Hoy mí memoria regresa para revivirlo todo, los recuerdos como un largo abrazo se extienden.
Soy la misma persona qué escribía cartas de joven
Soy la misma persona soñadora, la que aun cree qué se pueden tocar corazones y acariciar almas con la mirada.
Soy él mismo joven que espera encontrar a la mujer perfecta, siendo todas perfectas.
El amor es maravilloso, único, incomparable, cuando se siente en el alma, tiene luz y magia.
Soy él mismo joven el que sí encuentra un herradura sale en busca del corcel.
Soy la misma persona soñadora, siempre optimista y alegre, la que se complace en dar, sin esperar nada a cambio.
Hoy mí futuro absorbe mí silueta que vaga en busca de un mañana diferente... P.G.G
Editado: 02.03.2022