Capítulo 4: San Valentín

14 de febrero

Hoy es el día de san Valentín, y en la ciudad está nevando, Ben, iba como de costumbre junto a su padre al instituto, llevaba una bufanda verde para el frio, un abrigo azul y un gorro verde que combinaba con su bufanda.

Ya hemos llegado — le dice su padre — hace unos meses que nos mudamos Ben, me alegra mucho que te hayas adaptando bien.

Bueno, ya sabes — responde Ben con una sonrisa irónica — no se puede evitar ser popular.

No dejes que el éxito se te suba a la cabeza — le reprendió su padre.

No papá... — empezó a decir Ben — descuida, todo estará bien, hablamos luego. Dicho esto, se despidió de su padre y caminó directo a la biblioteca, tenía que devolver un libro que había tomado para sus clases. En el camino se encontró con los Alphas, su grupo de amigos populares.

Que patético — fue lo primero que escuchó de Carter al recibirlo.

Sí que lo es — le siguió Roman.

Ty solo dijo — increíble — con asombro.

¿Enserio, tu padre aun te trae al instituto? — dijo Carter con cara de asco.

No era mi padre — comenzó decir Ben, ya estaba acostumbrado a mentir — era mi chofer.

Que genial — se alegró Carter.

Bueno, bueno — interrumpió Ty — ya es día de san Valentín, así que Ben, quizás no lo sepas porque eres nuevo este año, pero hacemos competencia de quien recibe más regalos o tarjetas de San Valentín.

Así que este año no será la excepción — siguió Carter — así que apostemos quien recibe más regalos este día,

Suena divertido — respondió Ben sin ánimos — si me disculpan chicos, iré a la biblioteca a devolver algo.

Con esto, se despidió de ellos y siguió su curso a la biblioteca. Al entrar a la biblioteca, una chica se le acerca, para su sorpresa, ella le habla — hola Ben, creo que nunca te has dado cuenta de que existo — empezó a decir — pero quería darte mi tarjeta.

Ben asombrado, recibió la tarjeta con agradecimiento — wow que linda, gracias por la tarjeta — dijo alegre. Parece que eso funcionó porque la chica salió corriendo feliz y sonrojada.

Bueno, aun sin poder asimilar esto, Ben se dirigió a la encargada de la biblioteca, ninguna chica se le había acercado antes en su antiguo instituto y menos a darle un regalo. Se acercó a la encargada — hola, vine a entregar este libro — dijo Ben.

Unnm, “como ser genial y popular” — leyó la portada la encargada — sí que estás loco ¿eh?

Bueno — respondió Ben — el que esté libre de pecado… jejeje y se fue dejándole la última frase a la encargada.

“Bien pues, ahora puedo reunirme con los Alphas” pensó Ben. Al salir de la biblioteca, se encuentra chocando con alguien, ¿pero qué diablos? — se quejó Ben. Cuando se fijó con quien había chocado, su enojo pasó a susto, diablos era Sid,

Ahh, pero ¿qué…?  — empezó a decir Sid — ahora me las pagarás. “Maldición, me encuentro con el loco de la escuela” pensó Ben.

Ben decidió irse por tranquilizarlo — lo siento hombre, ¿estás bien? — trató de tranquilizar Ben. — no me toques — refunfuñó Sid — no necesito tu ayuda — “necesito salir de aquí” pensó Ben.

¿Dónde está mi tarántula? — comenzó a preguntar Sid — estaba justo aquí, si le pasa algo a mi tarántula, te arrepentirás — amenazó Sid.

A Ben no le agradaba saber que cerca de el estuviera una tarántula, pero si hacia enojar a Sid, pues se imaginó a Sid bañándolo con una cubeta de tarántulas solo para verlo sufrir. — ¿una tarántula? ¡¡Que genial!! Asustan, pero son inteligentes y merecen ser respetadas — elogió Ben.

Mmmm quizás no seas un perdedor — se calmó Sid — al menos no tanto como Eddie. “seguro habla de Eddie Jone — pensó Ben — el chico que le lanzó una patata frita durante una lucha de comida. Dicen que Sid le lanzó espaguetis hasta que Eddie se puso a llorar. Desde ese día, todo el mundo le llama Eddie Espaguetis.”

Veía a Sid agachado seguro buscando la tarántula — hey — le despertó de sus pensamientos — ¿estás buscando la tarántula o qué? — preguntó.

Si claro — respondió Ben — debe estar por aquí.

Pues sigue buscando — le reprendió Sid — prueba en esos arbustos. No puede irse muy lejos.

Al rato buscando, Sid dice algo enojado — no la encuentro, ¿cómo piensas compensarme por esta pérdida?

“¿está hablando enserio? Tengo que pensar en algo rápido o estoy perdido” analizó Ben.

¿Quieres dinero?  — preguntó Ben — tengo 5 dólares por aquí, espera.

Olvídalo — respondió Sid — tráeme todos tus ahorros mañana mejor. Eres un perdedor Ben, y ahora me debes una muy gorda, desde hoy serás mi esclavo.

“¿esclavo? Bueno, es mejor que recibir una paliza” pensó Ben.

Y ya que eres mi esclavo — comenzó Sid — te daré una orden. — mm espera un segundo — trató de responder Ben — vale, ¿en qué puedo ayudarte?

Así me gusta — dijo Sid — ya sabes que hoy es día de San Valentín. Quiero entregarle una tarjeta a Emma, pero no me atrevo a hacerlo yo... — dejo algo sonrojado. “jajaja ¿enserio? Tú y Emma es la peor pareja que he visto” pensó Ben, o eso creyó porque Sid respondió — nadie ha pedido tu opinión.