9. Mi Mate. Aún sin yo saberlo.

Ese día al levantarme tarde mi castigo solo iniciaba.

Pues Don Juan había ordenado sin baño y sin desayuno. Al empezar el día no lo sentí mucho pero a como iba subiendo el calor del día (que no era mucho) pues me encontraba en Canadá.

El calor y el desociego si aumentaron. Tenía calor, olía mal y moría de hambre.

Detrás de los establos Doña Martha me guardo un trocito de pan y una taza de café.

Pero no digas nada no quiero desacuerdos con el viejo.

-Gracias Doña Martha. Tranquila no diré nada.

Al levantarme tarde ese día Don Juan. Me fue dando pautas y enumerando las tareas. Dónde devía ir a los establos, atender las vacas, las gallinas. A obedecer sin rechistar.

-Liam!! Liam!! Don Juan daba instrucciones de lo que se iba haciendo. Los animales deben comer.

-Si, Señor Juan! Como diga Señor Juan.

Yo corría de un lado a otro tratando de seguirle el ritmo a quel hombre mayor. Quien iba decir que tenía tanta energía.

Primero las gallinas, esparceles concentrado. Luego hay que recoger los huevos. Rápido antes de que terminen de comer sino te picotean los pies.

Segundo las vacas. Hay que ponerles melaza y sal en las conoas. Y ordeñarlas. Además de controlar las citas del veterinario.

Y tercero los cerdos. El desperdicio de ayer se esparce hoy con concentrado en las canoas. Hay que lavar los chiqueros pero antes recoges los excrementos.

Cuarto y último los establos hay que limpiarlos. Recoger la paja sucia y se lleva a hacer abono. Poner paja limpia y cepillar los caballos.

Pues como te levantaste tarde eso ya esta hecho, pero mañana lo haces tu. Esas serán tus tareas fijas de hoy en adelante en una granja hay mucho que hacer.

Si, si, Señor Juan. ¿Yo solo haré todo eso?. Una mirada de Don Juan basto.

-Si si Señor. Mañana me levanto apenas suene el despertador. Fue como una sentencia.

-Más te vale hijo!! O habrán castigos y consecuencias mayores.

Por las tardes Camila visitaba la familia. Diciendo que iba a visitar a Doña Martha. Pero en realidad iba a ver a Liam.

Una tarde Liam invito a Camila a caminar o pasear por la granja!

Camila muy complacida, acepto!!

Ya era costumbre pasear juntos por las tardes en la granja, conociendose, hablando, riendo enamorándose uno del otro. Con sinceridad y verdadero amor.

Una tarde en particular Camila tubo una ocurrencia!! Corramos!! Ven.

-Corramos!! En el trigal! Ven!! Decía Camila emprendiendo la carrera sola.

Mientras Liam se quedaba inquieto. Parado en su lugar. Preguntándose.

-Que donde!! Camila, cómo??

Liam no entendía pues nunca lo había hecho, lo soñaba si. Pero nada más.

Y Camila tomo más velocidad y fuerza. Y corría sorprendentemente rápido.

Por un impulso en un momento era alcanzada por Liam. Quien no creía la velocidad en que corría.

Los chicos se reian y copetian a ver quién iba más rápido. Liam se sorprendida de lo que hacía, de lo que podría llegar a hacer.

Liam alcanzó y atrapó a Camila en sus brazos. Tropezaron y cayeron al suelo del trigal dando varias vueltas.

Entre risas y caricias se abrazaban. Al detenerse Liam reposaba sobre el cuerpo agitado de Camila.

Sin querer detener el impulso, Liam la beso con tantas ganas con pasión con euforia y con excitación. (olvidando su reloj)

Descontrolando su ritmo cardiaco y sus pulsaciones. Sonó la alarma de su relog inteligente.

Liam lo miró y lo detalló por unos instantes. Luego se detuvo totalmente empujando a Camila de forma brusca.

-No, no puedo. Retirandose y apartando a Camila de forma abrupta.

-No puedo Camila, Camila!! Basta!! Aléjate!! Camila Basta ya!!

-Porfavor mi amor tu no lo sabes, Camila no. No yo puedo, no puedo Camila de verdad no puedo.

-Escuchame cariño mi corazón tiene que tener cierto ritmo, cierto límite. Entiende porfavor!!

-Si me excedo, no te gustará!! Cariño. No quiero hacerte daño. Camila. Se disculpaba Liam temeroso a qué se repiera el incidente con Sofía.

Pero Camila insistente decía. Eso lo decido yo!! No lo crees!! No un estúpido reloj!!

-Yo llegó hasta donde quiero llegar. Es mi decisión y quiero y deseo estar contigo.

-Adónde podemos ir más privado! ¡Tu sabes más pivado¡ Preguntaba Camila muy coqueta y exitada.

Arriba de los establos donde se guarda la paja. Es suficientemente privado para ti!!

-Perfecto!! Vamos!! Alcanzame!! Y Camila salio corriendo hacia los establos.

De un brinco sorprendente subió al segundo piso lleno de paja fresca. Al instante Liam la acompañaba.

Dónde Camila se acostaba toda sexi!! En espera de Liam que solo tardo unos segundos.

Se volvían a besar con pasión con euforia mucha locura y gran exitacion. Excitación que Liam nunca antes se permitió sentir.

Camila tocaba el musculosos y atletico chico. Besaba su cuello y lamia los lobulos de sus orejas.

Punto que descontrolaba a Liam y este se avalanzo sodre ella y rasgo su camisa.

Liam chupo y lamio cada curva entre el cuello y los hombros. Lugar donde iría su marca lo hacia con ansias y deseos y locura entre tanta euforia.

Liam cambio sin darse cuenta. Solo media transformación se hacía evidente.

Sus ojos chispeaban en rojo carmesí intenso y sus colmillos brotaron.

Entonces el relog inteligente?? Lo alertaba de alguna anomalia.

Y que llevaba siempre en su mano izquierda se volvió loco. No dejaba de sonar lo que perturbada a Liam.

Liam se detuvo y se aparto. Recordando lo sucedido con Sofía. Y aparto a Camila de él.

Camila muy confusa y desconcertada. Preguntaba que, que paso??

-Liam, tranquilo, sino estas listo esta bien. Esta bien yo te esperare cariño. Aquí estoy para ti amor.

Camila trataba de besarlo de tranquilizarlo de acariciarlo pero nada.

Liam la apartaba. Trataba de acercarse pero Liam la alejada.

La chica medio desnuda frente a él. En un momento entiende lo que sucede y entonces toma el reloj inteligente y se lo arranca de la mano de un tirón y lo arroja lejos.