Capítulo 3

-No sabes el susto que me diste- me dice mientras se separa de mi y observando me buen para ver si tengo algún rasguño o algo parecido. Al comprobar que no tengo nada fuera de lo normal se aleja un poco.

-Bueno ya viste que estoy bien ¿podrías por favor ayudarme a salir de aquí?- le pregunto tomandola por los hombros, ella asiente con la cabeza y va directo a buscar mi uniforme para dármelo.

Cuando cojo el uniforme de sus manos camino hasta el baño y me cambio, ya una vez lista me peino un poco el nido de pájaros que tengo por cabello. Cuando salgo le hago una seña con la mano para que me siga. Abro la puerta y miro para ambos lados cerciorándome de qué no haya nadie que conozca o viceversa ya que por lo que vi es el hospital donde trabaja mi mamá y sé que si me cachan estoy frita. 

Cuando no hay moros en la costa agarró la muñeca de Amanda y hecho carrera fuera del hospital como si mi vida dependiera de eso. Cómo me se esté hospital como si fuera la palma de mi mano cojo un atajo y como en 5 minutos ya estamos afuera y gracias a Dios nadie me vio ni nada por el estilo. Chequeo mis bolsillos y encuentro algo de dinero, creo que es suficiente para un taxi y llegar a casa. 

-Amanda vamos a buscar un taxi y nos vamos para casa-le sigo mirando para la carretera y al no recibir respuesta la miró  pero cuando ella me va a contestar es interrumpida por algo o más bien alguien. 

-¡¡EVOLTE!!- al escuchar mi nombre las dos giramos como la niña del exorcista hacia donde se escuchó el grito, logro ver la silueta de alguien a lo lejos y también logró distinguir quién es pero no estoy de humor para lidiar con el, yo que ya cantaba victoria y el que se aparece demonios. 

De momento vemos un taxi estacionado cerca de nosotras y rápido nos montamos. Le digo al hombre que hacelere y así lo hace. Cuando estoy segura que no nos siguen le indico al hombre la dirección de casa. 

-¿Quién e....- no puede acabar de preguntar ya que mi teléfono suena.  

Lo saco y veo que es Logan el imbécil que por poco hace que mi misión de huida sea desastre. Le cuelgo y apagó el teléfono. Dirijo mi mirada a Amanda en señal que continúe. 

-Como decía ¿Quién era ese? ¿Por qué te desmayaste? ¿Cómo sabías por donde coger para salir tan rápido como lo hicimos? Y ¿Por qué el idiota del amigo de mi ex te llevo al hospital?- me quedo atónita con el bombardeo de preguntas que me hace, cuando logró procesarlo bien y analizar bien las respuestas prosigo a contestarle. 

-Se llama Logan, te explico cuando lleguemos a casa, mi madre trabaja allí y pasaba casi todo el tiempo cuando pequeña en ese hospital y de verdad no sé de quién diantres me hablas- le contesto con calma y algo desinteresada. 

Ella asiente con la cabeza y al ver que no me va a preguntar o  decir algo más giro mi cabeza y me quedo mirando por la ventana todo el trayecto a casa cuando llegamos al portón le pago al señor del taxi, me bajo y al ver que Amanda bajo también me pongo en marcha para así poder entrar en mi casa. Al abrir la puerta y entrar me giro para ver a Amanda y la encuentro con la boca abierta, su esto fuera unos muñecos animados su mandíbula tocaría incluso el suelo. Suelto una pequeña risa y prosigo a ver a mi alrededor para revisar si mi hermano está o no. Y como suponía no está, así que tengo la casa para mi sola, genial.  

Al adentrarnos un poco más dentro de mi casa lo único que se escucha son nuestras pisadas y lo único que se escucha además de ello es nada, ahí un silencio ensordecedor, cosa que no me sorprende. Voy directo a las escaleras y subo directo a mi habitación. Miró de reojo a Amanda y ella me sigue todavía en estado de shock. Dudo mucho que pueda estar peor. 

Abro la puerta de mi cuarto, voy directo a mi preciada cama y me tiró. Escaneo mi cuarto para ver si alguien entro pero todo está tal y como lo deje, mira a Amanda y creo que está apunto de gritar. Suelto un par de carcajadas y ella me mira con cara de pocos amigos.  

