CAPITULO 4

Una suave brisa procedente de algún lugar cercano despeinó el cabello de Leon, dejando sus ojos claros y suaves cuando se encontraron con los míos.

· MC- Estoy sorprendido, sabes.

· LEON- ¿Hmm? ¿Sobre qué?

· MC- Pensé que te estabas divirtiendo bebiendo con esos hombres, y eso es todo.

· LEON- Me estaba divirtiendo bebiendo con ellos.

· MC- ¿Lo estabas? Pero entonces...

· LEON- Quería beber con ellos, así que lo hice. Mientras bebíamos, me contaron su problema. Así que lo solucioné. Eso es todo.

Lo hizo sonar tan simple, y cuando me encontré con su mirada, recordé lo genuinamente feliz que se había visto en el festival.

(Espera, creo que lo entiendo ahora)

Había tenido esta molesta sensación de que algo se sentía un poco fuera de lugar toda la noche, y finalmente supe qué era.

· MC- Hablas con la gente del pueblo al mismo nivel, ¿no? Como si fueras uno de ellos. Aunque está claro que no lo eres.

· LEON- Mira, creo que nuestra posición aquí es importante... estamos aquí para proteger el reino y guiarlo en la dirección correcta. Pero ya sea que seamos de sangre real o común, todos somos humanos. No hay nada que nos haga diferentes aparte de la suerte.

Su voz profunda era tan clara y segura como su mirada, y mi corazón palpitó en respuesta.

· LEON- Además, son las personas las que hacen de este reino lo que es. Sé que parece obvio, pero Rhodolite existe gracias a la gente. Y por eso me preocupo por cada uno de los Rhodolitianos. Quiero escuchar lo que todos tienen que decir. Bueno, tantos como sea posible.

Pero la convicción en su voz y su mirada nunca vaciló, y lo miré, cautivado por lo majestuoso que se veía...

(Sin embargo, hablaría con todos ellos si pudiera. Y puedo ver lo decidido que está a hacer lo correcto con ellos, como sea que pueda)

Su determinación e idealismo estaban impregnadas de realismo, y en ese momento, fueron hermosos para mí.

(Esto es lo que te define como el cuarto príncipe de Rhodolite. Este es el núcleo de quién eres, ¿no es así?)

Había una solemne seriedad en él que me recordó de nuevo al rey de las bestias... y luego su expresión se suavizó.

· LEON- Pero si quiero saber lo que la gente realmente piensa, no puedo quedarme encerrado en el palacio todo el tiempo, ¿verdad? Así que supongo que lo que estoy diciendo es... te escabullirás del palacio conmigo alguna otra vez, ¿no?

· MC- ¡Por supuesto! ¡Me encantaría volver a la ciudad contigo!

· LEON- Entonces te llevaré cuando quieras. Ahora, ¿por qué no regresamos y nos unimos a los demás? Espero que todavía quede algo de la tarta de manzana de Yves.

· MC- ¡Oh, no, eso me recuerda, no pude terminar mi pieza! ¡Espero que Jin no se la comiera mientras no estaba!

· LEON- ¡Jajajaja! Tienes un gusto dulce, ¿no?

· MC- Oye, ¿puedes culparme? ¡La tarta de manzana de Yves estuvo REALMENTE buena!

· LEON- No te preocupes, estoy de acuerdo. Además, no hay nada de qué avergonzarse. Me gusta la gente que aprecia la buena comida

Leon sonrió, su expresión era cálida, y luego me hizo una seña, y caminé a su lado mientras regresábamos.

(Sabes, al principio me preguntaba cómo el cuarto príncipe terminó siendo el líder de la facción. Pero ni siquiera he tenido un día de descanso, y ya sé la respuesta a eso)

Era el hombre más carismático que había conocido, capaz de encantar a cualquiera, y era fácil ver por qué la gente quería seguir su ejemplo. Se veía aún más guapo y regio bajo el suave resplandor de la luz de la luna, y de repente me di cuenta a quien me recordaba.

(Eres como un héroe de un libro de cuentos)

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Cada libro que había leído tenía un héroe, o una heroína... alguien que luchó contra todas las adversidades que enfrentaron y tomó el destino en sus propias manos. Y había pasado toda mi vida anhelando ser esa persona.

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Esa noche me fui a la cama todavía soñando con héroes y cuentos de hadas, y a pesar de toda la extrañeza, dormí muy bien. Fue una buena cosa haberlo hecho, porque a la mañana siguiente tuve mi primer vistazo de lo que realmente sería mi trabajo como Belle.

· SERIEL- A partir de hoy aprenderás los conocimientos mínimos necesarios para cumplir tu función, naturalmente, tu maestro sere... yo.

Tan pronto como llegué a la oficina, me llevaron a una sala de estudio, donde un diablo sonriente me esperaba entre montañas de libros.

(Puedo decir que esto va a ser difícil, pero solo tengo que apretar los dientes y superarlo. ¡Y realmente necesito saber estas cosas!)

· MC- Gracias Sariel, sé que debes estar muy ocupado, por eso te agradezco que te tomes el tiempo para hacer esto.

· SARIEL- Por favor, no dejes que te preocupe, este es solo uno de mis deberes como regente del rey.

(¡Espera, espera...!)

· MC- Sariel... ¿eres el regente del rey?

· SARIEL- En otras palabras, hasta que elijas al próximo rey, ejerzo todo el poder en el palacio, aunque sea desde las sombras...

(Eso es asombroso y aterrador a la vez. Será mejor que tenga en cuenta que eres el único hombre con el que nunca, jamás, me quiero cruzar)

· SARIEL- Ahora, comencemos la lección de hoy repasando el estado actual de las cosas en Rhodolite. MC, por favor, resuma la situación actual de Rhodolite como se la describí ayer en la sala de la mesa redonda.