Maldito café, me hace pensar en la vida
Me hace recordar el sentimiento del asolar que toca mi ventana
La continua asiduidad que carcome mi alma
El regreso que ruego en silencio
El enorme sentimiento inconmensurable
La dulce mentira que revuela en mi cabeza de un sempiterno de un nosotros
Mi ansiedad es una cruel perenne, mi vida consumida en un ojalá
A gritos en la oscuridad suelto la luminiscencia de mi esencia
El ademán que haces para regresar me llena
Termino en resiliencia para no acabar conmigo
Soy la efervescencia en tú sangre
Soy sin más la limerencia bajo tú piel
Soy ese acendrado que jamás podrá dañarte
Desgraciado amor inmarcesible
Así que aún espero el desenlace de esta caótica historia.
12:05am.
Subiré todo acorde a como me guste, no fue lo primero que escribí, pero fue lo primero que realmente sentí en mí.