Lloriqueos y lloriqueos ¿o y adivinen qué? más lloriqueos...

Séptima Parte.

Era una cierta tarde. Las nubes alumbraban en todo su esplendor que se podía observar majestuosamente; El verano había cesado su ocurrencia; Enigmáticamente todo era tan familiar; [...] Sus ojos seguían increíblemente pareciendo gotas de miel acaeciendo en lo más profundo de un soliloquio lleno de flores doradas "Mis flores doradas" nunca te vayas lejos de mí; si un día tú te alejas; sabré que algo me hace falta;

Te amo... ¿Pero tú lo harás?.. ¡A quién le importa! ¡Yo te amo! Es suficiente... Tu pelo recorría cada centímetro de mi cuerpo eso me hacía remembrar aquello que había muerto hace tiempo "Mr. gato" o "Sr. gato" y su trágicamente veraz partida un 18 de Diciembre... Y yo me sentía el más afortunado... Por causa de mirar que cada día me seguía o continuaba siendo enigmático a cabalidad.       



#28738 en Otros
#8996 en Relatos cortos

En el texto hay: frases chidas

Editado: 03.08.2019

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.