CAPITULO 13

Julius nos había traicionado a todos y nos había llevado a una trampa, donde los ex-esclavos contratados por Obsidian estaban esperando para matarnos a todos. Pero León ya sabía que Julius era un traidor, y había arreglado en secreto que los otros príncipes de su facción vinieran en nuestra ayuda. En unos momentos, la marea de la batalla cambió por completo.

· LEON- ¡Escuchen todos! Les digo de nuevo... ¡no maten si no tienen que hacerlo! ¡Estos tipos fueron contratados por Obsidian! ¡No están luchando por el honor o la patria! ¡¡Sus espadas fueron hechas para algo mejor que eso!!

León levantó su espada por encima de su cabeza y captó la luz del sol, con un brillo dorado.

· LEON- La matanza sin sentido solo trae odio, y ya hay demasiado de eso en el mundo. Pero aun así, ¡no te detengas! ¡Muéstrales de qué estás hecho!

· SOLDADOS- ¡Sí, señor!

· JIN- ¡Jaja! ¡Confía en nuestro jefe para que todos estén listos para ir!

Ni siquiera era un soldado, pero mi corazón latía con fuerza solo por sus palabras, y podía sentir esa fuerza fluyendo hacia todos los que me rodeaban. Las espadas chocaban por todos lados, de alguna manera incluso más feroces que antes, pero el ruido era casi musical ahora...

· YVES- ¡Leon! Me llevaré a MC, y entonces eres libre de hacer lo que quieras.

· LEON- Yves...

· YVES- Mira, no me gusta admitirlo, pero eres un luchador mucho mejor, y deberías estar al frente de las tropas. Ahora, ¡apúrate!

Me volví rápidamente para mirar a Leon y encontré sus ojos ambarinos fijos en mí, vacilantes de ingenio con incertidumbre.

(Leon... sé lo que nos prometimos, pero... ¡no quiero que te detengas, especialmente ahora! ¡Tienes que estar con tus tropas!)

· MC- Leon, estaré bien con Yves, ¡lo prometo!

· LEON- ...Está bien, pero quédate con él como si fuera pegamento. Y si algo te pasa, vendré corriendo.

Yves me alcanzó, levantándome hacia él, y yo lo agarré con fuerza mientras él me acomodaba en su caballo. Sentí la mano del brazo de Leon en mi cabello, revolviéndolo suavemente, y volví la cabeza con lo que espero que sea un tranquilizador. sonrisa.

· YVES- ¡Leon, detrás de ti!

Pero la espada de Leon se movía antes de que las palabras salieran de la boca de Yves, derribando a su oponente al suelo sin siquiera volverse para mirar.

· LEON- Vaya, un ataque sorpresa y tú sigues siendo el que salió volando. Eso es un poco patético. Bien, entonces... ¿quién sigue?

Los ojos ambarinos de Leon ardían con ferocidad, y su voz era el gruñido bajo de una bestia advirtiendo a su presa. Su sonrisa confiada parecía menos una sonrisa y más como una demostración de sus colmillos, y no me sorprendió ver a nuestros los atacantes dudan.

· LEON- Viniste aquí para matarnos, ¿no? ¡Entonces blandir esas espadas, o esto no terminará nunca!

Estaba envuelto en un aura que parecía crujir y deformar el aire a su alrededor, deteniendo a sus oponentes en seco. Dominaba el campo de batalla y no podía apartar los ojos de él, pero mis brazos estaban cubiertos de piel de gallina...

(Tampoco es como si no te hubiera visto pelear antes, pero...)

Estuve a su lado cuando luchó contra nuestros atacantes en el festival y lo vi entrenar con sus soldados innumerables veces.

(Pero eso fue diferente. Nunca fuiste así. Y... ahora sé la verdad. Todo este tiempo, solo he visto un lado de ti)

Sabía que el León peleando justo ante mis ojos era el mismo León que siempre había estado ahí para mí, riendo, sonriendo y burlándose suavemente de mí. Sabía que era el mismo León que acababa de despeinarme el pelo con un toque cálido y suave. Pero parecía un extraño. Era como el León que conocía estaba en algún lugar muy, muy lejos, en algún lugar fuera de mi alcance. Sabía que había una batalla a mi alrededor, pero los latidos de mi corazón rugían en mis oídos, y apenas oí el sonido de las espadas nunca más.

· YVES- ¡MC, si no te agarras fuerte, te vas a caer!

La voz aguda de Yves cortó mis pensamientos, y me sobresalté cuando su brazo se apretó alrededor de mi cintura.

· YVES- Escucha, comparado con los demás, soy... bueno, soy débil. ¡Se necesita todo el coraje que tengo para estar aquí!

(Yves... nunca lo hubiera pensado...)

· YVES- Pero ahora estás conmigo, y eres Belle, y Leon te confió a mí, y... pase lo que pase, ¡te juro que te protegeré!

Yves sonaba casi enfadado, pero podía sentir la forma en que su brazo temblaba a mi alrededor, miré hacia su mirada azul profundo y fue en ese momento que escuché una risa seca y burlona junto a mí.

(¿Julius...?!)

· JULIUS- ¡Jajaja, mira lo completamente que le dio la vuelta! Y con la forma en que espoleó a sus tropas, no tenemos ninguna posibilidad de ganar ahora. Pero ese es el Príncipe León que siempre he sabido nuevo...

La mirada de Julius parecía vacía mientras miraba a Leon a través del campo de batalla, pero su risa envió un escalofrío por mi columna vertebral. El Julius que pensé que había conocido ya no se veía por ningún lado, y me pregunté si alguna vez realmente existió. .

· JULIUS- Este es el final para mí. Pero antes de morir, hay una última cosa que tengo que hacer...

Esa mirada fría y plana se volvió de repente para encontrarse con la mía, y fue solo entonces que me di cuenta de lo cerca que estaba. Fue solo entonces que me di cuenta de que su espada ya estaba levantada y cortando hacia mí.

· JULIUS- Por favor, muere por mí, Belle.