digo antes de despedirme. —Tengo que ir a resolver unos asuntos, pero vengo más tarde a buscarte Leigh.

Salgo de esa habitación directo a mi casa.

Esa chica es muy extraña, entiendo que todo esto para ella tiene un trasfondo muy diferente al mío y el que esa señora se encuentre en el hospital de mi abuelo.

Al llegar a mi casa veo que están casi todos los de la familia allí por los vehículos así que dejo mi auto afuera y voy a la entrada trasera de la casa directo al despacho de mi abuelo para buscar algo sobre la chica misteriosa con la que me están obligando a casarme.

Siento que me estoy por casar con una completa extraña que no esta preparada para lo que sea que tenga que enfrentar, aún cuando lo que se viene venir no es tan positivo porque ambos estamos en pie de guerra, hasta que uno pierda y se retire de esta guerra.