FINALMENTE MARIPOSA
Tenía miedo, pero mi decisión debía ser firme. El hecho de que alguien te sea infiel, significa que no te ama, por mucho que me dolierá esa era la verdad, si lo hizo una vez volverá a hacerlo de nuevo. Decidí esperar a que mi bebé naciera, por ahora ella era mi prioridad, si ella, tendría una linda bebé tal y como yo, el mundo está lleno de cosas inesperadas pero al menos algo le podía agradecer a Aldair, me dio la felicidad más inmensa, ser madre, cuando llegó a este mundo, la recibí entre mis brazos, un pequeño ser humano que se amoldaba en mis brazos que ahora la acunaban, era tan pequeña y tan tranquila, quizá fue ahí cuando me dí cuenta de que el verdadero amor si existe, por ella, por mí, haría todo lo que estuviera en mis manos por vernos felices, así que una de las primeras cosas que haría alejarme de Aldair después del tiempo de recuperación del parto, tenía que dejarlo atrás, aunque sabía que él ya daba todo por terminado con la otra tipa, sabía que quizá volvería a pasar, no quería ser la que se sientiera mal consigo misma porque me cambió por otra, el hecho de que yo me alejará de él amorosamente hablando, no quiere decir que su hija tendría que vivir sin su papá, por supuesto que él siempre tendría abiertas las puertas para ver a nuestra hija, en el corazón de ella no mando yo, la veía tan pequeña, tan frágil y es ahí cuando sabes que tienes que convertirte en una mariposa para poder enseñarle a una nueva oruguita, mi hija, ahora lo era todo para mí. Los hijos no te atan a alguien, los hijos te enseñan a liberarte de todo lo que no es para tí, ahora me sentía tan bien. Miraba sus tiernos ojitos que apenar podía abrir, fui la más feliz con su nacimiento.
El tiempo pasó y evidentemente tenía que tomar una decisión díficil o dejar a quien creía el amor de mi vida o seguir como si nada hubiera pasado esperando al momento en que Aldair volviera a tener una falta hacia mí, el mundo era tan díficil, si, posiblemente sí elegía irme tendría que luchar por mi propia cuenta por el bien de mi hija,no era imposible pero dudaba de mi misma, entonces cuando la ví, tuve la fortaleza.
—Me merezco algo mejor, este no es el amor que merezco.
El amor de tu vida, debes ser tu misma, así que Aldair me miro con una expresión burlona después de que le dije eso.
—Por eso me iré. Pero eso no quiere decir que no nos vayamos a ver, nuestra hija siempre nos va a unir.
Así fue cómo tomé mis cosas y salí de ahí, probablemente la vida no sería nada fácil, pero quien dice que necesito el falso amor de un hombre, mamá me recibió con los brazos abiertos y la puerta de su casa abierta evidentemente en algún punto sería una bella mariposa que vuelve a volar sola cuidando a mi pequeña, pero por ahora solo me quedaba algo claro, que yo no necesitaba las sobras de amor de alguien, tenía que recibir el amor que de verdad merecía, si de verdad alguien me amaría tendría que hacerlo bien y si Aldair quería arreglar las cosas entonces tendría que venír a buscarme pero todo cambiaría en nuestra relación si eso iba a ser así, ahora yo iba a poner mis límites y a saber manejar mejor mi vida y situaciones. No tardó ni dos días en venirme a suplicar.
—Esta bien, pero yo no vuelvo contigo. Tu vuelves conmigo.
Le aclaré y le sonreí. Una mujer que ahora sabía que incluso si algunas cosas dolían primero tenía que poner mi bienestar primero y sobre todo el de mi pequeña, pero si volvía a cometer un pequeño error de nuevo entonces le daría una buena buena patada en el trasero y comenzaría a vivir por mi misma, luchando por mi preciosa hija y sobre todo por mi. Y así es como te conviertes en una bella mariposa, cuando dejas de ver algunos malos recuerdos con dolor y los ves como una enseñanza, había perdido algunas cosas, personas durante el camino pero había adquirido la experiencia y el conocimiento para poder tener una mejor vida, el dolor es inevitable pero te enseña a valorar los buenos momentos, así sería mi vida a partir de ahora, sería libre, el amor de mi vida soy yo y solo yo.