Lian Johnson. Un Chico Lobo.

2. La Muerte De Mis Padres.

No sé cómo conduje a casa esa noche, confundido, mareado y lo último que recuerdo es que abri la puerta y pasé.

Me dió mucho sueño y me recosté en el mueble blanco de mamá. Tuve pesadillas terribles pero está vez no desperté desesperado, llorando o gritando.

Desperté en el sofá blanco de la sala, en casa donde vivía con mis padres. Sin tener memoria de cómo llegué hasta ahí y sin saber lo que había sucedido.

Desorientado, aterrado, confuso porque hay patrullas en la entrada de mi casa y porque Sofía los acompaña.

¿Que es esto? ¿Que ocurre? Miro mis ropas, mis manos el sofá blanco de la sala ya no era blanco.

Mi ropa estaba desgarrada totalmente mi pantalón de cashmier mi camisera tipo Polo.

Ropa elegante pues se suponía que venía de celelebrar mi aceptación en el equipo olímpico de gimnasia.

Ahora mis ropas hecha tirones y empada de sangre. ¿Que paso??. Yo estaba bañado de sangre mis manos, mi torso, la cara y era sangre fresca aún estaba líquida fluida..

Me levante desorientado, mareado, confuso sin saber donde estaba. No reconocí la sala hasta unos segundos después y recordé a mis padres.

¿Porque no se han levantado? ¿Dónde están? Los empecé a..

En ese momento tratando de buscar a mis padres y buscando respuestas a todo aquello.

Subía las escaleras dando tropezones casi a gatas pues no podía mantenerme de pie, pues todo me daba vueltas y no entendía lo que pasaba.

Gritaba fuerte muy fuerte para no obter respuesta alguna. ¿Pero no la había? ¡Seguia gritando!

¿Mamá? ¿Papá?

Donde están.

¿Mamá? Mamita..

Logro subir las escaleras casi a gatas aún confuso y descontrolado, con el estómago revuelto por el fuerte olor metálico de la sangré.

Cuando al fin logró llegar al cuarto de mis padres. Entro en el y es un desastre de sangre roja, brillante, liquida, fluida y está por todos lados.

Mis padres están muertos como desgarrados no lo puedo creer. Están partidos, descuartizados, lacerados con grandes y profundas heridas.

Mamá está en la cama como dormida viendo al techo como si mirase las estrellas, ella no se defendió y papá, papá estaba junto a la ventana queriendo detener el ataque.

Papá se quiso defender se miraban marcas defencivas en sus brazos y torso, además de su ropa destrozada.

Mamá, mamá no ella solo estaba ahí sin vida, sin movimiento sus ojos abiertos fijos hacia en el techo.

Los cuerpos de mis padres pareciera que los ataco un animal.

Mostraban mordiscos y las heridas eran como uñas rasgando la piel, los tirones de sus ropas destruidas y salpicadas de sangre.

Corro hacia ellos. No... no... ¡mamá! ¡papá!

Trataba de abrazarlos pero sus gargantas, brazos, trozo, piernas desgarradas, descuartizados igual que todo el resto de sus cuerpos.

Como si fueran garras o dientes las causantes de aquel desastre

La cantidad de sangre era impresionante y su olor inconfundible.

Los intestinos habían sido remomivos fuera de sus cuerpos con un corte limpio, uno solo desde el estómago hasta el vientre bajo.

Sus cerebros esparcidos por la habitación. Sacados de su lugar con un golpe seco y regados por doquier.

Su ropa, las sabanas, las almohadas, hasta las cortinas les corria un hilito de la sangre todavía liquida, fluida, rojo intenso escarlata, suave.

Todo lo demás estaba bien y en su lugar. La mesita de noche y su lamparita, el maquillaje de mamá, el libro que papá estaba leyendo todo se mantenía en su lugar hasta las puertas del closet estaban cerradas.

Era un esena bastante imprecionante de ver, no cualquiera tiene estómago para ver aquello.

Menos siendo su único hijo era perturbador, era grotesco, brutal con tal violencia y tan crudo.

Que si no lo ves por ti mismo no lo ibas a creer?

Mientras Liam se aferraba a los cuerpos sin vida de su madre y padre lloraba y gritaba muy fuerte por la perdida de sus progenitores (otra mentira) que de una u otra forma era lo conocido, eran su mundo.

El sonido de las sirenas de las patrullas de policía eran muchas rodearon la casa confundiendome más. Me sacaron de mi ensoñación y me di cuenta de estaban ahí por mí.

De ellas bajaron muchos oficiales de policías con placas y armas y lo ilógico junto a ellos estaba Sofia.

Sofia mi novia. Que pasa porque está ella junto a los policías. Ella miraba hacia la ventana y gitaba y gritaba.

Ahi!! Ahi!! Junto a la ventana. Gritaba a todo pulmón y señalaba el lugar con su dedo.

Ingenuamente yo me asome a la ventana a ver qué sucedía, abri un poquito la cortina pero a contra luz pudieron ver mi cuerpo. Que error!! Todos gritaban.

Hay!!! Hay!!! Oficiales véanlo! ¡Atrapenlo! Sofia no dejaba de gritar.

Liam estaba confundido que hacía su novia con la policía sería por el día de ayer pero si ella fue la empezó todo y luego salió despavorida del lugar llorando y gritando incoherencias (no paso nada)

Esta en la ventana!! Vean, vean es él. Es él!! Es él!! El chico lobo!! El chico lobo!! Gritaban los vecinos que se habían reunido.

¿Acorralenlo? ¿Atrapenlo? ¡Siganlo! Hablaba el jefe por los radios de comunicación.

En medio del susto por escuchar la forma despectiva en que me llamaban y culpaban mis vecinos.

Conocidos de toda mi vida y mi novia mi propia novia. No entendía de que me acusaban?? Pero no me iba a quedar a averiguarlo??

Apenas logre tomar la gabardina de papá cruce el pasillo a mi propia habitación y tome una muda de ropa el celular y la billetera.

La gabardina de papá era larga de piel, suave y tersa, de un cafe oscuro casi rojizo tenía solapas anchas y altas apenas para esconder el rostro y se cruzaba al frente con un cinturón o con botones.

Era una de las pocas cosas que no estaban sucias o manchadas de sangre. Pues gindaban guardada en el closet cerrado.

Me puse la gabardina para ocultar mis ropas sucias y desgarradas el resto lo guarde en mi mochila.




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