Luna
"En pleitos de hermanos, no metas las manos"
-Refrán popular
«No le pasa que, cuando tiene una hermana mayor o menor, y se pone intensos, le dan ganas de abandonarlos en un desierto sin pasaje de vuelta.»
Bueno, así estaba yo en este momento deseando mandar a mi hermana al desierto, porque en China sería muy fácil volver a venir.
—No, no, no, tú no vas con nosotras. — le digo acercándome a ella un poco molesta.
— ¿Por qué no puedo ir con usted? Solo dame una razón para quedarme aquí sola y aburrida en la casa — me desafía sin quitarme la mirada de encima. Y camina hasta dónde está mi cuarto parado, agarrando su mano, pero él la quita de impulso. —Bueno, además, el guapetón de Hero va a ir con usted.
— ¡Hey! flaquita de porcelana quita tus manos de mi hermano y además nadie te invitó. —le contesta Rous jalándola de un brazo.
—Mira Lara, allá atrás en el patio hay una piscinada y no va a estar sola y aburrida porque está Carly con John, sí. — le digo jalándola de un brazo y llevándola a la cocina, pero ella se aparta de mí de un jalón y vuelve a entrar a la sala gritando.
— ¡Pues no, no quiero estar con ellos y sus amigos falsos! quiero ir con ustedes — lo dice muy dispuesta a ir con nosotros.
Estaba a punto de responderle cuando de repente entraron por la puerta mis padres muertos de risa.
Ya valí, madre.
— ¡Hola, mami, papi! —dice Lara abrazándolos a los dos al mismo tiempo. — ¿Sabe? Mamá, Luna va a salir con sus amigas y Hero y no me quieren llevar. —le cuenta con una sonrisita mirándome a los ojos.
Quiero darle un solo jalón de pelo pero no puedo porque soy la menor y tengo que respetarla.
«Pero es que es muy metida y se lo merece».
Pude ver que mis padres me miraban con una cara de: por favor, llévatela, no la soportamos. No quise mirar a las chicas porque ya sabía su respuesta: un ¡no! Muy grande me gritaban con la mirada.
Cuando creí que nada más malo me podía salir hoy, suena una corneta de un carro a fuera de mi casa. Rous salta de alegría y no sé por qué, ni siquiera lo disimula. Todos voltearon a verla, y mi mamá enarcó una ceja de confusión al igual que mi papá.
— ¿Qué bicho te picó?—interroga Hero intentando averiguar su felicidad.
Ella ignora sus palabras, y se asoma por la ventana, voltea su cara para verme con una grande sonrisa en su rostro.
— ¡Ya, Cole llegó! Nos está esperando. ¿Vamos sí o no?—dice Rous pasando por el frente de mis padres, se despidió con solo la mirada, más atrás sale Star y Hero.
<<Claro, yo resuelvo esto sola, solita. >>
Conciencia. puedes estar callada un segundo, te he estado ignorando todo este tiempo. Pero veo que no paras de hablar y ya me tienes harta.
«Soy tu guía, es obvio que te tengo que dar consejo... Así como esto y responde antes de que te vuelvas a perder el hilo de la conversación.
—Ya voy, solo déjeme resolver esto, espéreme en la camioneta — le dije a Rous.
Después de que las chicas y Hero entraban en la camioneta, claro que después de tranquilizar mis ganas por matar a Rous y a Lara, tuve que buscar a mi mamá en la cocina. Estaba guardando unas cosas en los cajones, me daba la espalda. Caminé despacio para darle un cálido abrazo.
Ya habían pasado cinco minutos rogándole a mi mamá que Lara no puede ir con nosotras. Pero nada la convencía.
— ¿Por qué no, Lu, solo dime por qué Lara no puede ir con ustedes?— demanda mi mamá.
Suficiente tengo con Cole y Hero que se invitaron solos. Más Hero que Cole y de paso también me tengo que llevar a Lara, que es más chismosa y entrometida.
—Mamá, tú sabes que Lara es alborotada y de paso nunca se comporta bien, siempre anda dejando a uno en ridículo. — No suelo hacer puchero, porque eso son de niños.
Pero es que mi mamá no colabora.
—Lu, tú sabes que te quiero mucho. —coloca su mano en mis mejillas y comienza acariciarlo. —Pero es que Lara es muy chillona y a veces me saca de mis casillas. ¡Dios sabe que la quiero! pero por favor, llévatela. — ¿Me está rogando? No creo que ella nunca me estaría rogando. Estaba a punto de responderle, pero ella se me adelanta. — Y a lo que haga un berrinche o te deje en ridículo la mandas a la casa con uno de los muchachos. — la chillona de mi hermana ganó esta partida solo por esta vez.
«Solo por esta vez.»
Tuve que aceptar su oferta porque es mi madre. Me despedí con un beso y un abrazo.
Cuando llego a la camioneta, vi que Rous estaba molesta por haberme traído a Lara. Estábamos a manos, ella trajo dos y yo uno. Y eso no se vale, yo ni sabía que ellos también irían.
Hero ya me estaba esperando. Estaba recostado de la camioneta con la puerta abierta, así que fui muy delicada a la hora de empujar a Lara para que entrara primero al vehículo, haciendo que estallara la cara contra el asiento.