Lo que callamos para no rompernos

Te extraño, aunque no se note

Nunca fuimos cercanos. Lo cotidiano se volvió ruido. Y el ruido, costumbre. Hasta que te fuiste. No pensé que iba a doler. No así. No por lo que fue, sino por lo que ya no puede repetirse. Ahora todo es pantalla, prisa, distancia. Y yo, preguntándome por qué extraño lo que tanto me molestaba. No sé si te lo dije alguna vez. No sé si lo escuchaste. Tal vez no lo dije. Tal vez no supe cómo. Pero te quiero. Aunque no lo parezca. Aunque no lo diga bien. Odio admitirlo, pero te extraño. Y deseo que volvamos a vernos. No para hablar de todo esto. Solo para estar. Para que el silencio no duela tanto.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.