-No puedo creer que está sea ti habitación, la mía no es ni la mitad de esto- dice mientras camina por la habitación observando todo y tocando algunas cosas. 

-Eso que no has visto mi baño y closet, creo que infartas y yo no quiero regresar al hospital- le digo mientras me siento en forma de indio. 

-No importa, bueno a lo que venimos- dice mientras se quita los zapatos y se sienta en la cama- y más te vale que me lo cuentes todo- me amenaza. 

-Pues yo soy asmática, me lo detectaron cuando pequeña en un ataque que me dio. Cuando me enojo demasiado ahí veces que me cuesta respirar ya que al estar enojada mi respiración se descontrola y se me van cerrando las vías respiratorias. Al parecer eso pasó hoy, hace demasiado tiempo que no me pasaba y por eso dejo mi inhalador en el casillero- le cuento mirando mis manos algo incomoda ya que nadie sabía de ello a parte de mi familia claro esta- En el hospital que estábamos es donde mi madre trabaja,  así que cuando no quería quedarme en casa cuando pequeña y ella tenía trabajo me llevaba al hospital con ella. Logan el que me llamo en el estacionamiento es el hijo del director del área de cirugía general su nombre es Marcus, mi madre y Marcus son buenos amigos y nos dejaban a Logan y a mi jugar en la oficina y explorar el hospital, claro está Logan es mayor que yo por 4 o 6 años no me acuerdo bien. Y por último no me recuerdo quién me llevo al hospital ya que le dije al idiota de Erick que llamara a mi hermano ya que el es el otro que tiene un inhalador por si las dudas- le termino de contar y lo que reina después es un silencio abrumador.  

Levanto la vista para verla y su expresión es de asombro puro, no puedo evitarlo y suelto una pequeña risa nerviosa, ella sale del asombro y me da un manotazo en el hombro. La chica pega duro, me sobo la parte donde me pegó y miro a ver si me dejó marca y efectivamente lo hizo, ella debería practicar boxeo no le vendría mal le veo futuro. Me río por mi pensamiento y me levanto a buscar algo para cambiarme.  

-Pues no lo sabía, además ese tal Logan se ve sexy por lo que logré ver. En serio no sabía que tu familia era tan interesante.-dice ella tratando de no sonar tan impresionada y algo indiferente- pues si, cuando fui a buscarte vi a un montón de personas rodeado a alguien así que fui a ver y lo que vi fue a ti en brazos del amigo de mi ex- dice de momento con algo de sorpresa. 

-¿Y quién es el amigo de tu ex?- le pregunto mientras cojo una blusa suelta,  un licra negro y mi perfume favorito. 

-Pues es el mismo que te hizo caer hoy en la cafetería cuan...- se calla al oír el estruendoso ruido de mi perfume favorito caer directo al piso-¿Oye estás bien?- pregunta pero yo solo puedo ver el desorden que ahí en el suelo. 

Estoy en shock ya que el simio idiota fue el que me ayudó y porque mi perfume ya no existe. Siento algo tibio en mi mejilla cuando paso la yema de mis dedos por allí veo que es una lágrima y ahí me doy cuenta que estoy llorando por un estúpido perfume. 

-Si estoy bien- le digo mientras termino de secar mis lagrimas- voy a cambiarme, si quieres coge algo de ropa que creas que te pueda servir y cámbiate. Ahhh ni sé te ocurra recoger los restos del perfume que yo lo limpio cuando salga- le termino de decir mientras me encaminó al baño. 



Al llegar al baño abro la puerta y entro, cierro la puerta y me miró en el espejo. Me hago una coleta y me cambio, abro la puerta y salgo, al salir miro a Amanda y ya ella está cambiada también así que procedo a coger el pequeño bote de basura que está serca de el buró para recoger los vidrios. 

-¿Y qué quieres hacer?- le pregunto mientras dejo el bote de basura en algún rincón del cuarto- ¿O qué quieres hacer?- le pregunto ya que no escucho su respuesta.  

-Pues ¿te puedo hacer una pregunta?- me dice algo dudosa y curiosa a la vez. 

-Claro dime- le digo mientras vuelvo a la cama. Ella se acuesta y me mira. 

-¿Porque tu cuarto se ve tan simple? Digo debería de estar decorado ¿No?, con fotos tuyas y otras cosas- dice, y yo solo miró el cuarto.