Cuando eres creativa, lo ves como un don. Puedes crear mundos enteros en tu cabeza, historias y vivir vidas que en la realidad no podrías...
En tu mente, no solo eres una espectadora. Eres "Dios", pero también la jueza, jurado y verdugo. El control lo tienes siempre, con cada decisión y acción que tomas en tu "mundo" para moldearlo a tus decisiones.
Si
Muy bonito...
Pero eso tiene un precio
¿Un precio a imaginar?
¿Ahora hay que pagar impuestos a la imaginación?
No hablo de ese tipo de precio...
¿Entonces?
Ya lo sabes...
Alejarte del mundo real...
el mundo que no controlas en absoluto, que tus decisiones solo te afectan a ti y a nadie más...
Solo para perseguir un mundo de fantasía donde todo es perfecto, destruyes y creas a tu antojo...
Alejandote de la realidad, solo hará que al volver a ella, te sea más difícil recordar como vivir de esa manera, sin que tus sueños e ideales se cumplan por ser extremadamente complicados a menos que te esfuerces...
tú dime...
¿Sigues diferenciando la fantasía de la realidad?
Editado: 15.01.2025