Al día siguiente temprano tuvo un nuevo mensaje de Jun interrogándola al respecto, si ya le había escrito a Jonh, si al menos había respondido para indicar que había recibido el paquete. Y era cierto, si no fuera por ese hombre, o incluso si no fuera en parte por él mismo aun estaría buscando pistas.
- “También gracias ti”- se atrevió a escribir.
- “no agradezcas y solo ensaya, quiero escuchar avances para cuando nos veamos la próxima semana”
Con una sensación de alegría le envió un último ícono como despedida y puso atención a la profesora que acababa de entrar al salón, aunque de por sí, ya sabía que no podría concentrarse.
Animada fue por su flauta al casillero. El ambiente del salón estaba cálido, aunque esos fueran ya los últimos días de verano, y abrió las cortinas para desde su posición divisar los jardines, podría haber buscado un lugar entre los árboles, pero ahora se sentía más familiarizada con ese lugar incluso aunque ya no pudiera encontrar a Jun.
En completa calma repasó varias veces la melodía que tenía de tarea, gratamente sorprendiéndose que pudiese recordarla casi de memoria y sin errores, de seguro producto de la emoción que seguía embargándola.
Tomó un sorbo de su botella y se sentó frente al atril, sólo hasta ese momento recordando que aun no le devolvía el pañuelo a Jun, si quiera se había dado el tiempo de lavarlo, al menos tenía así más excusas para hablarle o poder actuar de forma cercana. Volvió a guardarlo en uno de los bolsillos de su mochila y divisó las recientes revistas que había recibido de Kenji. Ahora con la seguridad de no ser descubierta por Anne cogió la que anunciaba en su portada un especial de The Beatles, era del año mil novecientos noventa, las páginas de papel cuché, aun oliendo a viejo, seguían en perfecto estado, y aunque estaba en inglés pudo pasar la vista por las fotografías, las letras de las canciones e incluso ver que al final habían impreso algunos acordes para guitarra. Tras unos cuantos suspiros fantaseando con la imagen de su padre, se incorporó para limpiar y guardar su flauta, estaba decidida a que desde ahora, aun sin tener la ayuda de Jun, se esforzaría más para que Kenji no se desilusionara al verla tocar, estudiaría también más sobre el jazz para sorprenderlo.
Su ilusión desapareció cuando vio abrirse la puerta y entrar a Naoki, como siempre, sorprendiéndola.
- ¿Estabas ensayando?- se acercó con actitud amistosa, pero recordando el último encuentro ella no pudo evitar avergonzarse.
- sí…pero ya me iba.
- y yo que quería verte tocar, ya sabes- le guiñó un ojo.
Pero esta vez, sin dejarse intimidar, respiró profundo y respondió.
- Estaré en la presentación que se hará en otoño…si quieres venir.
Naoki entornó los ojos con una sonrisa complaciente.
- claro, iré a exclusivamente a verte Hotaru.
Lo vio sacar su bajo, ella se dispuso a tomar el escuche de su flauta cuando Hero entró y la saludó, llevando inmediato su atención a la revista que aun descansaba sobre su atril.
- ¿Es tuya?
Asintió acercándosela. Igual como si se tratara de un viejo tesoro Hero recorrió las páginas con cuidado y sonriendo dejó su atención sobre uno de los artículos.
- Es parte de una colección muy antigua- agregó con cierta emoción.
Sin estar segura de ello asintió.
-…puedes leerla si quieres.
-…No...- pareció complacido- cuídala bien, no es algo que puedas encontrar en internet, y si quieres conocer algo de The Beatles puedo recomendarte algunas canciones.
Ahora la complacida fue ella, y aunque justo en ese momento entró Ryo, en el cuál ahora mantuvo su atención.
- esta banda fue una de las precursoras del rock.
-…gracias a la influencia de mi padre he escuchado algunas de sus canciones – asintió.
- si quieres algo más de rock puedes escuchar Get back y Help!, en esas predomina la guitarra, de hecho, George es uno de mis guitarristas favoritos.
Ahora asintió con admiración, contagiada de su misma emoción.
- y si te gusta Let it be, en la revista está la historia de cómo Paul se inspiró para inscribirla.
- claro, gracias- asintió cogiendo al fin sus cosas, y sonrió saliendo sin percatarse que tenía sobre ella la atención de todos.
- Ambos muestran la misma pasión cuando hablan de música- rio Naoki – es como si tú dejaras de actuar como un tipo serio y Hotaru dejara de ser una chica tímida.
Ryo, que parecía pensativo, ahora miró de reojos a Naoki, sorprendiéndose que como en pocas ocasiones no se equivocara al decir su nombre.
La música de The Beatles se repitió ahora en su cabeza durante algunos días, y como se lo aconsejó Hero, agregó las nuevas canciones a esa lista de reproducción que secretamente llamaba “Kenji”. Le hubiese gustado visitar una vez más el Blue Notes, tal vez si algún día su padre venía a Tokio podrían hacerlo juntos.
Esa tarde bajó rápido del metro para evitar ser arrastrada por la ola de gente que venía en sentido contrario. Una ambulancia pasó a toda velocidad en dirección al hospital inundando la calle y su cabeza con su agudo sonido, llevándose lejos sus demás pensamientos.
- Al parecer hubo un accidente cerca- murmuró la Sra. Yamazaki tras saludarla. La vio cerrar la caja y guardar las llaves en el bolsillo- Mi esposo y yo iremos a una reunión para buscar nuevos proveedores, Mizuki y Kouichi quedarán a cargo a penas regrese de sus entregas ¿entendido?
Asintió y tras cambiarse se dirigió a la cocina. Mizuki tenía en marcha una de las mezcladoras y ya un par de bandejas de galletas se enfriaba esperando ser decoradas, así que se apresuró en teñir la base de glaseado que ya estaba preparada.
- la Sra. Yamazaki traerá nuevas ideas para las galletas después de su reunión.
- tal vez debería ser algo con temática otoñal.
- El año pasado, durante un par de semanas hicimos pasteles y galletas por Halloween, también adornamos el local, fue divertido, ¡y qué te digo de trabajar en esa noche!- exclamó ahora con entusiasmo.
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Editado: 05.05.2025