Δηλητήριο

DILITIRIO

(veneno)

El renacer había dejado huellas claras.

Volvió con motivación.

Con ambición.

Con una valoración personal que antes no tenía.

Se sentía fortalecido.

Seguro.

Convencido de que había recuperado el control de su vida.

Brasil había sido un punto de inflexión.

Un antes y un después.

Tenía amigos.

Tenía proyectos.

Y tenía a Jimena una compañera: una mujer que lo alentaba, que lo impulsaba a ir por más, que creía en él inclusocuando él dudaba.

Todo parecía encaminarse.

Pero la confianza, cuando no se vigila, empieza a volverse exceso.

El éxito parcial, los pequeños logros, la sensación de estabilidad…

todo eso fue relajando la guardia.

No por debilidad, sino por tranquilidad.

Y fue en ese contexto —justamente ahí— cuando ella volvió.

No regresó como amenaza.

No regresó como conflicto.

Regresó como un recuerdo.

La primera vez había fallado.

No porque su plan fuera imperfecto,sino porque no había contado con algo esencial:los amigos.

Ellos lo rescataron.

Lo sacaron de sus manos cuando ya empezaba a enredarlo.

El afecto genuino fue más fuerte que su veneno.

Eso no se improvisa dos veces.

Ahora ella espera.

Observa.

Aprende.

El reencuentro es simple.