He visto un poco de todo sobre el amor. Cada pareja es su mundo, un mundo que nadie puede comprender, solamente ellos se entienden. Son tan cariñosos con su otra mitad que me intoxica, es demasiada azúcar en el aire. Sin embargo, yo he presenciado parejas tóxicas y enfermizas, hasta tal punto que era más un “te odio” que un “te amo”.
Vale aclarar que nunca estuve con alguien, nunca me interesó y ni me piensa interesar. No sé si lo que siento a veces es miedo o incertidumbre, ya que…bueno…creo que no es necesario contar eso.
No obstante, una parte de mi quiere algo, quiere sentir cariño, quiere sentir y experimentar las mariposas en el estómago, esos nervios que te impiden mirar a los ojos a aquella persona. Pero claro, es un capricho. Un capricho que no se cumplirá porque el amor, no es lo mío.