El brazo de Ligthcat

¿habrá alguna historia que valga la pena contar?

Cómo suele ser el caso para la mayoría, mi pasado también tiene algo que decir.

Más sin embargo, ¿quién me escucharía si mis cicatrices perdieron credibilidad?

Y lo intenté, créeme que lo intenté... Sin saber que perderse también forma parte del camino.

No voy a hablarles sobre la droga que nunca vendí o que nunca fumé y de las apuestas que nunca gané.

Solo por una vez desearía no querer cambiar mi vida por la de cualquiera.

¿Y mientras tanto, la mía, mi querida vida? Espero y me perdone por las veces que no la viví
¿Me haría daño si comienzo ahora?

Jampden Park... Escocia...

Viernes 7 de Noviembre del 2019

Quedaban dos minutos con nueve segundos en el marcador.

Un público eufórico.

Cuatro participantes en la arena pero ninguno tan audaz como yo.

Letalshot, consiste en una batalla campal, dónde los mejores jugadores del mundo se han reunido los últimos cuatro años consecutivos en un torneo al nivel mundial; Desplegando a sus Droits con habilidades únicas.

Este año la tradición se tornó en un evento inusual.

El premio al ganador era por lo que miles de jugadores participarán este año y nada más ni menos que el brazo de LightCat, un arma avanzada, hecha de Kronita, una aleación de Kronum y grafeno templado.
Sin mencionar el millón y medio de dólares.

Este invaluable trofeo pertenecia al Droit de Jessica Suárez, la primer campeona de Letalshot. Pese a no tiene mucho que ella había anunciado su retiro tras mantenerse invicta durante un largo tiempo.

Ahora el brazo le pertenece al mundo y obtenerlo me aseguraba una completa inmersión en la fama y la gloria.

— 56 segundos en el marcador y contando...— A partir de ahora, cada bala cuenta.

Lo que debió ser el último minuto se convirtió en una enorme y duradera tensión de mis dedos sobre las teclas, una respiración agitada y una enorme desesperación en mi corazón.

En un continuo recargo en el respaldo, un repentino acercamiento a la interfaz de la pantalla y sobre todo un vistazo de reojo a los comentarios de mi transmisión y siempre atento la tensión de los apostadores tras los monitores.

Cuando una explosión al otro lado de la arena me hizo reaccionar.
Apenas pude ver la enorme nube de humo en las pantallas.

No me quedó claro lo que había pasado hasta escuchar el reporte de los comentaristas.

—¡Increíble! Parece que España e Italia acaban de eliminarse mutuamente. Vamos a verlo de nuevo en la repetición. Uno de los comentaristas, eufórico, continuó mientras hablaba con su compañero.

—Hunter, coloca la transmisión en mi pantalla.— Le di la orden sin despegar las manos del teclado. Tenía que estar al tanto de que había ocurrido con ambos Droits.

—Así es mi querido Marcos. Italia se queda nuevamente a cuartos de final. Su droide, Slick, derrotó al Carnero, ¡pero qué lástima por Pablo Ramiro Ibáñez de España, que sufrió una pérdida total!—

Las cámaras del estadio mostraron en las pantallas lo molesto que estaba Pablo, con un evidente gesto de frustración.

La pelea estaba llegando a su fin, las aclamaciones no se detuvieron. El aire estaba saturado con el zumbido de drones publicitarios y el resplandor de hologramas brillantes que anunciaban la final de Letal-shot.

Con la multitud rugiendo en anticipación, Hunter y Blaxray se lanzaron uno contra el otro en un frenesí de acción y estrategia. Cada movimiento era calculado, cada golpe era preciso, mientras luchaban por la gloria dentro de la arena.

Justo igual que el año pasado en Las Vegas, James me tenía acorralado... Temo que tal vez él ganará este año, y el respaldo en todas sus piezas por SynTek Global, le dan una clara ventaja.

El público y los comentaristas están a favor de James, puedo escuchar su nombre por todo el estadio; siendo que a los ojos del mundo se convirtió en el nuevo prodigio de Letal-shot y hasta donde sé, mi mejor amigo se volvió en el único rival que ha podido pisarme los talones.

—Hunter, no te contengas, en este ataque tienes que ganar.— La única idea ingeniosa más cerca que tenía era una motocicleta a veinte metros de Hunter, ya que la tormenta de espinas no tenía el mismo efecto en Blaxray.

Los últimos 18 segundos fueron lo último que recuerdo del marcador y todo se desvaneció en un destello de luz blanca; Para cuando volví en sí, ya había terminando el directo... De hecho me encontraba hablando con personal del staff.

—Sí, firma aquí... Yetzel, igual que el año pasado, la compañía se encargará de transportar a tu Droit y los que hayan quedado a la ceremonia de clausura. En la puerta 31 tu transporte te está esperando. Felicidades —

—La fiesta después del torneo...— Primero debo llevar todo mi equipo al automóvil.

Al salir del estadio, el flash de la prensa me siguió hasta el auto y mi celular no dejaba de sonar. Con todo eso encima, nada me quitaba el zumbido de los oídos; mismo que me acompañó hasta las puertas del Holyrood.

Antes de llegar a la fiesta la multitud y la prensa bloqueaban la entrada. Claro que cuando llegué acapare la mitad de la multitud, ahora me bloqueaba el paso al Holyrood.

—Yetzel, ¿algún comentario de su pelea contra James?, ¿Yetzel volverá a firmar con Samsung el próximo año?— No había respondido una sóla pregunta cuando tenía otra encima.

Definitivamente el mundo del espectáculo no es lo mío.

Al menos al llegar a la puerta, los cadeneros detuvieron a toda la bulla, aún así las preguntas no se detenían. A un costado de la puerta, el líder de DemolitionBoyz y el resto del equipo contestaban preguntas, una tras otra.

— ¿Señorita Harrison, cómo fue que logró entrar a DemolitionBoyz?— La pregunta de la reportera dejó callados a la mayoría de la prensa, incluso a mí, no sabía que tenían una nueva integrante.

— Soy una gran admiradora de Elektra, y mi estilo de pelea es muy parecido al de ella. Eso fue lo que llamó la atención de Gastly en los vídeos que subía de mi Droit.—